Año 1855
Un fuerte estruendo despertó del sueño al pequeño Yoon Gi. Se incorporó agitado y sudando, estaba asustado debido a una pesadilla. Una vez más aquellos niños de la iglesia se aparecían tras él y lo empujaban, pero esta vez a un río, y dado que no sabía nadar, la desesperación por salir de allí lo asfixiaba.
Se sentó sobre el borde de la cama y frotó sus ojos quitando así esas ganas de llorar. Su cuarto estaba totalmente sumergido en la penumbra, pero eso no le importaba. Quería ir a dormir con sus padres por lo que agarró su gruesa manta y se cubrió yendo hasta la habitación sin hacer ruido. Al abrir la puerta esta hizo un chirrido molesto, notó que en aquella cama alguien se movió. Su padre lo observó y le sonrió estirando su mano.
El niño le devolvió la sonrisa y se acercó lentamente hasta que agarró aquella mano de áspero tacto.
—¿Qué haces despierto a estas horas, hijo?—el hombre le dio un beso en la frente y lo sentó en sus piernas.
—Tuve una pesadilla. Soñé con esos chicos de la iglesia.
—Yoon Gi, escucha esto—miró al niño a los ojos y éste le prestó atención —"Y cuando estén orando, si tienen algo contra alguien, perdónenlo, para que también su Padre que está en el cielo les perdone a ustedes sus pecados. Marcos 11:25."—le dijo el hombre, dejándolo sin palabras.
Otra vez le repetía frases de la Biblia. Yoon Gi no la leía porque no le interesaba y su madre a veces lo obligaba, prefería leer sus otros libros. No tenía más opción que asentir a lo que ellos le decían; quería mucho a sus padres pero éstos solían estar muy metidos en sus salmos y creían que todo se iba a solucionar con orar y repetir lo que oían en la iglesia. No le gustaba nada que le dijeran que debía perdonar a esos niños que tanto mal le hicieron; los odiaba con todo su ser y la misericordia no existía para él, de hecho tenía anotaciones sobre cómo poder vengarse. A pesar de que era un poco retraído y miedoso con ciertas cosas, estaba muy enojado con ellos. Escribía mucho en sus hojas con la poca tinta de la pluma que encontraba en la sala de su padre y las guaradaba debajo de la cama. Y todo lo sacaba de esos libros, libros que su tío le regalaba.
—Tú eres un niño bueno, Yoon Gi, pero esas cosas que he visto... Tus anotaciones—el pequeño lo miró un poco asustado y pensó que lo regañaría—.Eso no está bien. No debes hacer lo mismo que ellos.
Las palabras de su padre eran duras de comprender para un niño que tanto había sufrido, pero la serenidad con la que le hablaba lo tranquilizaba. Sabía que su mamá y él peleaban en ocasiones pero aun así los quería. Su padre era quien estaba más pendiente cuando su tío Yoon So quería acercarse ; creía haberlos visto discutir en algun momento, pero no quería meterse donde no le incumbia.
Padre e hijo hablaron por unos largos minutos más. Susurraban para no despertar a la mujer, pero fue demasiado tarde cuando otro estruendo resonó en el cielo y Yoon Gi gritó del susto. Se abrazó a su padre, tembloroso y observó que su madre los miraba a ambos con los ojos adormecidos.
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Caminos al infierno YoonMin +18 [Parte 2]
Fanfiction⚠ACTUALIZACIONES LENTAS El bien y el mal siempre se han visto envueltos en el conflicto. Quién gobernará en el mundo es imposible de saber. Los ángeles y demonios han luchado durante toda la existencia, involucrando al ser humano de por medio. Ver...