Gira mundial (K/DA)

16- De excursión (parte 2)

Narra Xoel

Xoel: ¡Vale, esto dejó de tener gracia hace mucho! ¡¿Te importaría parar?!

Mi plan era burlarme de un mimo... ¡Pero no al revés! Me encontraba con un mimo delante de mi, literalmente imitando cada movimiento que hacía.

Kai'Sa: ¡¿Qué dices?! ¡Si sigue siendo muy gracioso!

Kai'Sa y Ahri estaban partiéndose de risa. Las dos agarradas a una barandilla porque parecía que se iban a caer al suelo. Y seguramente era por eso que el mimo no se cansaba.

Xoel: ¡No tiene gracia!

Kai'Sa: ¡Sí que la tiene!

Indignado, miré al mimo, quien también imitó mi cara de mal humor. Pero claro, lo hizo con rasgos tan exagerados que parecía un gorila. Finalmente, se me ocurrió una idea...

Xoel: Así que imitarás todo lo que haga, ¿eh?

Como no, el mimo no dijo nada, pero sabía perfectamente lo que estaba pensando. Iba a seguir imitándome...

Xoel: ¡Entonces imita esto!

Me vine arriba, y me dispuse a hacer una voltereta. Pero no una normal, sino impulsándome más fuerte de lo habitual. Seguro que el mimo no iba a poder imitar eso. Pero me impulsé tan fuerte que...

Xoel: ¡Auch! ¡Error de cálculo!

No pude incorporarme y acabé dándome de espaldas contra el suelo. Esto hizo que Kai'Sa se riese aún más fuerte, mientras que Ahri se acercó rápidamente y se arrodilló, aunque aún estaba sonriendo de reírse antes.

Ahri: ¿Estás bien?

Xoel: Si, lo estoy. Solo me he dado fuerte, pero puedo moverme.

Al incorporarme un poco, me giré para mirar al mimo. Me estaba mirando burlonamente con una mano en la cadera y otra en la boca, haciendo un gesto exagerado de sorpresa. Fruncí el celo mientras Ahri se reía un poco más, y luego el mimo se fue.

Xoel: ¡Eso, vete! ¡Reconoce tu fracaso!

Ahri me ayudó a ponerme de pie, mientras que Kai'Sa aún se recuperaba del ataque de risa.

Kai'Sa: A eso se le llama karma.

Xoel: ¿Karma de qué?

Kai'Sa: ¿Te recuerdo que eras tú quien quería burlarse del mimo?

Xoel: Si, vale. ¡Pero tampoco iba a pasarme!

Kai'Sa: Ya, porque tú lo digas.

Me llevé una mano a la espalda. Me había dado fuerte cerca de la columna, y aún dolía un poco.

Ahri: ¿Seguro que no quieres que te llevemos al hospital o algo?

Xoel: Que sí, tranquila, que no es nada.

Ahri: Es que ha sido una caída brusca, y verte con la mano en la espalda hace que me preocupe...

Se la notaba preocupada... Sonreí para que se tranquiliza.

Xoel: Mira, si pasan las horas y me sigue doliendo, vamos al hospital. ¿Eso te tranquiliza?

Ahri: Bueno, un poco sí.

Ella sonrió ligeramente para luego abrazarme, con cuidado de no apretar mi espalda. Era tan mona... ¿Cómo no quererla?