Alas para Volar

Capítulo 15

LENA

El taxi se estacionó justo afuera de lo que parece ser el gimnasio. Kara sacó algunos billetes y le pagó al taxista, yo salí casi inmediatamente después de que el taxi se estacionó, para abrir la cajuela del taxi y bajar la silla de Kara. La dirigí a la puerta del lado de Kara, ella me agradeció con una sonrisa al abrir la puerta. Ella hizo el mismo movimiento que hizo cuando entró al taxi. Cuando se acomodó adecuadamente en la silla, cerré la puerta del taxi.

Kara: Gracias Lena (Extendí la mano para que pudiera darme mi mochila que aún seguí colgando)

Lena: No, descuida yo puedo llevarla... (Dije en modo autoritario)

Kara: Lo sé, pero tú llevas también la tuya, así que lo justo es que yo lleve la mía

Lena: Tranquila, yo puedo llevarla

Kara: Esta bien tu ganas. (Alcé las manos en modo de derrota y avancé hasta la entrada del edificio)

Lena: Gracias (Avancé detrás de ella)

Al entrar y recibirnos la recepcionista, nos pidió nuestros nombres y cruzamos las puertas. Había toda una serie de máquinas para hacer ejercicio que nunca imagine que existieran, además de que no sabía cómo se ocupaban la mayoría. Pude observar que también había personas con lesiones medulares como Kara, hacían ejercicio con instructores que parecían saber lo que estaban haciendo.

Kara: ¿Por dónde quieres empezar?

Lena: Sinceramente no sé (Dije un poco avergonzada ya que no había estado en un lugar para hacer ejercicio)

Kara: ¿Quieres que le hable a algún instructor? Podría ser el de Alex, es muy bueno.

Lena: Supongo que sí, ¿Y tú?

Kara: Igual, iré a hablarle a uno de aquellos instructores para que me pongan una rutina.

Lena: Esta bien.

Estuvimos alrededor de dos horas en aquel lugar, yo estaba muy cansada. Franco, así se llama el amigo de Alex que me puso la rutina, cabello negro lacio, barba de candado perfectamente delineada y mucho más alto que yo y muy amable y en ocasiones sentía que me estaba coqueteando y podía sentir la mirada de Kara encima de mí cada vez que Franco se acercaba a mí para preguntarme cómo iba, veía el rostro de Kara con el ceño fruncido a lo lejos, algo que siempre me pareció muy gracioso. Pero cuando Kara estaba concentrada con sus ejercicios yo la miraba, veía como las gotas de sudor recorrían desde su frente hasta las clavículas, observaba como todos sus músculos del brazo se tensaban y como ella apretaba la mandíbula por el esfuerzo hecho, su cabello rizado pegado a su frente, era una intrusa que aprovechaba su distracción para poder admirarla un poco más y confirmar con cada día que me gusta, Kara Danvers me gusta y mucho.

KARA

Observaba como Franco miraba a Lena, la forma en la que coqueteaba y sentía un poco de rabia cada vez que se le acercaba y la tomaba de la cintura para que pudiera encontrar equilibrio o incluso cuando la tomaba de la mano y se acercaba mucho a ella cada vez que le explicaba cómo funcionaba cada aparato. Lena llevaba una sudadera gris, dos tallas más grandes de lo que es en realidad, una cola de caballo que sostenía su cabello lacio y negro y unos leggins que marcaban su figura. No podía dejar de observarla.

Observé como Lena se dirigía a unos de los asientos en una esquina del gimnasio, terminé de hacer mi ejercicio y me dirigí a Lena.

Kara: ¿Cansada?

Lena: uffff, demasiado

Kara: ¿Quieres irte? Ya acabe de hacer lo mío

Lena: Claro, solo deja me despido de Franco y le agradezco (Me paré del asiento y me dirigí a Franco y le toque el brazo, el volteo a verme y me sonrió. Me despedí de él y le agradecí por lo de hoy, él me dijo que era su trabajo y me preguntó que cuando nos volveríamos a ver, yo le contesté que pronto, que me había gustado el ejercicio, entonces él empezó a preguntarme sobre donde vivo y si tenía algún día disponible para ir a tomar algo, confirmé que yo no estaba loca, Franco si me estaba coqueteando todo este tiempo, entonces me puse nerviosa y no sabía cómo salir de ese momento tan incómodo)

Kara: (Lena estaba tardando mucho en despedirse de Franco, pude observar como él sacaba su celular para anotar algo y estaba casi segura que serpia el número de Lena, quería saber si Lena se lo daría, seguí observando hasta que vi como Lena empezaba a jugar con sus dedos de sus manos, podría decir que se sentía incomoda con él, pero no sé si ella podría manejarlo, aunque si pudiera desde hace mucho le hubiera dicho que tenía novio, pero supongo que por la cara que Franco tiene, aún no le dice. Decidí ir al rescate de Lena.) ¡Cariño! ¿Todo listo para irnos?

Lena: (Escuché la voz de Kara detrás de mío y como Franco alzaba la mirada para poder ver a Kara, pero lo que no comprendí del todo, es lo que acababa de gritar. Entonces después de lo que al parecer fueron segundos, logré entender todo. Y sentí como la mano de Kara se deslizaba en la mía, sintiendo su calor contra mi mano y un ligero apretón.) Claro amor... (Es lo único que pude decir y una ligera sonrisa salió al ver a Kara a lado mío con una mirada penetrante hacia Franco que él nos miraba sin entender lo que pasaba)

Kara: Vámonos entonces (Dije lo más segura que pude haber sido en toda mi vida. Le di un beso ligero en la mano. Nos dimos la vuelta y seguimos hasta la recepción tomadas de la mano, hasta que Lena me soltó para poder abrir las puertas de vidrio y que saliera)

Lena: Gracias (Es lo único que podía decir ahora, seguía concentrada por la sensación de su beso en mi mano, sentía esa conexión)

Kara: No hay problema... Pero sinceramente Franco sí que estaba muy interesado en ti.

Lena: Sí bueno, no me había dado cuenta hasta que me invito a salir

Kara: ¿Te invitó a salir?

Lena: (Me empecé a reír por su asombro de Kara) Sí

Kara: ¿Y supongo que lo rechazaste no? Tienes novio (Miré a Lena y ella se quedó callada, pensativa)

Lena: Sí, claro (Como decirle que no fue por Olsen, si no fue por ella. Trato de cambiar de tema) ¿Y tú como sabes que estaba interesado en mí?

Kara: (Rayos) Yo bueno, es que... Por Dios Lena, se te quedaba mirando mucho, todo el tiempo, no te quitaba la mirada de encima, casi corría hacía a ti cuando se te dificultaba alguna rutina o ejercicio.

Lena: ¿Acaso estas celosa Kara?

Kara: Yo no... no, es solo que... bueno, era evidente

Lena: (Me empecé a reír por como Kara se empezaba a ruborizar hasta el punto de parecer un tomate) Sí claro.

Kara: Es enserio Lena.

Por fin se paró un taxi y nos subimos a él directo a departamento. La mitad dl trayecto fuimos en silencio, hasta que Lena rompió el silencio.

Lena: ¿Por qué me diste ese beso Kara? (Me dirigí a mirarla. Ella estaba perdida en sus pensamientos)

Kara: Se me ocurrió para que se viera mucho más creíble y no es como que tuviera otra opción, no podía dártelo en la mejilla o en los labios, no alcanzó (Se me escapó una risa irónica)

Lena: ¿Y porque no lo haces ahora? (Simplemente salió, no pude detenerlo, fue demasiado tarde)

Kara: No puedo Lena, estas en una relación. (Justo cuando iba a decir algo más, Lena giró mi cabeza para mirarla y solo pude sentir los labios de Lena en los míos, suaves, húmedos y salados por el sudor del ejercicio sintiéndose prisioneros de los suyos, yo le correspondí el beso tratando de sujetar su labio con los míos, traté de darle una ligera mordida en el labio inferior de una manera salvaje, pero ella lo hacía de manera delicada, tocando tan suave por segunda vez mis labios, haciendo que mi necesidad de besarla fuera más, era la provocación lo que me hacía querer más, no supe cuánto tiempo contuve la respiración, solo sentía la respiración de Lena en mi rostro. Su calor en mi cuerpo, sentía como mi mundo se transformó en solo un beso de ella. Hasta que ella se separó de mí, pero aún tenía sus manos sujetando mi cabeza, Lena recargo su frente con la mía, no podía pensar en nada más. Solo supe que podía estar estar así por mucho mucho tiempo más.