¿Por qué lo recordaría? [Rusia x Alemania]

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Era una tarde con clima hermoso, el sol acariciando las bellas pieles de varios países, el aire fresco con olor a  polen.

Ahí se encontraba Alemania luciendo un estilo relajado si ser demaciado formal, el negro de su cara se veía tan elegante, el rojo hacía relucir sus mejillas teniéndose un intenso color escarlata y su color dorado brillando como si de oro se tratara, que con esa cara lo acompañaba una hermosa y casi perfecta forma de caminar.

Alemania es un país bello con lindas facciones, muchos pasan desapercibido su inimaginable belleza, pero el que sabía admirar, podía deleitar sus ojos con la pura belleza del europeo y ese era el caso de Rusia que lo estaba observando "discretamente" mientras estaba sentado en la mesa de la cafetería. Sus planes según era quitarse y distraerse de la cita que había tenido con su novio pero que solo recuerda al tricolor de menor tamaño, en esa increíble vista, pero el destino para su buena o mala suerte siempre lograba coincidir casi siempre a los dos países en el mismo lugar.

—Niemcy, ¡hola!, es lindo verte.— el polaco estaba tan cerca del alemán donde se confundiría que se iban a dar un beso pero solo se puso de puntitas para abrazar a el tricolor.

Lo cual hizo tensar al euroasiatico pero tan pronto se abrazaron y no pasó nada más se relajo, siguió conversando con sus hermanos, al parecer estaban almorzando en familia para poder relajarse y contar su semana, pero sinceramente nadie decía nada pero para nada era incomdo, son familia después de todo.

En un desvío de su mirada vio a los dos europeos reír, en lo que se enfocaba ver Rusia era por supuesto a su bello Alemania, le resultaba tan hermoso e increíble ver los dientes del tricolor tan filosos como una piraña, se alegraba de que ya no sintiera pena y que no cubriera con su mano en su boca cuando se reía, pero al que no compartía esa misma sensación era Polonia, el mismo país sabía que ya pasó esa etapa de sufrimiento realmente lo sabía, ya eran tiempos de olvidar, conocía a el alemán lo suficientemente bien para decir completamente que jamás sería como su padre que incluso mejoró, siendo incluso mejor que sus predecesores sin utilizar la violencia para ser exitoso, pero aún era un poco perturbador para el polaco le era difícil cerrar lo suficientemente bien la herida, que cicatrice y se cure. El no era un experto en ocultar sus facciones claramente se notaba el miedo con una sonrisa nerviosa, el alemán fue el primero en saberlo haciendo solo sonreír sin dientes, claro le género inseguridades pero él sabía por qué actuaba así, solamente lo agarro de la mano y fueron como dos niños pequeños hacia la heladería.

— Sus dientes son totalmente hermosos.— dijo gruñendo entre dientes lo cual termino que sus hermanos lo vieran confundidos. — ¡oh! nada, nada xexexe.— dijo apenado mientras casi terminaba su comida.

[...]

—Como te decía, siempre termino enojandome cuando me ganan en parchís, es que literal soy buena onda y sabes Austria parece un amigo y de pronto te ¡come!— decía el polaco mientras saboreaba su helado.

El tricolor se empezaba aburrir, el era muy tranquilo pero necesitaba adrenalina en su vida así que solamente entre carcajadas le embarró con su helado de fresa en sus mejillas simulando rubor a lo que el polaco le siguió el juego haciéndole lo mismo, la tienda solo se escuchaba el eco de las risas de los europeos a lo que cuando las miradas se enfocaban a ellos solo decidieron dejar el lugar entre risas.

Fueron al parque que estaba a unas 4 cuadras de la heladería, corriendo como si alguien los persiguieran incluso tarariaban una canción de escape, cuando pisaron el pasto se dejaron caer cansados, aparte con el sudor el helado se derretía, reían los dos, Alemania se divertía más actuando como un niño, como lo recordaba antes. Sentía que la vida era de ser serio y aburrido, antes de tener un cambio que aún le daba pena y a la vez felicidad recordar cómo alguien le dijo que dejara de preocuparse por el pasado de su padre y abuelo, decidió dejar de ser como el estereotipo que lo percibían y ser el mismo.