—Huening, te vine a buscar, has tardado casi una hora o más en volver a casa —explicó Lea acariciando el hombro de Kai—. No sabía que Binnie era tu amigo.Ahora me dices Binnie...
Pensó el pelinegro, hasta que sintió la mano del más chico recorrer su espalda. Este se había separado de la chica.
—No es mi amigo —sonrió Huening—, es mi novio.
¡¿Qué?!
— ¿Qué? —Lea leyó sus pensamientos—, no lo sabía.
¡A que no adivinas! Yo tampoco.
El chico no podía articular frase alguna. Algo sí, le había facilitado esa parte. Aunque, ¿qué parte? Sí quería salir con Huening, ¿pero tener una relación?
La última casi salía en el periódico.
— ¿No escuchaste, hermana?
Tal valentía en sus palabras impresionaron a Soobin.
—La verdad sí, Kai —la chica observó a todos lados con una risa nerviosa—. Es que esto es nuevo y...
— ¿Y?
Choi parecía pintura en la pared.
—Nada —respondió Lea sonriente—. Pero vámonos ya. En serio nos castigarán.
—Está bien —volteó a ver al pelinegro— Adiós, novio.
Y se giró hacia la salida sacudiendo su brillante castaño cabello en el acto.
No, no, no... ¿Esto sólo me sucede a mí? No quiero compromiso, no quiero cargar con nadie.
No quieres lastimarle ¿Cierto?
No se trata de eso.
Oh, sí que lo hace.
Cállate conciencia inútil.
Después de unos pensativos segundos, nuestro protagonista volvió a la realidad.
—Bien... Ahora tengo novio. —Habló para sí. Levantó las cejas y mordió su labio algo inquieto.
Una fuerte corneta le hizo sobresaltar y observar hacia abajo sorprendido. Allí, desde la cima de las escaleras de la estación de Seúl, el pelinegro cerraba sus ojos con fuerza mientras recibía todo el viento en su fino rostro, luego de la partida del metro que hace minutos había llegado y no había notado por la presencia del castaño.
•••
— ¿Dónde estabas? —preguntó la señora de brazos cruzados sentada en el mini-sofa.
—Esperaba el metro en la estación.
Huening Kai, apenas llegó a su humilde hogar, se dirigió a su habitación, aunque en camino al cuarto su madre comenzó a invadirle. Lea aún andaba estacionando el auto familiar, por lo que le aportó tiempo para evitar las preguntas de la progenitora cuando supiese lo de su "novio", es decir, tiempo de escape antes de que la chica llegara y jugase su fiel papel de informante.
— ¿Y anoche?
Un nudo se hizo presente en su garganta cuando iba a medio pasillo. Detuvo el paso para meditar una respuesta.
—Estuve en casa de un amigo de la Universidad —dijo finalmente, algo dudoso.
Su madre tardó en contestar ¿Se lo creería?
—-Hmm, está bien.
¡Jesús inocente! No me descubrió.
Suspiró con alivio. Aunque luego del tan largo día, tal vez su habitación no era el mejor lugar para desahogarse.
—Voy al baño. —Mintió a lo que se encaminó por la puerta trasera hacia el "jardín".
— ¡Está bien! Pero no te tardes un milenio, que tus hermanas no se han aseado aún —El castaño se paró antes de salir, su madre hizo una pausa para murmurar algo que pudo escuchar— Bahiye, ¿ya te has duchado?
—Claro mamá, ¿no me viste? ¿O solo quieres joder a mi hermano? —chilló la menor de la familia desde la sala, delatando a su superior— Si quieres llevarlo a él todo controlado no me impliques, vaya fastidio... —se quejó por último antes de pasar por el mismo pasillo donde Kai se escapaba y ni siquiera notarle.
La chica no estaba del todo hablando por sus hormonas de adolescente. La señora de la casa siempre mantuvo a Huening más vigilado y recto que a sus hermanas, por alguna razón tenía una especie de obsesión con él ¿Sería por ser el chico del hogar? ¿O había alguna otra razón?
Kamal alzó las cejas observando hacia el suelo, su relación con su madre no era la mejor, pero ahora sólo tenía algo en la mente, salió hacia el patio.
Llegó al pequeño espacio donde habían solo algunas flores en sus respectivas macetas y una lavadora, tan poco debido a que vivían en un departamento pequeño que se situaba en una segunda planta.
Eso no era un problema para el castaño, al menos podía ver el cielo ya casi completamente oscurecido por la tardía hora. Se sentó en el suelo de losa y observó fijamente una de las estrellas resplandecientes.
— ¿Qué hice? —sonrió con nostalgia— Sé que tendrá consecuencias —bajó un poco el tono de voz—, pero ¿y si lo hago bien? ¡Entonces ya no será tan horrible el dolor! ¿O no...?
Bufó algo deprimido. Se hallaba confundido, buscaba una respuesta ¿Todo estaría realmente bien?
— ¡¡Huening Kamal Kai!! —se sobresaltó al escuchar a su madre vociferar.
" PUM PUM PUM "
Los golpes en la puerta del baño se hicieron audibles hasta el mini-patio donde Kai casi temblaba.
Oh, no...
Al parecer ya Lea llegó, al parecer la señora Huening sabe que su hijo, al que más "lleva controlado" tiene novio.
ChoiDebbie_
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Desde los ojos del angel | Sookai.
FanfictionChoi Soobin es un chico adinerado, creído y extremadamente popular de veinte años. Huening Kai, un angel caído con apariencia de un chico de dieciocho; vive con el objetivo de cambiar a Soobin por completo y hacerle comprender el verdadero signific...