El ojiazul estaba arreglando su traje, su mamá estaba detrás de él.
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Estoy tan orgullosa de ti hijo, serás un gran esposo y un gran papá, y trabajarás con tu padre en la empresa, es un sueño que todos quieren - dijo Columba acomodandole el saco
Gracias....- dijo Alonso, no estaba emocionado
No estás feliz?- preguntó sería
No.....no lo estoy y nunca lo estaré, si no es con Jos... pero ya no importa, solo quiero que estés feliz- dijo Alonso
Más te vale mantenerme feliz por mucho tiempo- dijo Columba aún seria.
Vaya madre tan amorosa.
...
Jos estaba sentado en la banca del parque que estaba enfrente de la casa de Alonso. Había una limusina afuera.
Llevaba ropa normal, ya que no iría a la boda, estaba invitado, pero sería estúpido ir.
Canela miraba la puerta, esperando a que Alonso saliera. Y cuando el pequeño salió, sus ojos brillaron, ese chico se veía realmente guapo con el traje de novio que portaba.
José tenía tantas ganas de abrazarlo y decirle que no se casará, pero no podía.
Alonso subió a la limusina junto con su madre y se fueron de ahí.
José comenzó a derramar lágrimas, su pecho dolía mucho.
Estaba perdiendo al amor de su vida.
Sé que Alonso no será feliz con Carla, y Carla tampoco con él, por qué seguir con esa estupidez?- pensó José - Si Alonso se va, yo me muero
Prometí que estaríamos juntos, y lo estaremos.
Fue a su moto, pensó por unos minutos, haría una locura, pero así sería feliz.
Subió y siguió la limusina en la que iba Alonso.
...
El ojiazul llegó a la iglesia, entró y se fue a acomodar.
Suspiro, estaba nervioso, y suponía que Carla también.