2 Lista

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-Sanders quieres venir a mi oficina.- Cam me llamó desde su despacho, me levanté era mi jefe gruñón y un gran amigo, ya que se casó con June mi mejor amiga desde secundaria.
-Que quieres Cameron.- le pregunté mientras me sentaba en la silla al frente de su escritorio.
- Que tal si salimos el viernes, June conoció un nuevo Club es algo al estilo June ya sabes como es ella.- sonrió al mencionar el nombre de mi amiga, él estaba muy enamorado de ella. - Además Zöe te ves cansada últimamente, será que te pongo a trabajar duro.- Añadió mostrando todos los dientes con una sonrisa
-No jefe no lo haces es solo que... no he dormido bien es sólo eso.- me levanté para seguir programando citas para Cameron, sobre mi hombro le dije. - Cam nos vemos el viernes.
Salí de la oficina y me senté en mi escritorio, he sido asistente de Cameron el me ayudó mientras estaba en la universidad, en una fiesta conoció a June y llevan un año de feliz pareja casada.
Quería Cafeína así que le avise a Cam que iba por café y él pidió uno para él, me dirigí a Starbucks que quedaba por un milagro cruzando la calle, casi no habían personas, solo un hombre mayor con su esposa y otro no más de 30 años y el condenado estaba guapo, me sonrió y le devolví el gesto, éste se levantó y se dirigió hacia donde yo estaba, me puse rígida y nerviosa, pedí los cafés y esperé, hasta que el guapo me habló.
-Hola soy Bruno y tú eres?.- ladeó la cabeza y pestañeo
-Soy Zöe.- le di una sonrisa y me entregaron los cafés
- Un gusto Zöe, eres de por aquí.- vaya hombre directo
Asenti
- Trabajo en Raynold's .- señalé el gran edificio que quedaba al otro lado.
- Entiendo, quieres que te ayude.- señaló los cafés
negué con la cabeza
- No gracias debo irme.- no le di oportunidad de que se despidiera, eso fue raro, Bruno era guapo, vestido con traje de diseñador y con su vello facial estilo candado, pero estaba enfocada en llevarle el café a mi jefe .
Llegué al edificio y me encontré en la oficina a June besuqueandose con  Cam, tosi para que se separaran June casi se cae.
- Demonio Zöe .- June chilló mientras se acomodaba la ropa
- Lo siento nena, pero tu amor quería un café, no deberías estar en el hospital.- arquee una ceja June era cirujana muy buena.
- No, bueno salí temprano.- Se acomodó el cabello, ella era linda, su melena eran rizos negros, su piel era blanca y tenía unos ojos whisky hermosos, siempre usaba vestidos, solo usaba vaqueros cuando sale a la montaña.

-Entiendo, bien los dejaré solos.- le entregué el café a Cam y le tiré un beso a June, salí de la oficina, miré el reloj quedaban dos horas para irme a casa.

Hice trabajos pendientes que tenía, me concentré e ignoré los gemidos silenciosos que estaba dando mi amiga en la oficina de mi jefe, organicé la agenda de Cam y la dejé encima de mi escritorio para cuando el saliera la viera, salí del edificio, vivia a unas dos cuadras del edificio en un complejo de apartamentos, así que casi no usaba el auto, siempre caminaba.

Llegué al departamento y me encontré una escena que no quería encontrarme pero estaba acostumbrada, a mi hermanito envuelto con su acostón, donde tiré la puerta para que me escucharan se separaron de pronto y el acostón rubio de James salió corriendo, era fácil distinguir a los gemelos James tenía sus ojos ambar y Jason los tenía cafés siempre me he preguntado por qué los ojos eran lo unico que tenía diferentes, James me sonrió y salió detrás de su acostón.

Compartía el departamento con James, ya que me dio el campo cuando Jason se fue para hacer lo que él quería tener éxito en la publicidad, a parte era más apagueda a James, éste salió de su habitación y se sentó en el sillón a la par mío.

-Que hay de nuevo viejo.- me revolvió el cabello y le pegué en el estómago.

-Lo mismo de siempre, encontrarte con la rubia, aunque conocí a alguien fue raro.- encendí la TV

-Lamento eso nena pero es mi departamento, quién es el desafortunado.- se rascó las pelotas.

-Se llama Bruno, era guapo.- lo miré de reojo 

-Bien y que esperas campeona ya llevas bastante sin acostón.- se rió y se fue donde la rubia, apagué la tele y me  metí en mi habitación 

James tenía razón ocupa un acostón, estaba practicamente sumergida en el trabajo y no salía a divertirme, así que hice una lista, tengo que salir con 26 hombres cada uno debe empezar con una letra del abecedario y ya tenía el primero "Bruno" , sonreí ante la idea y me puse los auriculares para escuchar música y poder dormir.

El Abecedario de ZöeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora