Gótico: Seducción Mortal (R18)(Dramione)

capitulo 3: ¡Vivo!

Llegaron Harry, Luna y Hermione a una puerta más, como siempre y ya no parecía sorpresa que se abrieran sola, dentro eran hileras de casitas blancas, pulcras, limpias, las callejuelas que se veían, eran de piedra y sin una mota de polvo, la pulcritud era algo que adoraban los Nefilim

-Estos son los dormitorios de los Nefilim… Hijos de ángeles y humanos… son los ángeles caídos, cuidado con ellos también, son soberbios, quizás más que los elfos y las hadas, tampoco son lindos y tiernos, podrían matarlos en un abrir y cerrar de ojos y su magia no sería suficiente para defenderse

De pronto, las puertas de las casitas se abrieron y comenzaron a salir los nefilim… se sorprendieron aún más, esos seres humanos eran increíblemente hermosos, todos con extrañas vestimentas, los que parecían los líderes, se pusieron al frente, ella era una mujer con un cuerpo perfecto, ropa ajustada de cuero bastante exótica, pero llevaba pegado a su cuerpo dagas y una espada en su cintura

El muchacho, rubio como un sol, hermoso y viril, portaba igual una ropa ajustada y un poco… sugestiva… portaba dos espadas en su espalda y los ojos eran azules tan claros como enigmáticos, además notaron que bajo su cuello se notaban tatuajes, imaginaron que quizás parte de su cuerpo lo estaría

-Adriel, Arcángela, ellos son los hechiceros… Perdón Gely, ya se que no te gusta que te digan tu nombre completo…

-Gracias Salesia

-¿Crees que aprendan los conocimientos básicos Adriel? - Preguntó Salesia

Adriel se acercó a los hechiceros y sacó una runa de sus ropas, lo posó cerca de Luna quien se perdió en esos ojos de ese hombre tan hermoso, el pasó la runa por su rostro y cambiaba de color, luego fue hacia Hermione quien se mostró reacia pero cooperó finalmente

Luego se pasó con Harry y éste se puso muy rojo que ese nefilim estuviera tan cerca de él y tocando su rostro, sentía de pronto el roce de los dedos y se estremecía, Adriel sonrió cuando se apartó de él y le dijo en tono mordaz

-No te preocupes mundano, no me gustan los hombres, eso se lo dejo a los hijos de la noche, que son unos depravados sexuales y fornican con lo primero que se encuentre en el camino…

-¡Nosotros venimos a estudiar, no a tener sexo con nadie! - Gruñó Hermione pero de pronto el nefilim le tomó el mentón y la sujetó con fuerza y delicadeza mirando fijamente sus ojos castaños

-Hay fuego en tus ojos - sonrió - A pesar de lo que aparentas… Tu mente está llena de conocimientos y sin duda adquirirás más pero… el fuego podría destruirte

-¿Eres adivino?

Adriel dejó caer su mano y le miró de modo frío y cruel

-No soy un mundano vulgar y corriente, soy mejor que tu, bruja… no insultes nunca a un nefilim o lo próximo que sentirás es el filo de la espada en tu garganta

-Adriel - suspiró Salesia

-Son aptos - dijo el nefilim - pensé que la rubia no tiene la capacidad, se ve frágil y poca cosa, pero la runa no miente…

-Gracias… bueno muchachos vámonos, que ya casi terminamos

-¡Oiga, nos amenazan de muerte! - bufó Hermione

-¡Y controla tu gran boca o te meterás en muchos problemas! - Gruñó Gely mientras se cruzaban de brazos - Esa bruja se nota que es insoportable, yo no creo que sobrevivan una semana…

-¿Y esa puerta? - Preguntó Luna al pasar por una donde se escuchaban cánticos celestiales pero Salesia no se detuvo, seguía adelante

-Ahí están los ángeles, pero esas puertas yo no las puedo abrir, solo ellos, pero son otra cosa, su educación no me corresponde, solo que tengo a ese grupo por órdenes superiores… sus ojos mundanos no podrían ver un ángel excepto que ellos lo quisieran porque son seres tan hermosos que su belleza podría enloquecer a cualquier ser humano y antes que pregunten