Gótico: Seducción Mortal (R18)(Dramione)

capítulo 7: situación incomoda

Cedric pensó que no escuchaba bien ¿Qué era lo que Luna le había dicho? No captaba en ese momento, miró a Luna fijamente y ella se limpió sus ojos y tomó aire para volver a decirle eso…

-Harry no querría hacerlo… y además es mejor que sea… un conocido… Draco me da miedo y quedas tú

-Debes estar bromeando

-No, es en serio, quiero dejar de ser virgen… tu puedes ayudarme…

-¡No! ¡No puedes decir eso! Además, aunque dejaras de ser virgen, nada te asegura que no te toquen después

-¡Pero si eso pasa ya no tendría porque preocuparme! - Hipo - Al menos ya no me dolería tanto…

-No lo haré Luna, yo no soy un santo, dices que Draco te da miedo, pero ahora no soy lo mejor que puedes tener

-¡Es que me van a hacer daño! - Gritó débilmente - ¿Puedes hacerlo por favor?

En ese momento entró Harry y le dolió ver a su amiga lastimada, aunque ya Cedric había alcanzado a ponerle muchas hojas, Hermy también apareció y Ced le entrego a Hermy las hojas y salió aprisa ¡Bonita petición le había echo Luna! Ella se quedaba sollozando mientras Harry maldecía lo sucedido

El tiempo pasaba…

Ellos comenzaron con las clases, sin que el incidente de su escape hubiera sido motivo de visita por la directora, el problema es que eran clases por separado, eso le disgustaba horriblemente a Harry quien corría para ver a Luna, pero claro que los ojos los observaban, esperando…

Pero no era agradable estar ahí, Harry se encontraba siempre en los talleres, parejas efusivas de vampiros o de hombre y mujer lobo, que se agarraban a besos y a arrumacos de tal modo que incluso terminaban teniendo sexo en el piso y el salía huyendo de ahí, luego que llegaba el profesor y se metían, ellos estaban terminando de vestirse, con el resto ahí sentado como si nada y al profesor parecía no importarle

Hermione había protestado al principio, pero nadie parecía hacerle caso, aparte tenia que apartar dos cosas de ella; una era la imagen sensual de Draco convertido en un ángel oscuro y dos, las manos que de pronto le intentaban meter mientras ella estaba entretenida con los libros

-¡Dios! - Chilló dándole un zape a una mano que iba metiéndose poco a poco dentro de sus piernas y miró que era uno de los chicos vampiros que le mostró sus colmillos y la lengua de modo erótico

-Dios no está aquí nena, solo yo

-¡Largo! - Gritó ofendida y sacó su varita - ¡Lumus Máxima!

-¡Ah! - Gruñó el vampiro cuya luz intensa asemejaba como al sol - ¡Maldita perra! ¡Lastimaste mis ojos! - Gritó enfurecido y al ponerse en pie tiró la mesa donde ella trabajaba y la sujetó por el cuello arrinconándola

-¡No! - Gimió, pero nadie se metió, todos siguieron en lo suyo sin que alguien protestara y los que los miraban, era más por morbo que por otra cosa

-¡Serás mía perra, a mí nadie me deja con ganas!- Vociferó mientras le arrancaba la blusa de un jirón dejándola expuesta y ella se cubrió de modo alarmante - ¡Ayuda! - pero él separaba sus piernas mientras comenzaba a romper las suturas del pantalón

-Oye - apareció Draco de pronto

-¡No me jodas, estoy ocupado!

-La directora dijo que a la fuerza no…

-¡Me importa un carajo lo que diga la directora! Esta humana me pone caliente y será mía ¡Así que abre las piernas querida, que te va a gustar