Rough Luthor

Capítulo 9

That's how you get the girl,

And then you say, i want you for worse or for better, i would wait forever and ever

Broke your heart, i'll put it back together...

—Tarareaba la canción de una de mis cantantes favoritas mientras me recogía el cabello en una coleta desordenada y conectaba mi iPod a las bocinas que se escuchaban en todo el Pent House.

Había optado por eso cuando me di cuenta de que mi vida sin escuchar música era inútil, por lo que me hice el mejor de los regalos comprando bocinas que se escucharan hasta en el baño.

Sonreí seleccionando la canción que venía tarareando, poniendo la opción de escuchar el disco completo.

Me dirigí a la nevera y saqué un helado de vainilla y me dispuse a hacerme una malteada con sabor a ron y chocolate antes de empezar con la limpieza de mi casa.

Y es que yo era así, soy así. Limpio mientras como y escuchó música. Lo hago muchísimo mejor.

Moví muebles y cambié totalmente la estructura de mi sala y habitación durante el tiempo que me dediqué a limpiar un poco. Normalmente venía alguien a ayudarme, pero solo cuando no tenía tiempo. Pero tenía un fin de semana tranquilo, así que hice las cosas que tenía que hacer.

Me cambié a unos SweatPant cómodos y una camiseta blanca cuello en V y me hice una cola de caballo alta luego de tomar un largo baño.

Me dirigí con pasos lentos a mi, ahora, limpia cocina y saqué lo necesario para preparar mi almuerzo.

Me iba a hacer un buen grilled Sandwich de jamón y queso, con la pequeña plancha/parrilla que tenía desde hace algún tiempo.

Mis pies descalzos iban de aquí para allá mientras cortaba y cocinaba mi obra maestra.

No había mucho por hacer un Domingo, más que limpiar o ese tipo de cosas. Y sinceramente, ir a un parque me daba flojera. Por lo menos hoy.

Terminé de hacer mi almuerzo y llevé mi plato junto a un gran vaso de jugo para el sofá y puse mi serie.

Tenía varios días sin hablar con Lena, me di cuenta. Tampoco es que nos veíamos todos los días pero era raro que no haya siquiera un mensaje para fastidiar un poco.

Seguro necesitaba algún tiempo a solas o pasar más tiempo con Sam.

Me la presentó casi la última vez que nos vimos como su mano derecha y mejor amiga mientras dejaba unos documentos importantes que ella necesitaba revisar en R. A.

Me explicó que no había habido una ocasión para conocerla puesto que había estado de viaje por varios meses en Europa, y que trabajaba como abogada.

Fue muy simpática y me cayó muy bien.

Si, está con ella. Decidí a último momento mientras continuaba con mi sándwich.

Imagino que tantos meses sin hablar con alguien de confianza le iba a hacer falta.

Sentí mi teléfono sonar.

Era Nia.

—¡ Hey!—respondí. Escuché como daba algún tipo de indicación y luego se enfocó en mi.

—¡Kara! ¿Qué tal?—dijo.

—Todo bien, Nia. ¿cómo está todo?—pregunté mientras llevaba a mi boca el último bocado de pan. Me levanté para llevarlo a lavar.

—Bien—dijo simple. —oye, ¿podrías bajar a abrirme?—terminó de decir.

—¿Qué?¿estás aquí?—pregunté incrédula.