sweet sundae

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Keef se había interesado en un chico, un chico que encontraba bastante lindo, lo había visto desde lejos y le llamó la atención, ya lo había visto antes, de echo compartían algunas clases, pero nunca se le ocurrió u se dio la oportunidad de hablar. Miraba su celular con un leve cosquilleo, perfectamente podía enviarle un mensaje por Instagram, pero no estaba seguro de si hacerlo o no, solo quería chatear con él, ya que no sentía el suficiente valor como para hablarle en persona, apesar de que era alguien muy sociable.

Estaba junto a una chica y otro chico hablando, algunas veces los vio con ellos, parece que eran sus amigos. Suspiró un poco resignado, guardó su celular ya apagado en su mochila y se levantó, avisándole a Gretchen que iba a ser algo y que después volvería, estaba apunto de hablarle, y eso era gracias a que los otros dos chicos se habían ido a quien sabe donde.

Mientras se acercaba a él sus piernas empezaron a temblar, ya se estaba arrepintiendo, pensó en devolverse junto a su grupo de amigos, pero cuando menos lo esperó ya estaba frente a la mesa en la que estaba sentado él. Lo miraba curioso.

── ¡Ho- hola! Soy Keef, hemos tenido algunas clases juntos.── Sonrió nervioso, esperando algún tipo de reacción por parte del chico de cabellos turquesa.

── ¡Oh, claro! Sí te recuerdo, yo soy Gir, un placer, Keef.── Dio un brinco antes de hablar, invitando a Keef a sentarse frente a él entre medio de una rara charla que estaban comenzado a tener.── ¿Y por qué viniste a hablarme?── Preguntó entre medio de su charla, sosteniendo con su mano derecha la pajita del jugo que estaba tomando, para luego beber del dulce líquido sin mirarlo sin mirarlo.

── Bueno yo me preguntaba si querías salir conmigo a algún lugar a la salida. ── Su mano estaba sobre su cuello, dudoso y sin saber qué estaba diciendo, solo estaba dejando las palabras fluir, y después de unos muy pocos segundos procesó lo que dijo, eso podía malinterpretarse.

── Nos acabamos de conocer y ya me pides una cita, eres rápido en esto. ¿Verdad?── Le sonrió de forma coqueta, haciendo sonrojar al pelirrojo que negó de forma rápida, tratando de aclarar a que no se refería a eso. Gir rió.── Eres divertido. ¡Oye, seamos amigos!── Soltó alegre, su personalidad no quedaba con el aspecto que tenía, y se dio cuenta de ello en tan solo unos minutos.

Keef aceptó, perdido en sus ojos, eran lindos a su criterio, eran como ver el despejado cielo en el verano. ¿Qué podía ser más lindo que ello? Quizá el mar en completa calma, o podrían ser igual de hermosas que unas ortensias azules, las ortensias eran bonitas, Gir era bonito, era caliente. ¿Qué? Iba a atribuir eso a sus hormonas y nada más, no quería empezar a pensar en cosas raras.

Ya a la salida se juntaron y se fueron caminando juntos, realmente no tenía nada planeado, podrían comer helado, hacía calor y no vendría para nada mal. Se encaminaron a una cafetería a la cual había ido un par de veces, vendían buenos pasteles y habían varios tipos de helados, era perfecto. Se sentaron en unas de las mesas cerca de la esquina, era un lugar bastante espacioso y con aire acondicionado.

Pidieron helados en copa, con distintos sabores los dos, incluso el tamaño de las copas eran distinto, siendo el de Gir más grande. A Keef no le importó mucho, de todos modos él le invitó, aunque Gir le dijo que igual iba apagar y que no permitiría que gastará su dinero en un capricho suyo.

── ¿Y de qué sabor es tú helado?── Se metió una cucharada a la boca, estaba demasiado distraído pensando en qué sabor iba a escoger como para percatarse de cual escogió Gir.

── ¿Quieres probar?── Lo miró atento, Keef asintió.── Entonces di
" ah ".── Alargó la " a " después de tomar un poco de helado con su propia cuchara y elevar ésta, cuando Keef abrió un poco su boca con sus mejillas un poco rosa dirigió el cubierto a la boca contraria. Keef no tenía ni la más remota idea de qué estaba comiendo, solo sabía que era dulce, sabía bien.

── ¿De qué era?── Preguntó tomando una cucharada de su propio helado.

── Cereza, ahora dame del tuyo.── Apoyó sus codos en la mesa y se inclinó hacía adelante, cerró sus ojos y abrió la boca esperando a que Keef le diera de la misma forma que le dio a él, pero al no recibir nada cerró su boca y abrió solo ojo, encontrando a un Keef con sus mejillas aún más teñidas de rosa y confundido.── ¿Acaso te molesta que pruebe tu saliva? Yo dejé que probaras la mía.

── Para eso mejor te beso.── Respondió como chiste por fin reaccionando, metiéndose la cucharada de helado que Gir esperaba fuera para él.

── Entonces besame.── Keef se atragantó.── Oye tranquilo, solo lo decía como broma.── Rió al ver como Keef lo miraba algo enfadado.

── Habre la boca, cariño.── Gir abrió sus ojos después de dar un pequeño saltito al escuchar la última palabra, ahora era él quien estaba sonrojado. La mano de Keef estaba levantada frente a él con una cuchara y helado sobre ésta, sonrió algo tímido, pero luego abrió su boca con una sonrisa y gustoso aceptó el helado que él otro le había ofrecido, no esperaba eso, pero estaba muy contento con el resultado.

🍧..⃗.

Ya habían pasado varias semanas desde esa vez y Keef aún se acordaba de ello como si hubiera sido ayer, hablaban casi siempre a la salida y se juntaban después de la secundaria alguna qué otra vez, aunque todavía tenía algo que decir, pero no se atrevía a decirlo.
Con cada día que pasaban hablando Keef se daba cuenta que realmente gustaba de Gir, no le sorprendió, aunque se preguntaba si él podría ser el indicado; había tenido parejas antes, pero nada había salido bien.
Ahora caminaba hacía su casa mientras escuchaba tranquilamente música con sus audífonos puestos.

── ¡Keef!── Se fue un poco para adelante al ser empujado por Gir, quien lo abrazó del cuello como saludo, éste se separó de él y le saludó con sus audífonos aún en sus orejas.── No me esperaste para acompañarte, eres malo. Por cierto, ¿Qué escuchas?── Hizo un pequeño puchero, para luego sacar unos de los audífonos y ponérselo, sabía que a Keef no le molestaría.

── Escucho Homeshake.── Dijo sin más, sonriendo al ver como Gir también lo hacía, hizo que al menor le gustara hace ya un tiempo.

── Sabes que me gusta, pero te quiero contar algo y no quiero que me ignores por estar escuchando
" Okay".── Tomó el celular de Keef y apagó la música.

Empezó a hablar sobre algo de lo cual Keef no podía prestar demasiado atención, estaba pensando en si algún día Gir gustaría de él. Embobado se quedó pensando en eso, Gir podía cuidarlo, él sí era capáz de hacerlo, estaba seguro de eso.

── ¿Serías mi amor algún día?── Dijo casi en un susurro sin darse cuenta, percatandose de lo que dijo cuando Gir dejó de hablar y lo miró sorprendido con un claro sonrojo.── Gir yo, am, no es lo que tú piensas, es solo qué...

── Repitelo.── Lo interrumpió y se acercó más él, poniéndolo más nervioso, pensando en la clara posibilidad de que lo rechazaría.

── Qué si serías mi amor algún día.── Estaba listo para lo peor, sin percatarse de como Gir tímida e alegremente sonrió, para luego besar su mejilla, decolocandolo un poco.

── Puedo serlo desde hoy, y hasta que tú quieras.── Keef se estaba derritiendo con la dulce sonrisa que le proporcionaba Gir.

Su amor era lo única que había estado deseando en el último tiempo, y lo acababa de conseguir. También le sonrió y lo tomó de la mano para retomar su caminata, aunque tal vez se desvíarian un poco del camino, como algunas veces solían hacer.

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No me cansaré de escribir sobre
ellos hasta que alguien más lo
haga. Y probablemente fue muy
rápido, me disculpo por ello.

enamour      [KaGr] [Hiatus]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora