CAPITULO 10 - HEARTLINES

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—¡¿No entiendes que esto es peligroso?!

—Nat, ambos hemos sido cuidadosos, no es como si hubiéramos estado bebiendo en un bar a media noche o algo peor. —Mentí.

—Aunque no lo hagas, es arriesgado estar por ahí vagando con él. No sabemos si está de nuestro lado o solo quiere llevarnos con Tony.

—Espera... ¿Crees que Vis va a traicionarme? —No podía creer lo que Nat estaba insinuando.

—No Wanda, no es por ti, es por la situación.

—Nat, estamos a millones de millas lejos de casa, este pueblo es casi un desierto, nada malo va a pasarnos.

—¡Por favor, entiéndeme! —Nat comenzaba a gritarme.

—Te entiendo, entiendo lo que dices, pero tú no estás entendiéndome a mí.

—Wanda, esto no es una maldita novela romántica dónde pueden andar por ahí en la noche sin que haya consecuencias.

—¿No puede ser una maldita novela romántica para mí, pero sí para ti y para Steven? —Mi sangre comenzaba a hervir, creí que Natasha me apoyaría.

—Es diferente. —Nat sabía que la única diferencia era que Steven era un fugitivo al igual que nosotros y Vis estaba intentado solo fugarse conmigo. —Wanda, tú eres solo una niña, mírate, actúas como tal.

—Soy mayor, puedo cuidarme sola.

—Wanda estamos aquí por ti. —Esto comenzaba a ser una pelea real.

—¿Entonces es mi culpa todo lo que pasó? ¿Eso es lo que intentas decir?

—No, Wanda, yo solo... —Natasha sabía que había jodido todo esto, y yo sabía que evidentemente si era mi culpa.

—Bien, porque no los necesito, podría irme y estar bien sola.

—¿Entonces qué haces aquí? —Natasha estaba realmente molesta conmigo.

—¿Qué?

—Si eres mayor y puedes cuidar de ti sola y no crees que sea buena idea seguir juntos, puedes irte, llévate la mitad de la ropa y deja la otra mitad. —Espetó.

—Bien. —Natasha me estaba dando un ultimátum, pero no me iba a retractar.

—Sal por la puerta, la ventana es un dramatismo, no eres una prisionera. —Natasha salió de la habitación.

Tomé un par de jeans y unas chaquetas, me llevé la sudadera de Sam y dinero que Natasha tenía en una chaqueta, metí todo en una mochila pequeña y salí por la ventana.

No sabía si era un simple impulso o las ganas de demostrarle a Natasha que podía hacer esto por mi cuenta, pero la mezcla de ambas se sentía bien.

Sabía que Vis estaría en la habitación de la noche anterior, así que me dirigí hasta ahí. Entré y subí a su habitación. Toqué dos veces la puerta pero no abría nadie.

¡Mierda! Si Vis se habría ido estaría sola.

Bajé nuevamente a la recepción y pregunté por él, al parecer se había ido en la mañana.

¡Carajo! ¿Qué haría ahora sola?

La lluvia comenzaba a caer y no tenía ningún lugar al cual ir. Lo bueno es que habíamos quedado en encontrarnos por la noche, así que lo llamé para corroborar que vendría a mí. Pero mi llamada no entraba, esto era una completa mierda.

Entró una llamada de un número desconocido, por lo que tuve que contestar dejando que la persona en la otra línea hablara primero.

—¿Wanda?

𝓪 𝓭𝓲𝓯𝓯𝓮𝓻𝓮𝓷𝓽 𝓴𝓲𝓷𝓭 𝓸𝓯 𝓵𝓸𝓿𝓮 // WANDAVISIONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora