Primera vez

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Esta historieta ha sido sugerida por @Kotonoharo

Habían quedado por la noche en casa de Robert. Su padre estaba de viaje, por lo que tendrían la casa sola. Él ya había sido informado con anterioridad, por si llegaba antes de tiempo y los pillaba besuqueándose. Que realmente no le importaba, pero a Robert le daba mucha vergüenza que la gente lo viera tan vulnerable.
Ya llevaban varios meses saliendo, así que Robert ya tenia suficiente confianza para recibir a Al en su casa en pijama. Al tampoco se había arreglado especialmente; llevaba un chándal.
Los dos cenaron pizza calentada al horno mientras leían a Shakespeare en voz alta. Sobre las 11 de la noche encendieron la televisión y se quedaron recostados juntos en el sofá. Inconscientemente, Robert se movió sobre Al y le rozó la entrepierna. Sin querer se le escapó un leve gemido.
—Robert...¿quieres hacer el amor?—dijo Al casi en un susurro.
Robert alzó la vista, algo temeroso. Pero después sonrió. Aquella iba a ser su primera vez.
—Sí... sí, vamos a hacerlo.
Los dos se levantaron del sofá. Robert agarró a Al de la mano y lo llevó hasta su habitación. Tenía una cama bastante grande, en la que los dos cabían sin problema. Ya habían dormido juntos alguna vez.
En la habitación los dos se quedaron sin saber qué hacer.
—Creo que... podríamos—dijo Robert acercándose a Al.
Con un movimiento lento, le quitó la camiseta a Al y le besó el pecho mientras le acariciaba la espalda. Al le quitó la camiseta a Robert y después bajó una mano y la metió dentro del pantalón de Robert, agarrándole el culo con firmeza. Ante aquello Robert le mordió el lóbulo de la oreja a Al. Después cada uno se quitó sus pantalones y ropa interior, quedándose totalmente desnudos el uno frente al otro. Era la primera vez que se veían sin ropa.
—Eres...precioso...—dijo Al mientras lo miraba de arriba a abajo.
—Tú lo eres más...—Robert se acercó y le besó con cariño en la mejilla.
Al le dio un leve empujón a Robert para que cayera en la cama y se puso encima de él.
—En mi mesilla hay una botella de lubricante, cógela—dijo Robert.
Al alargó el brazo para coger el lubricante del primer cajón. La botella estaba por casi la mitad.
—¿Sí que lo usas, no?—rio Al mientras le enseñaba la botella a Robert.
—Porque todas las noches me toco pensando en ti—Robert besó a Al—Y en este momento.
Al dejó la botella de lubricante a un lado de la cama y empezó a hacer un recorrido de besos hasta la pelvis de Robert. Se encontró que tenía una gran erección delante de él.
—Voy a probar una cosa.
Al se metió la polla dentro de la boca un poco. Escuchó a Robert gemir, por lo que siguió arriba y abajo, lamiendo como si fuera un caramelo dentro de su boca.
—Déjame probar a mí—dijo Robert como pudo.
Se cambiaron de posición, y Al se quedó recostado en la cama mientras Robert se quedaba delante de su erección. Robert probó a metérsela hasta el fondo. Tuvo una pequeña arcada, pero en las siguientes lamidas intentó no atragantarse e intentar hacer que los dos disfrutaran.
Después levantó la vista y ascendió los besos hasta volver a llegar a los labios de Al. Se recostó a su lado y cogió la botella de lubricante. Decidieron que era mejor que de momento no probarían a la forma "tradicional" de tener sexo (véase que no se iban a penetrar) y mejor cuando tuvieran algo más de experiencia. Robert se untó la mano de lubricante y cogió su pene y el de Al. Empezó a masturbar a ambos mientras Al movía las caderas. Los dos disfrutaban de aquella fricción y aquel movimiento con gemidos roncos. No pasaba nada si hacían algo de ruido, estaban totalmente solos.
Una descarga eléctrica les recorrió a ambos y se corrieron entre temblores y gritos ahogados. Los dos sonrieron mientras volvían a tener la respiración normal.
Un par de minutos más tarde se levantaron para ir al baño a limpiarse y siguieron dándose besos.
—¿Te ha gustado?—preguntó Al.
—Más que nada.

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