5. ¡Abrid los ojos!

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Narra Oliver

~25 de marzo de 2012, 8:30~

Cuando desperté estaba con Isa en mi habitación y recordé lo que hicimos anoche. ¡Qué bien estuvo! Me levanté con pesadez y me vestí.

—Isa —dije, acariciando su cabello—, despierta o llegará el Raimon y tú seguirás aquí.

—¿Oliver? —dijo, abriendo los ojos —¿Dónde estoy?

—Estás en mi cuarto —respondí, sentándome a su lado.

—Entonces sí que lo hicimos —dijo, tumbándose boca arriba

—Deberías vestirte —le dije con una sonrisa—, el Raimon está llegando.

—De acuerdo... —respondió, levantándose de la cama.

—Yo debo ir a hablar con Padre —le dije, poniéndome en pie—, nos veremos en el campo.

Le di un beso y salí de la habitación. Recorrí la base hasta que llegué a la residencia de Padre.

—Pasa, Aziel —dijo cuando llegué a la puerta—, me gustaría que estés preparado para recibir al Raimon.

—No se preocupe, Padre, lo estoy —respondí con confianza—. El Génesis vencerá al Raimon y así todos se darán cuenta, incluida Aquilina.

—Eso espero hijo mío —respondió—. Puedes retirarte, el Raimon llegará en cualquier momento.

Salí de la residencia y fui a la entrada de la base. Todo estaba planeado, sabemos cada paso que dará el Raimon desde que atraviese el umbral de la base. Una vez el equipo estacionó el autobús y se bajaron, hice una aparición especial.

—Bienvenido, Instituto Raimon —dije, tras aparecer ante ellos—. Hace mucho que no te veía por aquí, Aquilina.

—Oliver —dijo Lina tras verme.

—No... yo soy Aziel, el líder de la Academia Alius —le corregí con una mirada amenazante—. Tan solo Padre está por encima de mí.

—El poder se te ha subido a la cabeza, eres tan patético como mi padre —respondió con la mirada fija.

—No... siento decirte que yo no soy el patético de los dos —dije, provocando la sorpresa de todos los presentes—, y pronto Padre te explicará el motivo.

Acto seguido, desaparecí ante sus ojos. Dando comienzo al plan del Génesis para derrotar al Raimon, y no solo mediante un partido de fútbol, si no que vamos a destrozarlo desde dentro. Llegó el partido y Mark intentó convencer a Xene de que este fútbol, nuestro fútbol, está mal. ¡Menudo iluso!

El partido comenzó y le dimos al Raimon una oportunidad para atacar, tal y como yo les había ordenado. Después nos lanzamos al ataque y Xene marcó un gol con el Cañón de Meteoros. Sin embargo, consiguieron crear una nueva supertécnica, Torre perfecta, y detener el disparo de Xene. Más tarde Shawn Froste entró en el campo y, aunque parecía muy poquita cosa, un gran poder despertó en él y le marcó un gol a Nero con su supertécnica Aullido de Lobo.

—Maldita sea —me dije a mí mismo —equipo poned en marcha el plan Supernova.

—Sí, mi Lord Aziel —respondieron al unísono.

El partido continuó con intensidad y volvieron a detener el disparo de Xene dándole una oportunidad a Shawn de volver a marcar, pero Nero detuvo el disparo sin complicaciones y nos pasó el balón. Xene recibió el balón y ejecutamos nuestra supertécnica de tiro Supernova, que destrozó las mejoradas Manos Infinitas del portero del Raimon.

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