Tú en mí

Capítulo 4

¡Holiwis! Aquí yo :)

Amixs, espero que disfruten de este nuevo capítulo. Me gusta equilibrar esta historia con la carismática personalidad de Jenna y los impasibles pensamientos de Jayden, son una combinación única y especial.  

Les dejo con una rolita random, que de seguro todos amamos. 

**************

JAYDEN

Al ser interrumpido de mis pensamientos por la torpeza de Jenna, no podía quedarme tranquilo al ver lo nerviosa que se puso cuando chocó con el asiento. Así que, cuando sus pasos ya no se escuchaban por el pasillo, tomé mi mochila y empecé a dar pasos largos pero cautelosos, tenía el propósito de asomarme por el balcón sin ser tan evidente. Vi salir a Jenna del primer piso, corriendo donde se encontraba su amiga, tardaron un rato y finalmente caminaron hacia su destino.

La idea de perseguirlas estaba saliéndose del equilibrio de mis decisiones, pero todo cambió al sentir un abrazo en mi espalda por parte de Laura. Solo doy un corto suspiro. – ¿Cómo estás amor? – Laura me pregunta.

–Voy bien, ¿Qué hay de ti?

–Muy bien, ¿Qué tal si vamos a almorzar? – Suena entusiasmada.

–No tengo apetito por ahora Laura, debes ir con alguna de tus amigas.

–Tu madre dijo que debes estar conmigo cuando dispongas de tiempo, por algo soy tu novia.

–Eres mi novia porque así lo ha querido mi madre, Laura.

No amaba a Laura, de hecho, siempre le he tenido un cariño en particular, como ese cariño de querer a un amigo o a un allegado, pero mi madre, la ha visto como la nuera perfecta de su hijo y todo se reduce a que estoy condicionado a estar con ella por el egoísmo de mi madre. Si no lo hago, dejaría de tener contacto con mi abuelo paterno.

El señor Blake Miller, ha sido una de las personas más importantes en mi vida, desde pequeño, él siempre estuvo dispuesto a brindarme el cariño que necesitaba, si no fuera por él, no tendría UN solo motivo para vivir.

Le pido a Laura que se vaya de la manera más amable que puedo, ella no parece entender que lo nuestro es por condiciones y no por sentimientos, he sido claro, pero creo que soy el único que puede romper este ciclo y enfrentarme a las decisiones de la señora Isabelle Johnson, mi madre.

Voy a comprar algo ligero a la cafetería, al mirar hacia mi derecha, veo a Jenna con su amiga comiendo, a pesar de tener un poco de salsa en su labio inferior, tiene una expresión cálida, llena de vitalidad. La veo sonreír al comer sus papas fritas, se ve tan despreocupada, tan feliz, tan ella.

Salgo rápidamente antes de que se percate de mi presencia y me dirijo a la clase. Me siento en el mismo lugar y espero que Jenna ingrese, pero eso se ve interrumpido por una chica que tomó su puesto.

–Disculpa compañera, pero ese asiento está reservado. – Le digo. –Oh, está bien, lo siento. –Ella me sonrió amablemente. –Wow, ni siquiera tuve que pedírselo. –Pensé.

Las clases ya empezaron, Jenna ingresa apurada y justo a tiempo. Su nombre se ha quedado en mi mente al leer el membrete en la pasta de su cuaderno que dejó olvidado antes de la salida. Se sienta en el puesto reservado en secreto por mí, tan serena y agitada por lo que tuvo que correr. Toma su esfero y empieza a escribir los apuntes.

La estoy contemplando inconscientemente, cuando una voz me saca por completo de mis pensamientos. El maestro se dirige a mí. –Jayden, es raro verte por aquí. – Todos regresan a mirarme, pero ella no lo hace. –Un cambio le hace bien a cualquiera. –Me limito a decir. Él solo asiente y continúa con su clase. El patético maestro es un amigo de negocios de mi padre.

A las 7:30 pm, todos empiezan a retirarse, Jenna sale apurada y la pierdo de vista. Camino por los pasillos y recibo una llamada de Giovanni diciendo que hubo complicaciones con el coche y que tomara un taxi. Me dirigí a la parada de autobuses, recibí una llamada de Laura y la ignoré por completo al ver a ella con un su café caliente en la mano en esos particulares envases. Tenía audífonos colgando de su cuello, su mochila en la espalda, el café en su mano izquierda y a su costado un libro de poemas. Estaba distraída, así que, decidí acercarme sigilosamente donde ella se encontraba, pero me paralicé cuando ella me observó.

Froté mis manos en señal de que estaba tratando de lidiar con el frío de esa noche y también para disimular. Jenna se me acercó y en lugar de decir un saludo común, ella quitó la tapa de su envase de café, la tiró y me ofreció el vaso lleno de el producto que aún estaba caliente.

–Ten, al menos podrás mantenerte caliente hasta llegar a casa. Sólo le di un sorbo, pero veo que tú lo necesitas más que yo. – Jenna mencionó son su voz suave.

Nunca hubiese aceptado ese café, pero al ser algo de ella lo acogí con ternura y agradecimiento.

–Gracias, Jenna. –Traté de sonar cálido.

–Sabes mi nombre, eso es nuevo.

–Como olvidar el nombre de alguien que chocó con el asiento.

Su expresión se tornó nerviosa, como si hubiera recordado ese vergonzoso momento.

–Yo... yo, soy torpe por si no lo habías notado ya. – Sonaba tan tímida.

–Claro, te disculpo por ello.

–Me daba igual si no lo hacías. –Dijo con una sonrisa – Ahí viene mi autobús, debo irme. – Se estaba yendo ya, cuando al parecer recordó algo y se dirigió hacia mí. –No seas tan indiferente, asustas a todos, incluso a la silla de esta mañana y por eso chocó conmigo. –Y se fue.

La miré todo el rato hasta que su presencia ya no era visible por las calles, tomé mi café, de verdad estaba muy azucarado, pero para Jenna, estaba en su punto exquisito. Tomé un taxi, mientras que, en el camino a casa, comencé a recordar las palabras únicas de Jenna y sin darme cuenta una sonrisa ya estaba dibujada en mi rostro. 

*************

Uhhhh, Jayden está empezando a poner su atención en Jenna :) ¿Creen que Jenna pueda ser ese tipo de felicidad que Jayden ha estado buscando por años? ¡Já!, debemos esperar xD

Nos vemos (No literalmente) en otra ocasión <3