"Habla menos y observa más."
Estaba especialmente cansado, sentía los párpados pesados y estaba preso de una ligera pereza matutina. Por lo que se negaba rotundamente a abrir los ojos, a pesar de que su subconsciente le gritara que había estado dormido mucho tiempo.
Sabía que era poco más de la hora en que se acostumbra a despertar, pero hoy era uno de esos días en que mataría por permanecer más tiempo en cama. No quería levantarse. Aunque era ovbio que llevaba un tiempo despierto.
-¡Cielo!- Escuchó que le llamaba una cálida voz, aquél tono dulce sólo podía pertenecer a su esposa.
Abrió los ojos despacio, pestañeando con cierta pereza. Al hacerlo encontró frente a él un rostro bonito, que lucía ligeramente enojado.-¡Oh Sehun¡- Le volvió a gritar, está vez más fuerte. Provocando una sonrisa en el más joven.
-Te estoy escuchando Hye.- Le avisó. -He estado despierto desde que saliste de la cama. - Informó incorporándose. La Joven lo observó desperezarse con el ceño fruncido.-¿Por qué no te levantaste entonces?- Preguntó.- Sabes que tienes trabajo con Kyungsoo. Así que anda.- Le instó a levantarse.- Si te pones en marcha, puede que los alcances en el desayuno.
El menor la halo hacía sí mismo cuando la Castaña hizo amago de levantarse. Su esposa estaba vestida, su piel estaba fría comprobó el menor al tocarla, indicio de que tomó un baño hace poco.- Si estabas tan preocupada, debiste despertarme antes.- habló incorporándose sobre la joven, ella intento resistirse, pero lo único que logró fue que se levantase el vestido blanco que llevaba. Bastante corto cabe destacar.- Sabes como hacerlo.- Aseguró el menor con tono juguetón mientras se colaba entre sus piernas.
La más pequeña cerró lo ojos para evitar mirarlo.- Quítate de encima.- Pidió sin aliento cuando Sehun provocó un pequeño roce entre sus piernas.- N-no estamos para juegos, se te hará aún más tarde. Los chicos deben estar esperándo por nosotros.
Sehun se inclinó un poco más sobre ella, estaba prácticamente a gatas sobre su esposa.- ¿Segura?- Inquirió depositando pequeños besos en su cuello. Provocando que la Joven se arqueara debajo de él, aquello lo hizo sonreír. Su esposa era muy débil cuando se trataba de besos en el cuello. O caricias en los senos.
La Joven abrió los ojos totalmente resignada.- A pesar de que mi cuerpo te quiera, no quiero hacerlo.- Confesó luciendo sincera.- Aún sigo enojada contigo.
Sehun respiró profundamente antes de acercarse a su oído.- Oh Hye Sook, no imaginas cuanto te amo.- Susurró sólo para ella.- Siento si te he hecho creer lo contrario, pero debes creerme cuando digo que tú y mi bebé son lo más importante que tengo.- Aseguró quitándose de encima. Sólo para levantarla, logrando que ambos estuvieran sentados sobre el colchón. Ella lo miraba con ojos llorosos, lo que le impulsó a continuar.
-Anoche, no sé de dónde sacaste el nombre de Xiao Luhan.- continuó logrando que un frío estremecedor se colara por el delgado cuerpo de su esposa.- Pero te puedo asegurar que nada de lo que haya pasado por tu cabecita tendría sentido. Porque si sabes evidenciar entre similitudes, sabrías que el nombre de Xiao Luhan pertenece a un chico, obviamente lo conozco. Pero es sólo un compañero del bufete.- alegó mientras acariciaba su mejilla. - Y especialmente tú, deberías estar segura de que no me van los chicos. Oh ¿Acaso no he sido bastante claro?- Preguntó logrando que el rostro de su esposa se tiñera con un furioso sonrojo.
-¡Aish!- Exclamó la joven huyendo del toque del menor. - Tienes Razón. ¡Lo siento!- Se disculpó poniéndose de pie.- Ahora ve a ducharte. Le diré a los chicos que te esperen. - Dijo antes de salir de la habitación.
Sehun la dejor huir satisfecho de las reacciones que causaba en su mujer. ¡Cómo la quería! Era como ver una versión adulta de su pequeña Hija.
Si alguien era digno de llevar su apellido era esa chica tierna y de noble corazón. Le había dado a su hija, que es el ser más importante que tiene en todo el mundo. Por lo que debe luchar por permanecer junto a su familia. Debe evitar a toda costa caer en pasiones absurdas o en el peor de los casos caer ante Xiao Luhan.
Algún día se le van a acabar los trucos con Hye, pensó mientras se encaminaba a tomar una ducha.
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LEGO (Chanbaek -Kaisoo)
أدب الهواةUn matrimonio roto, una amistad fracturada, una obsesión insana o incluso una injusticia, fueron algunos de los frutos que surgieron del sentimiento más puro llamado amor.