Capitulo 1

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Una cosa que no entendía de ser espía era:

¿Porque tenemos que mantener todo tan en secreto?

Okey,si que es verdad que si fuéramos diciendo a los cuatro vientos que somos espías la cosa no acabaría demasiado bien.Y seguro que habría mucha gente que no se lo creería y nos tomarían por locos...¿Pero si le dijésemos ni que sea a nuestros padres no nos pasaría nada,verdad?o si?

Antes esta pregunta me la hacia continuamente,ahora ya lo entiendo todo.


Tengo que confesaros que le dije a mi amiga Ari que era espía,al principio no se lo creyó y pensaba que estaba de broma,pero después ,al ver mi cara de verdad(porque ella sabe muy bien mentir,al contrario de mi)se lo creyó,y se quedo de piedra,inmóvil,sin poder articular ni una palabra,pero al cabo de unos segundos empezó a gritar y a reír como una histérica,y me pregunto todo tipo de preguntas,de las cuales algunas respondí,pero algunas me las guardé para mi.


Pero volviendo al tema principal:

Era un viernes soleado,con un poquito de viento,lo justo para no pasar mucho calor.Todo iba perfecto,yo estaba haciendo mis entrenamientos diarios de espionaje,ése día tocaba la clase de puntería,con una arma!Era la primera vez que tenia entre mis manos una arma de verdad!

Ese día ya empezó con problemas,aunque menores que los siguientes.Porque Logan,un espía dos años mayor que yo, bastante guapo y con el ego un poco subido,disparo a un jarrón de vidrio,y desgraciadamente,tiene muy buena puntería y el jarrón se rompió en mil pedazos y un trozo fue a parar a la cara de un chico,que aparentaba unos trece años,el vidrio le hizo un corte muy feo en la mejilla derecha de la cual empezó a gotear sangre,por suerte se lo llevaron a enfermería antes de que se hiciera más daño.Y a Logan le castigaron por disparar a un  jarrón si veía que al lado había un niño.Yo creo que había sido un poquito injusto porque ¡¿quien tiene un jarrón el la sala de puntería?!


Al acabar los entrenamientos,que duraban una hora y siempre eran por la tarde así podíamos ir al colegio con tranquilidad,fui al parque  de delante,que es dónde habíamos quedado Ari y yo,allí me la encontré y fuimos hacia mi casa hablando sobre múltiples cosas,no se cómo empezamos hablando sobre que universidad iríamos dentro de un año y acabamos hablando sobre si nos gustaban más los macarrones o los espaguetis


Al abrir la puerta de mi casa nos encontramos con el gran desastre....

GwenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora