Capítulo Catorce

26 4 0
                                    

[MARATÓN 2x7]

La luz de la esperanza.

DAIAN.

Inspecciono la parte trasera de la biblioteca cautelosamente. Estoy seguro que la explosión provino de aquí, pero no encuentro rastros de ninguna catástrofe.

Es bastante extraño. ¿Habrá sido una especie de broma? Últimamente las estadísticas de vandalismo han aumentado, pero suena bastante estúpido hasta para un niño de kínder fundir las luces de una biblioteca como protesta social.

Una pequeña chispa titila al fondo del salón que llama mi atención inmediatamente. Es la caja de fusibles, supongo que es la fuente de todo este problema.

Me acerco lo más rápido que puedo para solucionar esto de una vez por todas pero lo que veo no tiene sentido. Los cables están destrozados completamente, ni siquiera puedo decir que esto fue un accidente porque claramente no lo es. Y hay algo peor. Esto no pudo haberlo hecho alguien con unas tijeras, ni siquiera con un cuchillo o un material común.

Esto no tiene sentido. Estas marcas... son garras.

¡¿Qué rayos!? Un minuto...

—Ginebra...—MALDITA SEA.

A lo largo de los años, las personas se han preguntado siempre: ¿Qué sucede después de morir?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

A lo largo de los años, las personas se han preguntado siempre: ¿Qué sucede después de morir?

Pensé que nunca tendría la necesidad de plantearme tal enigma. Al menos, no en un futuro cercano...pero heme aquí, en el lugar menos esperado, a punto de descubrirlo.

Sin embargo, la extraña masa —o al menos así decidí llamarlo— no ha intentado hacer nada. ¿Realmente ha notado mi presencia?

Mi instinto de supervivencia me dice que me mantenga más quieta que una piedra. Por dentro, mi organismo sufre. Siento como mi corazón bombea sangre a borbotones. El sudor frio que se desprende de mis poros viaja a través de mi piel y me produce escalofríos y, aunque intento mantener mi respiración a raya, ya no sé cuanto más pueda aguantar. Si sigo así, moriré sola gracias al colapso de mi sistema. Pero no sé qué rayos debería hacer.

He soltado el móvil del susto anteriormente. No puedo contactar a Daian y si pudiese hacerlo ¿Qué rayos podría hacer él de todos modos? ¿Debería intentar recogerlo de todas formas?

Como respuesta del destino —y para empeorar la situación— el artefacto suena.

Maldición.

La cosa reacciona ante el sonido del timbre y se arrastra hacia él y mi cuerpo es empujado hacia una esquina estrepitosamente haciendo que mi espalda golpee uno de los estantes y en consecuencia, tira al piso unos cuantos libros.

La cosa vuelve a reaccionar ante el sonido de los libros cayendo, pero no me ve. De vuelta, no me ve, confirmando mi teoría. Él no puede notar mi presencia.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 14, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Dejavú PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora