RPG 2: Red.

Mutado

El Jeep destechado frenó con tal fuerza que dejó las marcas de neumáticos en el asfalto, deteniéndose con un brinco justo a un pelo de la nariz de Kouki. Sin embargo, en su expresión no hubo ni un mínimo cambio.

—Rain! —gruñó el líder del grupo. El sonrió con una agradable sorpresa.

—Bienvenidos! ya revivieron?

—Devuelve lo que nos robaron! Teníamos el encargo de entregar esos items y nos urge la paga —dijo el líder con toda la cabeza rapada excepto una cresta de cabello fucsia que le partía el cráneo al medio. El jugador era una cabeza más alta que Rain y era puro músculo, la remera negra se le ceñía peligrosamente en los brazos, como si estuviera a punto de explotar.

—Ja. Quieren luchar de nuevo conmigo?

—Lo anterior no fue una lucha. Fue una emboscada! —replicó otro. En cuanto lo vio, Rain alzó una mano y lo saludó con una encantadora sonrisa, haciéndolo maldecir por lo bajo.

—Si no quieren perder deberían subir de nivel, así es este RPG! Y si no les gusta vayan a jugar a Hadas y Dragones..

El de cresta fucsia lo jaló con brusquedad del abrigo, causando que la capucha se fuera hacia atrás y sus cabellos castaño oscuro fueran liberados, junto a una seria mirada que brillaba como gemas multicolores. 

—Quieres un duelo, perico?

—Si gano me devuelves el dinero por lo que robaste.

El calvo apenas dejó de mirarlo para enviar la solicitud de un duelo, ya que los asesinatos no estaban permitidos más que en los "laberintos" o mediante un duelo. En este caso, el que diera el primer golpe ganaba. Kouki se tardó en aceptar la solicitud.

—Pero sólo tengo el dinero de mi parte.. —mencionó mirando la ventana de solicitud flotando, su dedo índice se contrajo inquieto— Cuantas vidas te restan? Digo.. Porque tu nivel no debe ser tan alto como para dejarte golpear sin que tu HP descienda drásticamente. —Los jugadores tras el más alto comenzaron a reír y cacarear exagerados. Sus iris de arcoiris se pusieron serios.

—Toda la fama no es más que mentiras! —Se rió a los gritos— Resultó que Rain no era mas que un gallina!

—Tu lo pediste —suspiró y aceptó el duelo.

El contador de 50 segundos comenzó a dar su cuenta regresiva, flotando en el medio de la distancia de dos metros entre ambos jugadores. Rain se quitó la mascara antigas para estar más cómodo aún cuando de inmediato apareció una advertencia de que su HP bajaría mas rápido si lo hacía.

—Estás tan ansioso por perder?

—Creí que así te daría mas ventaja —Le sonrió con tal dulzura que el otro apretó los dientes.

El rival tenía una ametralladora de más de veinte kilogramos y contaba con munición por 500 balas. Era un monstruo con una correa que se arrastraba por el piso cargada de proyectiles. Con una sola de esas ya estaría acabado, no sólo en el duelo sino que también perdería una vida, pero ya que era una gran arma, requería mucha fuerza y aletargaba su agilidad. Sólo debía ser más rápido.

Rain no sacó ningún arma tradicional, sino que por su abrigo sin cerrar se apareció un cinturón de cuero con varias hebillas y compartimentos. El detalle más llamativo era un gancho que colgaba de un extremo con tres puntas cual dientes, lo sujetó con la punta de los dedos.

El contador estaba llegando a los cinco segundos cuando el aire pareció detenerse, miró a los tres compañeros de su rival y el novato que se había detenido frente al cercano duelo con una mirada curiosa. Rain sonrió soberbio, iba a mostrarle en su primer día un excelente espectáculo a ese niño.