Hoy me levanté de buen humor. Últimamente he estado pensando en la propuesta que Benjamín me hizo de enamorar a Alex, pero el problema es que yo llevo enamorada de ella desde que estábamos pequeñas. Sí, ya sé, se preguntarán cómo es posible que me guste si solo le digo cosas feas, pero siento que así solo puedo llamar su atención. Estaba arreglándome para ir a la escuela.
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Llego a la escuela y lo veo. Se ve tan guapo, y más como viene. Me acerco y le digo:
— Hola, freak. Hoy recuerda que después de la escuela nos vemos — le digo y me voy.
Estaba platicando con mi amiga Sol sobre algunas cosas de la escuela, hasta que llega Benjamín y me dice:
Benjamín: ¿Ya lo pensaste? — pregunta mientras se sienta.
— No lo voy a hacer — le digo, y en eso entra el maestro, con Alex detrás. Dios, sonreí como una estúpida porque está guapo. Aunque, de cierta forma, me acercaré a él para enamorarlo...
Después de horas en la escuela, salimos y alcanzo a Alex.
—¿Nos vamos? – él asiente y empezamos a caminar.
Alex: ¿En serio no quieres que te mande tu parte del trabajo? — me dice, y yo niego. Me abre la puerta, subo y empieza a conducir.
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Llegamos a su casa y empezamos a hacer el trabajo. Empiezo a ver sus facciones, hasta que se me escapa decirle:
—Eres hermoso —digo, mirándolo bobamente.
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