𝙁𝙄𝙂𝙃𝙏 ▷ ᴅᴀʀʏʟ ᴅɪxᴏɴ; ᴄᴏᴍᴘʟᴇᴛᴀ

↳ 17 |it's time for confessions

〘 17. ES HORA DE CONFESIONES 〙
༆

—Primero yo digo algo que no he hecho y si tú lo has hecho, bebes. Si no, bebo yo. Luego cambiamos —Beth le explicó las sencillas instrucciones a Daryl, que parecía perdido —. ¿No conoces ese juego?

—No necesito un juego para emborrarme.

—Espera, ¿has empezado?

—¿Cómo lo conoces? —el arquero le cambió de tema. Muy táctico, Dixon...

—Mis amigos jugaban, yo miraba —explicó —. A ver, empiezo yo. Nunca he usado... una ballesta, así que bebe un trago —Daryl la miró con detenimiento, pensando en lo remotamente absurdo que era aquel juego... y eso que apenas habían empezado. Sin embargo, le dio un trago a su whisky.

—No es muy divertido.

—Era para enseñarte. Ahora tú.

—No sé...

—Di lo primero que se te pase por la cabeza —lo primero que se le pasara por la cabeza, eh...: se avecinaban mareas tormentosas entonces.

—Nunca he salido de Georgia.

—¿Enserio? —preguntó Beth, curiosa. Bebió y se reincorporó un poco —. Vale, muy bien. Nunca he hecho... nada que lamentara estando borracho.

Y... fue el turno de que Daryl bebiera.

—Yo muchas cosas... —confesó; sí, demasiadas... sobretodo con la pelirroja a la que no se sacaba de la cabeza.

—Te toca.

—Nunca he ido de vacaciones.

—¿Y las acampadas?

—No, eso era para aprender a cazar.

—¿Te enseñó tu padre? —Daryl asintió poco convencido, no gustándole el rumbo que tomaba aquello —. Vale.

Beth bebió.

—Nunca he tenido... relaciones sexuales en una cabaña —Beth sonrió malvadamente al decir eso. Oh, vamos, eso era muy aburrido... necesitaba animarlo, ¿y qué mejor forma de hacer confesar a Daryl Dixon? La rubia observó atentamente la manera en que Daryl parecía dudar de si beber o no, cosa que acabó haciendo, dándole esa satisfacción a Beth.

—Bien.

—Nunca me he enamorado —pero, bueno, debía dejar claro que tal confirmación era propia de Dixon... por eso soltó lo que soltó. Beth entrecerró los ojos en su dirección; ¿no se había enamorado? ¿Ni siquiera de Lynn Ford? ¿Iba enserio? En fin, acabó por darle un trago al whisky antes de que la profunda mirada del arquero le taladrase aún más de la cuenta.

—Nunca he... estado en una celda —ahí fue en donde metió la pata, pues la cara de Daryl cambió radicalmente —; quiero decir... detenido —sí, sí, no lo estaba mejorando. Beth notó que la había cagado.

—¿Es lo que piensas de mí?

—Pero no es por nada grave —se excusó —. Creí que te habrían detenido por beber. Hasta a mi padre lo encerraron por eso... hace tiempo.

—Bebe —fue lo único que dijo. Exacto, la respuesta era que no.

—Espera: carcelero —rió, tratando de quitarle hierro al asunto —, ¿eras carcelero antes?

—No.

—Te toca otra vez —dijo incomoda por el tono de voz tan frío que había utilizado Daryl. Sin embargo, en respuesta a eso, el arquero se levantó del sillón en el que estaba sentado, con el frasco entre sus manos.