CAPITULO 1: "la mitad de mi vida"

130 6 0
                                    


Cuando has vivido la mitad de mi vida te das cuenta de 3 cosas:

1) Cuando alguien muere, ya no vuelve.

2) Cuando alguien muere, lo extrañas mucho.

3) Y no puedes hacer nada por regresar a los recuerdos felices.

Soy Lorelei, tengo 17 años y estoy por decirle a mi tía que no pienso volver al internado en marruecos.

¿Por qué esto es importante? Porque mi tía me matara.

Mi tía Azalea ha sido empresaria de toda la vida, ha desarrollado varios equipos electrónicos y los ha vendido por todo el mundo, empezó con un biberón que se calentaba solo y alimentaba al bebe automáticamente las calorías que el necesita, ahora desarrolla computadoras potentes para el gobierno, videojuegos de calidad y por supuesto todos los asuntos financieros los tuvo que aprender a manejar desde que murieron mis padres, aunando que es madre y se convirtió en mi tutora, mi madre y mi amiga... es la persona que más respeto en el mundo sin embargo, no puedo dejar de pensar que no quiero ir marruecos porque hace demasiado calor. Porque esta isla es todo mi mundo y porque encontré un objeto de mi interés.

Cuando mis padres murieron estaban trabajando en un proyecto con la tía Azalea, solo que este salió mal y solo ella sobrevivió. Pero me dio curiosidad de que esteben haciendo que merecía arriesgar sus vidas, lo cual es tonto porque nada merece tu vida. Por supuesto sé que ellos no me dejaron por su gusto, pero... es solo la tentación de saber qué es lo que estaba pasando por aquel entonces, cuando logré entrar al laboratorio que había estado quemado y clausurado desde entonces, me di cuenta que Azaleita, mi hermanita, estaba revisando documentos de una computadora destruida, pero había logrado construir el resto que se había destruido y conectado todo a un monitor para mirar lo que estaba pasando dentro de ese mundo pasado.

Me acerque a ella y ella sobresaltada me confeso, que la tía Azalea se emborracho una vez y dijo que se sentía impotente por no haber podido salvar a mis padres. Entonces que ella se puso a investigar para saber qué era lo que había salido mal. Ya que en lo que estaban trabajando, probablemente era la solución a nuestro sufrimiento familiar.

Una máquina del tiempo.

Al saber eso me sorprendí, ambas prometimos no decirle a la tía Azalea que ambas ya sabemos que paso. Azalea es increíble, incluso consiguió parte de las cámaras de seguridad y vimos todo lo que paso. Fue extraño ver como morían mis padres, sin realmente verlos morir. Entonces estamos investigando como podrían salir apropiadamente las cosas.

Le diremos que nos ayude cuando tengamos todo listo.

Estoy en la puerta de la habitación de la tía Azalea... tengo miedo, a pesar que ella me ha criado y amado como a su propia hija, ha sido más estricta conmigo respecto a la obediencia, no soy buena siguiendo órdenes, pero nunca he intentado desobedecerla porque sé que todo lo que ella hace tiene un porque y ambas, Azalea y yo sabemos que para hacer algo no debemos hacerlo solo por instinto, hay que pensar por qué y los resultados. Toco la puerta con inseguridad.

- Entra. – dice la tía Azalea cuando termino de tocar.

- Hola tía. ¿Cómo estas hoy? – digo más nerviosa de lo que me gustaría.

- Bien, aunque parece que hoy tienes algo importante que decirme.

- Si...

- Al fin tienes novio ¿cierto?

- ¿eh? No... en realidad quiero hablar de marruecos.

- Perfecto, yo también, he preparado el hotel al que iras, ahí conocerás a Freddie, el hijo del señor Mikoshiba.

El pasar del tiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora