O8 : NO SPEAKING / BODY LANGUAGE

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Mmh... Seonghwa ha estado observándome de una manera extraña desde hace unas semanas.

Se comportaba distante conmigo, estaba pegado a los demás miembros y eso, en cierta parte, me ponía celoso porque no lograba entender la razón de su tonto comportamiento. ¿Qué culpa tenía yo? ¿Acaso mi existencia le estaba comenzando a irritar? A veces me daban ganas de ir, abrazarle y nunca soltarle hasta que me contara todas sus inquietudes.

Claro, si es que tenía.

Reconocía que Seonghwa era raro, no todos sabían que su personalidad era como una cajita llena de sorpresas. Un ejemplo de esto podía ser su sonrisa, era tan bonita que cada vez que la veía hacía que mi estómago se contrajera, de un modo cliché, sintiendo mariposas. Uhm, ¡No entiendo por qué sus ojos me causan algo similar! Eran como dos pozos negros, con un brillo extraño que me hacía estremecer.

Yo solamente era un chico el cual gozaba de su total atención, de su cariño.

Además de eso, Mingi se ha visto más unido a mí que de costumbre. Incluso me ha besado en las mejillas, haciéndome gritar horrorizado. ¡Joder, odio el skinship! ¡¿Cuántas veces debo gritárselo?! San y Wooyoung se le unían, y a lo lejos podía escuchar como Yeosang y Hongjoong se reían de mi cara asqueada y de los constantes chillidos de los demás.

Eran unos idiotas. Y para colmo, Seonghwa se quedaba mirando, sonriendo de medio lado y... Jugando con un mechón de su cabello. Solamente se quedaba ahí, no me ayudaba y tampoco hacía el intento de acercarse para hacer lo mismo. Darme mimos que yo no quería.

Aunque si venían de él, no iba a tener ningún problema con aceptarlo... Odio estar tan enamorado de un tonto que sin dudas, pensaba que tenía algún virus mortal que le provocaría una cosa en la piel o algo por el estilo. Estaba tan enojado conmigo mismo por eso, me sentía mal.

Bufé, haciendo un puchero y dejando caer mi cuerpo sobre uno de los sillones de nuestro apartamento. Fijé mis ojos en el ventanal, mirando como los pajaritos iban de un lugar a otro, también como las nubes se deslizaban lentamente. Me daba rabia todo lo que estaba pasándome.

-¡HoHoHoHoHo!- Salté en mi lugar al escuchar tales gritos viniendo tras de mí. Quise disimular el mini-infarto que acababa de darme. San se rió como loco, mi cara seguramente era un poema y yo no estaba consciente de si tenía los ojos abiertos como un par de huevos cocidos o si tenía la boca apretada. Miré a esos tres con irritación. -¿Por qué tan solito? ¿Peleaste con tu novio otra vez o qué?- Wooyoung picó mis costillas al sentarse junto a mi, su sonrisa tonta estaba bien marcada y me daban ganas de partirle el cuello.

No de manera literal, o eso quería pensar.

-No... Seguramente está despechado porque te acabaste el cereal esta mañana y él no pudo desayunar.- Rodé los ojos, cruzándome de brazos, tratando de ignorar esa estúpida tertulia que estaba teniendo sobre lo "divertido que es burlarse de Choi Ignorado Jongho" Pff, ni siquiera rimaba ese nombre. -Oh... Sí, puede ser eso.- Mingi estaba parado de tras de mí, jugando con mi cabello bicolor como si fuese la cosa más divertida y entretenida del mundo.

-No es nada de eso.- Respondí con desdén, jugando con el cordón de mis pantalones de chándal, San volvió a reírse, estaba sentado sobre la mesita de centro, si mi novio llegaba a verlo sentado ahí, no dudaría ni un segundo en quitarse su pantufla y tirársela directo a la cara. -¡Ah! Entonces estás molesto porque no te hemos dado una muy buena dosis de todos los mimos que te mereces.- Los odiaba, sí, a cualquier persona le podía decir que los amo como a una familia, como mis hermanos mayores. ¡Pero no era así! Quería darles una bofetada a cada uno.

-No.- Alejé su mano de un golpe seco, sabiendo que iba a tocarme las mejillas con su dedo. -Ay pero que delicadito...- Incluso maldije en mi interior porque Wooyoung se seguía riendo de mí, y Mingi estaba haciendo de mi cabello un nido especial para los pajaritos de allá afuera.

❛ OTHERSIDE。Donde viven las historias. Descúbrelo ahora