La luz de luna alumbraba cada lugar que había en aquel lugar, Yoongi amablemente se había ofrecido por ir a dejarlo, paso casi una semana y la verdad no quería saber cómo por qué demonios nadie se había dado cuenta de que no había ido a sus clases, tendría que justificarse y entregar sus trabajos atrasados si no quería reprobar, así que ahí se encontraba caminando por su casa y recogiendo y limpiando eo lugar que por cierto casi más de veinte días que su hermano no se aparecía por el lugar no sabía si decir que esto era bueno o malo y maldecía internamente haber jurado que no comentaría nada de la existencia de Yoongi en su vida a Jungkook.
“No le digas a nadie que sabes que existo ¿si?”
Esas habían sido sus palabras, pensar en ellas y esa voz que se cargaba Yoongi le hicieron tener un leve escalofrío seguido de un cálido calor en su pecho, ¿era eso posible siquiera? No lo sabía.
Cerro los ojos un momento, necesitaba pensar y mentalizarse no es que no supiera de la existencia de aquellos seres simplemente era el hecho de que no sabía cómo tomárselo, osea entre Lisa, Momo y el se encargaban de vagar casi todas las tardes a encontrar pequeños de esos seres y regresarlos de donde venían, pero de eso a que uno llegará y le tratara tan amablemente era difícil de procesar.
Se acostó en su cama después de haber vagado por el lugar, ni siquiera se había dado cuenta de que había llegado a su habitación, y trato de pensar en el por qué raro sentir que tuvo con Yoongi, no había ni hombre o mujer que le haya hecho sentir así desde que tenía memoria es más, ni siquiera le gustaban ni uno de ellos.
Vacaciones amadas vacaciones, por fin pasaban, no más insultos o indirectas a su cabello, que vamos que sabía que no era normal andar teñido de rojo en la escuela y de seguro era por aquel detalle que lo molestaban.
Por alguna extraña y no tan extraña razón su rutina y todo a su alrededor había cambiado y drásticamente, eso lo había pensando mientras sentía como el de cabellos plateados le acariciaba el cabello en un días de esos.
Las constantes apariciones de Yoongi entre sus clases y horas libres como su nueva rutina de ir caminando hasta su casa, la cual quedaba bastante lejos de la escuela por cierto, lo tenían un poco estresado, le gustaba la compañía de Yoongi muy a su pesar.
Lalisa y Momo habían faltado un tiempo, pues ellas habían estado dañadas desde aquel incidente y se había enterado gracias a Dahyun, la prometida de Momo, la cual le había preguntado cómo había sucedido aquello.
—¿Entonces quieres que vaya y las cure a ellas? —La pregunta y respuesta de Yoongi sonaban demasiado molesta, más bien frías, el no tiene que andar cuidando a cabeza de trapeador y a la mono esa, por qué casi hacían que se muriera su... humano.
—¿Podrias? —Pregunto desde su cama, viendo a Yoongi sentado en la orilla de su ventana.
Para variar, desde que sabía en donde estaba su casa era casi imposible no verlo en el lugar, además de que básicamente le había ordenado que se deshiciera de la Sal que había en su ventana, Sal que por supuesto no se había dado cuenta que había ahí, pues al parecer Jungkook la había colocado por toda la casa.
Hablando de Jungkook solo le mando una carta...una misera y condenada carta que decía que se tardaría más de los esperado por asuntos que algún día cuando llegara le explicaría.
Es más, hablando de cartas, por qué mando una carta cuando podía fácilmente mandar un mensaje a su teléfono.
—No —Respondio de inmediato —No quiero.
— ¿Que, por que no?
—En serio quieres que vaya a donde estan...no se un clan de exorcistas de M**rda y me encuentren cerca de las próximas cabezas de el clan, Definitivamente no, me niego a ir rotundamente.
— Por favor...me curaste a mí por qué a ellas no...
La mirada que le dio Yoongi luego de que el haya dicho aquello lo saco de el onda.
Su mirada se había ensombrecido, sus ojos los cuales normalmente eran obscuros y brillantes le habían dado un sentir extraño, similar a un escalofrío, su piel se erizo y sus pupilas se dilataron un poco al verlo fijamente a los ojos, y un jadeó involuntario salió de su boca.
—Vendre mañana —Se despidio y en un chasquido desapareció.
¿Se abría enojado?, La verdad no lo sabía, Taehyung bajo la mirada un poco dándose cuenta de que había estado todo ese tiempo con la piel erizada.
Busco un por qué de su reacción, de momentos atrás, no había ninguna lógica más que aquella que pasó por si cabeza en ese momento.
—Tal vez es por qué me gustó la adrenalina que sintió mi cuerpo por algo que se que esta prohibido —Se respondió el mismo, no había otra respuesta por ahora, tampoco había respuesta de el por qué su corazón latía tan rápido en esos instantes.
![](https://img.wattpad.com/cover/227750473-288-k437890.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Wings: El Pecado De Un Angel[YoonTae 💕]
Fanfic-Donde te metiste TaeHyung -Vio a los lados y siguió corriendo, tenía un presentimiento muy fuerte y malo ese día sobre dejarlo ir solo a la escuela, pero al final accedió como siempre era costumbre. Detuvo su andar cuando entre la obscuridad logro...