Olvidado (Loricoln)

Capítulo 2: No arreglas espejos rotos

Era de noche, todavía se escuchaban los sollozos de Lori, pero algunas veces eran opacados por los gritos de Leni y las risas de Luan, a Luna no le importaba ya que tenía sus audífonos puestos, así que no era gran problema. Cierto tiempo después, tocando la puerta de la habitación del único hermano varón aparece la segunda hermana mayor.

Leni: Hola Linky.

Lincoln: Ya me preguntaba porque dejaste de gritar ¿Qué pasa?

Leni: ¿Vas a ayudar a Lori?

Lincoln: ¿Qué las demás no van a hacerlo?

Leni: No saben qué hacer.

Lincoln: ¿Y qué te hace creer que yo sí?

Leni: Siempre tienes un plan ¿no?

Lincoln: Lamentablemente no siempre Leni.

Un pequeño silencio hay debido a que la rubia tenía una pregunta en mente que podría no ser respondida como quisiese.

Leni: ¿Puedo dormir contigo?

Lincoln: ¿Roncas mucho o alguna cosa que hagas mientras duermes?

Leni: Pues... grito mis pesadillas...

Lincoln: No.

Niega la entrada rotundamente cerrándole la puerta en la cara. Solo pasó medio segundo para recapacitar.

Lincoln: Agh... porque tengo que ser tan blando...

Abriendo la puerta deja entrar a la rubia.

Lincoln: Esta bien puedes pasar...

Leni: Gracias Linky.

Lincoln: Al menos no es Lynn...

Al pasar la noche Leni no dio tanto problema, salvo que era demasiado grande para la cama del joven así que tenía que doblarse, dejando a su hermano muy cerca de caerse.

Lincoln: Creo que no pensé bien esto, digo ¿por qué no se fue con Lola y Lana? ¿Por qué siempre tiene que recurrir conmigo? O puede que todo sea un plan de Leni para arruinarme la noche y así obligarme indirectamente para ayudar a Lori... nah.

Viendo como dormía su hermana se dirigió a dormir a la bañera, como Lori no sería la primera en levantarse no abriría la llave, podría dormir tranquilo. A la mañana siguiente, la estilista gritó alertando a la familia que fue a verla.

Lana: ¿¡Pasó algo Leni!?

Leni: ¡Lincoln desapareció!

Atrás de la multitud aparece el peliblanco.

Lincoln: No Leni, estoy aquí, solo fui a dormir a la bañera.

Leni: Lo siento, no quería ser una molestia.

Lincoln: No, no es que eres muy grande para mi cama.

Luna: Uy, mala elección de palabras hermano, las demás se van dejándolo solo con ella.

Lincoln: ¿Mala elección?

Leni: ¿Me has dicho gorda?

Lincoln: ¿¡Qué!? ¡No! Es solo...

Leni: Pues si soy tan gorda ¿por qué me invitas?

Lincoln: Yo no te invité.

Leni: ¡Ah! Ahora resulta que dices mentiras, se acabó ¡fuera!

Lincoln: Pero esta es mi...

Leni: ¡Dije fuera!

Exclama empujándolo fuera de su habitación y cerrando la puerta. Solamente ve a Luna parada allí mismo.