Sintiendo el viento en su rostro, se fue obligada a abrir los ojos, y tuvo que contener su grito cuando se dio cuenta de que estaba en los brazos de sesshomaru volado por el cielo anaranjado.
- pero que...? - no pudo terminar, ya que sesshomaru le interrumpió.
- no importa lo que pase, debes mirar hacia al frente, da igual si todos te dan la espalda - dijo en seco mientras aterrizaba en medio del bosque.
- gracias por el paseo, aunque no te lo pedí - dijo con el ceño fruncido.
- de nada - contesto con su misma expresión.
El sol ya se había ocultado, y las estrellas iluminaban el cielo junto con la luna, la miko miraba el cielo estrellado, y por una razón le empezaba a dar sueño, tal vez sea de la debilidad, no lo sabia y tampoco le importaba del todo.
- esta mañana - susurro después de cerrar los ojos y recostarse en un árbol.
Estaba durmiendo tan bien, que no se dio cuenta de que tan cálida era el suelo en el que estaba acostada, pero tuvo que abrir sus ojos por un susurro que la llamaba una y otra vez, hasta despertarla bien.
- kocho - somnolienta.
- señorita - hablaron las dos al mismo tiempo.
- ¿por cuanto tiempo me quede dormida?
- todo un día - contesto asuka.
- ya veo - mirando a su alrededor noto la estola de sesshomaru - *debo regresarsela*
- señorita kikyo - hablo el joven exterminador.
- ¿kohaku que haces aquí? - pregunto.
- recuerde que yo viajo con usted -contesto.
- ya veo, bien entonces... - levantándose - quédense aquí, ya regreso...
- esta bien - contestaron los tres al mismo tiempo.
- regresare en la mañana - perdiéndose por los árboles.
Ellos solo asintieron y se quedaron ahí, kikyo no sabia que hacer, tenia que hacer algo para que inuyasha y naraku no sepan de su existencia, pero hora era de buscar al dueño de la estola. Con pasos tranquilos, se sentó en un árbol al sentir la presencia de sesshomaru.
- se que estas ahí... sal - dijo con los ojos cerrados.
- ¿que haces aquí? - pregunto.
- vine a entregarte esto - contesto levantándose de donde estaba sentada hace unos segundos - gracias.
- como sabias que estaba aquí - dijo tomando su estola entre sus manos.
- sentí tu presencia - contesto - *si debo de esconderme y pensar una estrategia para matar a naraku debo luchar, tanto en arco como espada* - pensó.
- ya veo - se va caminando.
- sesshomaru - le llamo haciendo que este se detenga en seco y sin voltear a ver contesto.
- ¿que quieres? - pregunto.
- quiero aprender a pelear, por favor, entrename todas las noches.
- .... -se quedo todo en silencio.
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