Virgen | Heartstopper

3. Demonio manipulador

Tal vez es un poco enfermo que Nick se sienta halagado.

Charlie deseaba probar por supuesta curiosidad. Y lo quería hacer con Nick. De todos los chicos que se le insinuaban, Charlie ansiaba que Nick lo sometiera y lo hiciera suyo aunque sea para poder decir que no es virgen.

Y es exactamente por eso que el mayor tampoco es capaz de mentirse a si mismo. Sabe claramente que el más pálido solo quiere hacerlo para poder decir "obviamente he tenido sexo y fue maravilloso" aunque probablemente no haya sido así.

¿Se quiere follar a Charlie? Sí. Eso es cierto. Lo haría con gusto si no fuera porque es algo delicado el tema de perder la virginidad y él nunca se imaginó estar en una situación así. Y no es por reírse de su mejor amigo, pero vamos, es obvio que Charlie no ha dado ni su primer beso aún, y si piensa egoístamente, él no sería capaz de disfrutar mínimamente, porque la falta de experiencia lograría opacar el pálido y hermoso cuerpo de Charlie

O eso es lo que piensa.

— Y como quería probar, pensé en ti — Charlie se acomodó en su asiento de la cafetería y miró a su acompañante, quien se mantenía totalmente incrédulo — Eres cercano a mi y... — El rizado suspiró dramáticamente, aunque por dentro en realidad se sentía inseguro, estaba exagerando la reacción — Creí que tú no te burlarías de mí por no saber besar o donde tocar —

Jodido demonio que sabe manipular a las personas.

— Lo haré — Nick le dió un trago a su café.

— ¿Enserio? —

— Sí, pero quiero algo a cambio —

— Te puedo pagar si es lo que quieres —

— Spring, no soy ningún prostituto al cual le puedes pagar y marcharte como si nada —

Ambos rieron ante el comentario.

— No pero ya hablando enserio — Nick acomodó su cabello — Necesito ayuda con mis ejercicios de cálculo, me está yendo pésimo en la materia y no creo salvarla —

— Claro, yo te ayudo —

— Gracias, Char — Nick se levantó de su asiento — Quedé de ir con Harry a su casa para terminar un proyecto, nos vemos —

— Nos vemos —

Charlie sabía que no habría vuelta atrás, solamente sería sexo entre amigos, leves minutos o quizás horas donde Nick y él gozarían del rose de sus cuerpos. No hay motivos para sentir algo más, ¿O sí?

Fue cuestión de segundos para que Tao e Isaac se posicionaran frente a la mesa donde se encontraba el menor. Tao vió de reojo como Nick se alejaba mientras que Isaac mantenía la vista clavaba en su libro.

— ¡Oh, mirenme soy Nick Nelson, el rey del Rugby! — Tao hizo una leve pantomima en señal de burla.

— Tao, ¿Alguna vez intentaste tan siquiera mantener una conversación con Nick? Sí lo conocieras mejor te darías cuenta que no es tan malo como crees —

Tao volteó los ojos en señal de desaprobación.

— En fin, hoy tenemos noche de películas en casa de Elle — Tao miró la botella con agua que sostenía Charlie entre sus dedos — ¿Quieres qué vallamos por algo de comer a la cafetería? —

— No, así estoy bien. De hecho, ya me tengo que ir, quedé de verme con Mr. Ajayi para checar lo de la feria de artes, adiós —

Charlie se levantó de su asiento dispuesto a caminar hacia el salón de artes, o por lo menos eso fue lo que les hizo creer a sus amigos.

El sonido de las arcadas se hizo presente en el baño de hombres, el olor a vómito se disuadía junto con el olor a orina, Charlie bajó la palanca del inodoro y se dirigió al lavabo para limpiar los restos de comida de sus labios.