Joseph.Sigo encima de Alondra haciéndole cosquillas mirándola reír sin parar y sintiendo tranquilidad, conociendo una parte de mi que no sabía me gustaba. Es increíble como un momento que se ve tan infantil puede darte tanta alegría como tranquilidad, un escape de esa realidad dolorosa.
Me había perdido tanto en mis pensamiento que esa castaña tramposa logró de un momento a otro estar encima de mi y ahora solo me retuerso soltando grandes carcajadas gracias a las cosquillas.
-¿Porque te ríes Joseph?- me pregunta con burla.
-Para...lo...la...mentaras.
-¿Que dices? ¿Ah?
-Ya.... ya ..... para.- logro desestabilizarla.
-Voy a matarte castaña.- le digo con la voz agitada.
-Si puedes atraparme- dice antes de salir corriendo.
Comienzo a perseguirla.
-Sabes que pierdes el tiempo, te atrape, lo sabes.- Le digo lo que es obvio.
-Silencio rubio, no arruines la diversión.
Cuando estoy cerca de atraparla ella sube a un arbol quedando fuera de mi alcance.
-Oye castaña loca ¿que haces? Te vas a lastimar- le digo mirándola subir más alto.
-Te dije que no me ibas atrapar.- dice con suficiencia sentada en una rama.
-Bueno como digas, pero ya baja que te puedes hacer daño.
-Esta bien.- me dice poniendo los ojos en blanco.
La veo bajar poco a poco pero al poner el pie en una rama esta se parte haciendo que la castaña caiga, corro hacia ella lo más rápido que me es posible. Antes de que llegue al suelo logro atraparla entre mis brazos.
Tiene la respiración agitada y está con los ojos cerrados, la veo y niego, esto le pasa por terca.
-Oye Alondra, ya estás bien puedes abrir los ojos.
Ella lo hace despacio, su mirada se encuentra con la mía y tengo que admitir que esos ojos azules son tan bonitos que logran hipnotizar.
Me sonríe.
-Veo que por lo menos sirves para algo.- me dice relajando sus músculos y con algo de burla.
-Sirvo para muchas cosas- le doy una sonrisa torcida
Pone los ojos en blanco.
-No dañes el momento con arrogancia.- dice comenzando a bajar de mis brazos.
Me río.
-¿Y ahora que quieres hacer? ¿Vamos a comer a algún restaurante?- le pregunto.
-¿Crees que nos dejaran entrar así como estamos?- me dice señalandonos.
Por supuesto, estamos demaciado sucios por estar jugando en el césped y además de que ella montó un árbol.
-Bueno, entonces vamos a mi casa.- le prongo.
-¿Me está haciendo usted una propuesta indecente señor Joseph?- me pregunta con burla y picardía.
-No lo sé tu dime.- ambos rompemos en risas por las tonterías que decimos.
-Vamos así puedo darme un baño y cambiarme de ropa, para llevarte a tu casa- le digo notando que esta pensando mucho.
-Esta bien y así también me doy un baño traigo ropa en mi bolso, no quiero parecer una loca.- me dice.
-¿Porque traes ropa en el bolso?- le pregunto con curiosidad.
-Por si me ensucio en gimnasia o si me quedo en casa de Susan.- me responde restandole importancia.
-Y ahora para poder darte un baño conmigo.- añado con inocencia
-No me voy a bañar contigo.- me dice sacando el dedo del medio y acompañandolo con una sonrisa inocente como la que le di segundos atrás.
Vamos caminando hacia el parqueadero de la escuela para recoger mi coche y ir a mi casa.
Y es ahí justo en ese momento que me doy cuenta que Alondra es la primera chica que invito a mi casa, puede que me enrolle con muchas chicas pero siempre e respetado mi casa.
Una más a la lista de las cosas que ha cambiado Alondra, desde el primer momento supe que pondría mi mundo alreves pero lo que no sabía era que tanto lo haría.
![](https://img.wattpad.com/cover/227232253-288-k752411.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Maldita Contradicción.
Dla nastolatkówUna vida perfecta. Llena de placer, fiestas, Amistad, popularidad, chicas a mi Alrededor. Tenia todo lo que queria, todo lo que anhelaba no habia imposible para mi. Rico, deseado, problemático y admirado , asi era yo. tenia una vida perfecta vivien...