010 💙

7.1K 585 363
                                    

Capítulo 10:

—¿Ashley?... Por favor no seas tan insolente con él, no se lo merece— Le suplicó su madre.

—Tú no respetaste mi opinión. En realidad creo que ni siquiera me escuchaste. Te dije por más de mil veces, que quería mantenerme alejada de todo esto. Así que no estás en la mejor posición para hacer negociaciones conmigo— Respondió la castaña

—A veces pienso que estás enamorada de Finn— Teresa siguió conduciendo su auto

—¿Qué?— Permaneció sin palabras durante un prolongado momento —Claramente la de los pésimos gustos eres tú— Comentó al final. Se esmeró demasiado para controlar el desequilibrio y la inestabilidad de sus emociones y al mismo tiempo, romper el vínculo que estas tenían con las reacciones de su cuerpo. Por nada del mundo quería terminar sonrojada, se alentó a sí misma para no hacerlo, como si aquello fuera propio de su manipulación, después de varios segundos, se resignó a un asunto que ya se había vuelto inevitable, por lo tanto, su lado histérico se reveló —Nada de lo que dices tiene sentido ¿Por qué yo estaría enamorada de Finn? ¡Nunca me habían ofendido tan feo!— Gritó exagerada. Solo así lograba convencer a su propio orgullo, o por lo menos lo intentaba.

—Entonces dime ¿Por qué lo odias?— Insistió la madre

—El mundo no gira a su alrededor. Yo no lo odio, pero, admito que no me cae bien, razón que para mi es respetable, además, la verdad no creo que tú seas feliz con él.

Las discusiones de madre e hija se habían vuelto más frecuentes, desde el momento en el que Finn se integró a sus vidas. De acuerdo a sus propios ideales, Ashley de alguna manera quería mejorar el resultado de las desiciones de su madre, pero en medio de sus argumentos, ni ella misma entendía la verdadera razón de sus ataques de rabia, hacia Finn. Las reacciones de Ashley ante la presencia de su docente, no eran planeadas por ella. Este proceso podría describirse como el desprendimiento de una sensación interna y compleja, aún para el alcance de su mente ilimitada, algo que no poseía una tarjeta de identificación, algo que le prendía fuego por dentro y a consecuencia de esto, terminaba diciendo cualquier tontería.

Las "citas" de Finn & Teresa también surgían con más frecuencia y Ashley por obligación tenía que estar ahí. La presión de su madre, se multiplicaba al doble cada vez que ella decía que no y eso le provocaba dolor de cabeza.

—Finn, tú sabes que no puedo estar al pendiente de mis hijos, no como yo quisiera. Jaeden me detesta y no se que pasa con ésta niña— Teresa hablaba cómodamente. Gracias al cielo fue interrumpida.

—Si tu urgencia era venir a criticarme, por lo menos hubieras dejado que me quedara en casa, así podrían hablar de mí con más tranquilidad— Replicó

—Tranquilízate princesa, tu mamá está preocupada por ti— Mencionó Finn

—¿Cuántas veces tengo que decirte que para ti solo soy Ashley?

—¡Hija!— Le reprendió su madre

—Solo estoy defendiendo mi punto de vista ¿Acaso ya ni eso puedo hacer?— Agregó Irónica

Aquella discusión no pudo continuar, Teresa recibió una llamada telefónica de parte de la oficina para la que estaba laborando.

—¿Finn? ¿Puedo pedirte un favor?— Cuestionó después de haber colgado el teléfono, transmitiendo una vibra preocupada.

—Sí claro, dime— Aceptó el pelinegro

Ashley frunció su rostro cayendo en la misma angustia que demostraba su madre, no tenía ni la menor idea de lo que estaba pasando.

—¿Puedes llevar a Ashley contigo?. Me llamaron de la oficina, en veinte minutos tengo que estar ahí y probablemente también pasare toda la noche ahí. No puedo dejar que mi hija duerma sola en casa— Dijo

—Por supuesto— Finn ni siquiera se dió a si mismo la opción de negarse.

—¡Oh no! ¡Claro que no! ¡Yo con él no voy ni a la esquina!... Nada más esto me faltaba, ahora me vas a tratar como una bolsa de basura que puedes abandonar en donde y cuando te plazca— Declaró la castaña, de nuevo presa de la histeria.

—Ashley no es una opción, después hablaré seriamente contigo...

—Sí claro ¡Que miedo!— Murmuró sarcástica

El inicio de una noche larga. Seguro.

Lyattinn

The Teacher «Finn Wolfhard»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora