The Teacher «Finn Wolfhard»

-The teacher-

Epílogo:

Querida Teresa:

Recuerdo exactamente el ímpetu que sentía mi cuerpo en el momento que te conocí, algo en mi interior me decía con certeza, que tú me llevarías a los momentos más especiales de mi vida, sin embargo, nunca me enfrenté al verdadero enigma. Compartí muchas cosas contigo y gracias a eso, puedo decir que eres una mujer admirable, pero, necesito ser sincero contigo. De verdad quería que lo nuestro funcionara y por ende hice todo aquello que consideré correcto. Muchas de nuestras conversaciones, se basaban en las personas más importantes en tu vida, tus dos hijos. Ahora confieso que elaboré mis propias investigaciones y no descansé, hasta que conseguí trabajo en la escuela en donde estudia tu hija. Cuando conocí a la pequeña Ashley... bueno, tú más que nadie conoces la personalidad de tu hija, así que desde el principio me encontré con un fuerte temperamento, fue como si ella hubiera presentido el futuro. Hice todo lo que estuvo en mis manos, para ganarme su simpatía y comprenderla, pues siempre me sentí atraído por su indiferencia. Mi cerebro poco a poco se confundió, ya no solo me enfocaba en ti, sino que en ella también. Me resultó difícil aceptar que me estaba enamorando de tu hija. Me convertí en el docente que ella necesitaba, también actúe como un acosador cibernético... Y sería mucho peor, si también me convierto en su padrastro. Después de esto, comprenderás que unir nuestras vidas sería un completo fracaso. Quiero que estés tranquila, porque no pienso hacerle daño y de verdad espero que algún día puedas perdonarme...

Finn

Vestida de novia, la mujer término de leer la carta. Su mundo colapsó junto al llanto. Estaba derrumbada, pero no podía sentarse a llorar, la dueña de la preocupación que ahogaba su garganta, era más importante.

—¡Jaeden!— Exclamó al teléfono, corriendo por la casa de una de sus amigas, para poder llegar a su auto.

—¡Mamá! ¡Gracias a Dios contestas! ¿Qué está sucediendo ¿Por qué no llegas?— Respondió el chico desde la iglesia junto a todos los invitados.

—¿Tú hermana está contigo? ¡Jaeden por favor dime que no te has separado de tu hermana!— Por el momento solo le importaba el bienestar de su hija menor.

—Debe estar envuelta en el tráfico... Tenía entendido que tú pediste un transporte privado para ella.— Se frenó y le encontró forma a sus palabras —Tú no hiciste ninguna petición ¿Verdad?... ¿Mi hermana está en peligro, verdad?

[...]

Aquel automóvil seguía en marcha, unos kilómetros más lejos. Ashley no se despidió de sus familiares y amigos, pero, se sentía feliz porque estaba con la única persona que de verdad amaba.

—¿Princesita, todo está bien?... Podemos regresar, si es lo que tú quieres— Mencionó el pelinegro y Ashley soltó una risita burlona.

Finn contempló sus manos entrelazadas y después, sin alterar la conexión, le depositó un beso sutil.

—No llevo ni un día secuestrada y tú ya me quieres devolver... No te librarás de mi tan fácil.— Declaró

—Lo último me fascina— Respondió —Ahora eres mi inspiración, no te dejaré ir jamás. Prometo darlo todo por ti y para ti.

—Yo también deseo vivir todo contigo. De corazón acepto todo lo nuevo que se viene. I love u

—I love u too

Ashley se tranquilizó durante el resto del viaje. Ella se sentía segura estando con Finn, pero constantemente repetía la frase: ¡Perdóname Mamá!

Lyattinn