Princesa Lila

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-Vamos, ¡sé que tú puedes! – me alienta Poppy.

Estamos todos en el capullo de la reina, el Snack Pack parece emocionado porque les muestre lo poco que he avanzado con mi magia. Ninguno de ellos ha podido desarrollarla, somos los únicos que saben sobre esto.

Me agacho algo inseguro, trato de concentrarme para hacer que el suelo se vuelva hielo. Todos gritan emocionados mientras comienzan a patinar. Mi amiga me da una flor, a la cual rodeo de escarcha, pero esta se desarma y ruedo los ojos al ver que ese truco todavía no me sale del todo.

-¿Cuál crees que puede ser nuestro poder? – le pregunta Seda a Satín.

-Definitivamente debe ser el don de la moda, hermana.

-Yo puedo expulsar brillantina, ¿contará como magia? – se cuestiona Diamantino.

-Personalmente creo que tuve demasiada suerte al descubrir el mío, pero no creo que sea del todo seguro. ¿Y si estamos jugando con algo que no podemos controlar?

-Ya deja las paranoias atrás, Ramón. Trata de ver el lado positivo, ¡nos traerá toneladas de diversión y puedes usarlos para cuidar de nosotros! ¿No es eso lo que quieres? – trata de convencerme Poppy. Hace su carita de cachorro tierno y vulnerable a la cual nunca puedo negarme. Ella es consiente del poder que tiene sobre mí y lo utiliza a su favor.

-Si, tienes razón.

Escuchamos trompetas, nos miramos confundidos preguntándonos porqué brillantinas sonarán, o quién las tocará. Salimos casi corriendo del capullo para ver una fila de trolls que nunca habíamos visto en nuestra vida, vestidos de manera extraña. Del centro de ellos sale una troll naranja con una corona de flores muy parecida a la que Poppy usaba en sus días de princesa.

-Venimos en paz – su voz es melodiosa, casi hipnotizante – solo quiero hablar con sus reyes.

Mi amiga acomoda su corona y me sonríe, pidiéndome con una señal que vaya con ella, probablemente para que la proteja de cualquier emboscada. A medida que nos acercamos a ella, los trolls que ahora deduzco que son guardias, nos apuntan con sus armas amenazantes. Me concentro en activar un poco de poder en mis manos en caso de tener que atacar, y dejo al alcance a Gary.

-Genial, si tienes magia ¡Tus manos brillan! ¿Cuál es tu poder? – se acerca la troll extraña hacia mí. Poppy carraspea su garganta intentando llamar la atención -¡Lo siento! Solo me alegra por fin haberlos encontrado. Soy la princesa Lila, de un reino lejano llamado Trollstopía. Supongo que ustedes son el rey y la reina – nos sonríe.

-Soy la reina Poppy, él es mi mejor amigo y mano derecha, Ramón. ¿Te parece que hablemos de esto en mi capullo? No todos saben de la magia aquí – le susurra.

Es así como terminamos en su capullo con tazas de café en las manos y pastelillos. La princesa Lila nos explica la situación en la que está su reino; solían ser parte de nuestra villa, hasta que el rey proclamó ocultar la magia. Todos aquellos que estaban en desacuerdo se aislaron y crearon su propia aldea. Muchos años después, su padre fue asesinado por una bestia feroz, y como ella era solo una niña el reino fue cedido a su tía; la ahora reina Stela.

El trato era que cuando Lila tuviera suficiente edad, tomaría el trono. Pero antes de que esto pasara, Stela usó un hechizo que le quitó su magia a todo troll que la desafiara, incluyendo a la princesa. Sin magia Lila no podía reclamar y luchar por su corona, su tía se había convertido en el ser más poderosa de todos. Y sacaba provecho de aquello.

-Habíamos perdido totalmente la esperanza, nadie puede desafiarla sin magia. Excepto tú – me señala – estuve años esperando que alguien desarrollara su magia para poder recuperar a mi reino.

-¿Qué tan peligrosa es? – pregunta Poppy.

-Su don no es muy complicado, puede controlar el agua. Con tu ayuda, Ramón, podemos recuperar nuestro hogar.

-Es totalmente tu decisión, no estás obligado a hacer nada que tú no quieras – me murmura mi rosada amiga.

Todo esto es extraño, es demasiada información para digerir y no estoy seguro si puedo controlar la magia lo suficiente para usarla en combate. Además, ¿quién nos asegura que todo esto es verdad y no nos están timando? Tal vez quieren tomar nuestra villa por la fuerza y todo esto es solo una farsa.

-Podemos entrenarte, tu poca experiencia no tiene que preocuparte – dice uno de sus guardias.

-Yo pongo las condiciones, me llevarás a tu reino para comprobar que todo esto es real y no dices mentiras. Tus guardias deben proteger la villa mientras no esté, y quiero el doble de seguridad para Poppy.

-¡Hecho! – grita Lila.

-¡¿Qué?! No, yo iré contigo – se queja.

-Puede ser peligroso, te quiero a salvo – ella resopla y desaparece cinco segundos, y luego aparece frente a mí cinco armas en sus manos. Observo a los guardias y estoy seguro que no tienen idea de que les pasó.

-¿Olvidas que soy la maestra ninja? Soy tu reina, es mi deber protegerte.

-¡Genial! Saldremos mañana temprano. ¡De verdad gracias! - Se acerca a mí y me abraza eufórica. Me sonrojo por el simple hecho de que aún no me acostumbro a los abrazos, a menos que sean de mi reina.

-¡Menos abrazos y más charla! – exclama Poppy, sus mejillas están adorablemente sonrojadas – tenemos un viaje que organizar.

La conozco, es probablemente la troll más posesiva que existe. No es la primera vez que se enfada y veo esa carita disgustada porque otras personas me abrazan más de lo normal, según ella es su trabajo como reina y mejor amiga darme los mejores abrazos del mundo.

Y no se equivoca, definitivamente adoro sus abrazos. No hay como los de ella. 

Magia [Broppy]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora