Capítulo 5

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Ya era jueves y su hora de almuerzo llegó, solo un día más y podría darle la bienvenida al esperado fin de semana. Había sido una semana bastante ajetreada en el trabajo pero lo que más la había dejado con la mente ocupada era la última conversación que había tenido con Bakugo.

En cierta parte había abierto parte de su corazón al contarle cuál fue su mayor anhelo, cosa que muy pocas personas sabían, y sólo se conocían desde hace un par de días. Pero su instinto, que muy pocas veces fallaba, le decía que podía confiar en el rubio, además era inexplicable la atmósfera que se formaba cuando estaban los dos solos en el mismo lugar y como su cuerpo y mente reaccionan a la cercanía del héroe deseando inconscientemente permanecer más tiempo a su lado.

—Te veo pensativa Ochako.

La suave voz de Momo irrumpió en el lugar y ella le sonrió en respuesta. Dentro de poco sus amigos comenzaron a llegar para comer.

—Cosas del trabajo —mintió un poco—¿Cómo estás? — le preguntó a su amiga mientras ella dejaba su bandeja de almuerzo en la mesa y tomaba asiento.

—Cansada, ha sido una mañana bastante movida, necesito un té para relajarme — sacó de un bolso su conocido termo con té de quizás qué país—¿Quieres un poco? Te ayudará a despejar la mente —le ofreció con ojos brillantes.

Uraraka asintió mientras la morena le servía en un pequeño vasito que sacó del mismo bolso.

—Dios, esto está delicioso.

—Es un té con toques de jazmín— respondió Momo entusiasmada mientras bebía —¿Y Tsuyu-chan?

—Quedó pasando una información al sistema, viene en unos minutos.

Momo asintió y ambas comenzaron a comer mientras esperaban al resto de sus amigos. Yaoyorozu era una joven muy comprensiva y preocupada por el resto, además con cierto aire de liderazgo que se notaba al momento de tomar decisiones como grupo.

—¡Buenas tardes, señoritas!— saludó Iida con su toque energético de siempre el cual venía acompañado de Shoto—perdón por el retraso, no es muy educado de nuestra parte hacerlas esperar.

Ochako río ante las palabras de su amigo y ambos tomaron asiento.

—No se preocupen, recién empezábamos. — respondió Momo.

—Ya estoy aquí, quero.

Con los cinco reunidos dieron inicio a su ritual de descanso. Al observar a sus amigos Ochako se dio cuenta que todos estaban en las mismas condiciones que ella, cansados a más no poder.

—Parece que esta semana nos está destruyendo a todos. — comentó la castaña.

—Esta semana estamos en Urgencias— respondió Todoroki señalando a su vez a Iida.

— Auch— respondió Momo al entender el agotamiento de los muchachos.— Menos mal yo no vuelvo a ese lugar hasta dentro de un mes.

—En la sala de rehabilitación también hay mucho movimiento, parece que es la temporada de las lesiones— aportó Tsuyu dando un suspiro.

—A todo esto ¿Cómo te fue con Bakugo-san?— le preguntó Iida.

A Ochako la tomó desprevenida la pregunta de su amigo por lo que dio un pequeño salto que causó preocupación en el rostro de sus amigos.

—¿Tan mal fue? — quiso saber Todoroki, él era el más introvertido dentro del grupo pero se sorprendió al ver la reacción de la castaña.

—¡No, no, no, no!— aclaró bastante exaltada—Quiero decir ...fue bastante mejor a lo esperado— los tranquilizó llevando una mano tras su cabeza.—No hemos tenido ningún inconveniente y él no tiene problema en cooperar.

Dime que estará todo bien (KACCHAKO/BAKURAKA) Finalizada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora