ᴄᴀsᴇ: ʙʟᴏᴏᴅ sᴡᴇᴀᴛ & ᴛᴇᴀʀs 「ᵇᵃᶰᵍᵗᵃᶰ ᵇᵒʸˢ」

「⁰⁶」

" Quien con mounstros lucha, cuide de no convertirse en uno. Cuando miras largo tiempo a un abismo, el abismo también mira dentro de tí. "

— Friedrich Nietzsche.

El sol atravesaba las cortinas de baja calidad del motel llegando al rostro de Eunji, mientras la mencionada se arrinconaba más al cuerpo que se encontraba abrazando; al despertar, frotó sus ojos para adaptarlos a la luz mientras se formaba el producto de la noche anterior como dolor de cabeza.

—Mierda. —maldijo la pelinegra en susurros, cuando observo el cuerpo semidesnudo del agente Min.
En silencio y con rapidez, se colocó la ropa interior que arrojó al piso sin vergüenza en la noche, y caminó hasta el baño; la imagen que el espejo reveló de sí misma le entregó pequeños flashbacks de lo que había vivido con el de cabellos rubios, provocando un enorme sonrojo en su rostro.

La marca en su cuello era la más prominente y notoria de todas las que estaban en su cuerpo. ¿Cómo la haría desaparecer?
Mientras se atormentaba pensando en alguna solución, al mismo tiempo se prometía volver a beber en al menos mil años. Pero tales pensamientos y promesas se vieron interrumpidas por el sonido de su celular, por lo que tuvo que regresar a la habitación, pero era tarde el agente Min ya se hallaba despierto y frente a ella, tendiendole su móvil con seriedad en la mirada.

—Deberías contestar, es tu compañero. —dijo con voz somnolienta; Eunji asintió con la cabeza y tomó su móvil de las manos del de cabellos rubios, deslizando la pantalla para aceptar la llamada del nombrado agente Jeon.

—Agente Geum. —el de cabellos negros sonaba preocupado y alterado.

—¿Qué sucede, Jeon? —preguntó confundida.

—¡Oh, diablos! Estaba preocupado. Te estuve llamándo desde anoche y no respondías ninguna de mis llamadas. ¿Donde estabas metida?

—Oh, yo... —miró a la figura masculina que tenía delante con indiscreta discreción, mientras pensaba en una mentira que darle a Jungkook.
Yoongi por su parte simplemente observaba con delicadeza a Eunji, pensando internamente que debía irse antes de que él también recibiera una llamada. —No es nada, estoy bien. ¿Qué sucede? —preguntó la fémina desviando el tema y la mirada también.

—Volvió a hacerlo, Eunji, debes venir a verlo, porque ahora hay algo peor. —soltó el pelinegro y segundos después terminó la llamada.

—Me tengo que ir. —dijo Eunji después de escuchar que Jungkook colgó sin decir más palabras. —En realidad, de-deberíamos ir ambos.

—Creo que es mejor que te vea allá. —Eunji asiente a las palabras del rubio y después de tomar sus zapatos y su pantalón, salió como si nadie fuera a mirarla raro mientras se termina de vestir en el pasillo.
El auto de Yoongi estaba en el estacionamiento, y aún si quisiera regresar y obligar al rubio que la lleve a la estación, algo le hacía pensar que tomar un taxi resultaría mejor.

—Jeon, ¿Que tenemos? —preguntó Eunji en cuanto puso un solo pie en la estación, todos le miraron de una manera inexplicable, pues lo que tenían era algo que no podían creer.

—En definitiva, no es algo bueno. —responde el azabache con palabras secas.

—Mismas marcas, palabras en su cuerpo, pero, ésta vez todo fue ante-mortem. —Taehyung ni siquiera sabe qué expresión poner en su rostro ante lo que está relatando. -Murió de dolor.

—¿Ya la identificaron?

Park asiente: —Choi Hanjan. 19 años, estudiante de gastronomía; su amiga reportó que no supo nada de ella después de que saliera de la fiesta en la que estaban, eran al rededor de las 3 a.m. —Eunji miró las fotos del cuerpo una vez más, y centrando su atención en las palabras que con dificultad se podían leer por el lastimado cuerpo de la víctima, se vió aún más confundida.

•

—Nun, ¿Que tienes?

—Nada que te importe, aún.

—Eso lo decido yo, ¿Que tienes? Dime antes de que te obligue a hacerlo.

Después de soltar aire, Nun respira profundamente y comienza a relatar: _El mensaje fué más que recibido.

—¿Cuál fue su reacción?

—Yo... —Nun no supo cómo explicar la reacción de la pelinegra al ver el cuerpo brutalmente asesinado, pues realmente no la sabia.

—¿Tú... que? —insistió Namjoon.

—Lo lamento, fuí por algunas cosas que necesitaban en la estupida oficina.

—¿No podías quedarte tres malditos minutos a mirar su reacción? Sabes lo importante que es éste plan y no dejaré que nadie lo estropeé, ¿O quieres regresar al hoyo del que te saque?

—Carajo, te recuerdo que yo también soy parte importante de esto, así como Jeolmang. Deja de pensar que tú eres el líder, porque todos hemos hecho mucho más que tú.—la llamada fué terminada y sin mesura, comenzó a soltar maldiciones mientras tiraba de su cabello.