Pollo frito [WooGyu]

82 11 0
                                    

Cuando Sung Kyu llega de la universidad esa tarde, se deja caer en el sofá. Está rendido, pues la semana de exámenes está comenzando y ya se siente sin fuerzas. Se ha desvelado casi toda la semana estudiando y ni siquiera ha podido comer algo 'decente'.

Su estómago ruge, hambriento, y no tiene más remedio que ir a la cocina para revisar la nevera en lugar de ir a su cuarto y perderse bajo sus tibias mantas para dormir. Al ver dentro del refrigerador pensando en lo que puede prepararse de comer, escucha la puerta de la casa abrirse, y su hermano menor Myung Soo le hace compañía en la cocina segundos después.

—¿Vas a preparar la cena? —inquiere el más joven al notar que Sung Kyu hurga en el electrodoméstico.

—Quisiera, pero veo que no fuiste al supermercado —menciona con un leve tono de reproche.

—Lo siento. Sé que te prometí hacerlo porque mis clases terminaron temprano, pero Sung Yeol me pidió que le ayudara con un proyecto y no pude negarme.

—Mmh...

—¡Es cierto!

Sung Kyu mira a su hermano con una ceja levantada y éste se ruboriza de golpe.

—Pide algo por teléfono —dice el mayor al final antes de ir al sofá para ver la televisión.

—¿Pollo frito? —sugiere el más joven.

—Lo que sea...

Media hora después, Sung Kyu escucha sonar el timbre, deja el mando de la televisión en la mesita y toma su billetera. Se apresura a abrir la puerta pues su estómago ya no puede esperar más y cuando levanta la vista para responder el saludo que le dedica el repartidor, se queda completamente mudo por su apariencia. «¿Desde cuando trabajaban chicos tan apuestos en ese local?», se pregunta mentalmente.

—Traigo una orden de pollo frito para Kim Myung Soo —menciona el muchacho sin despegar los ojos de los de Sung Kyu.

Kim asiente con rapidez y toma la caja mientras ve el nombre del muchacho en la placa sobre su uniforme.

—S-sí —carraspea a la vez que le extiende algunos billetes. Pero el dinero resbala de su mano y cae al suelo. Sung Kyu se apresura a agacharse para levantarlos y el repartidor imita su movimiento, por lo que ambos terminan golpeándose las cabezas entre sí. Kim se sonroja por la pena y nota que el otro joven también se ha avergonzado—. Lo siento y gracias. Puedes quedarte con el cambio, Woo Hyun —menciona al entregarle el dinero.

El repartidor le agradece con una enorme sonrisa y una pronunciada reverencia mientras lo sigue observando. Sung Kyu lo mira con mucho interés y no puede evitar suspirar profundamente cuando el muchacho se da la vuelta para subir a su motocicleta y alejarse poco a poco de la casa.

...

Al día siguiente, Myung Soo se dirige a la cocina enseguida de que entra a la casa. Es un poco tarde, pero sabe que su hermano no le dirá nada pues ha traído unas cuántas cosas del supermercado para preparar la cena el resto de la semana.

Pone las bolsas en la encimera para sacar todo y entonces se da cuenta de que Sung Kyu ya ha cenado, porque hay una caja de pollo frito en el bote de basura y nota que hay una más en la barra del desayuno.

Myung Soo frunce el ceño al percatarse de que es pollo frito del mismo restaurante que pidió ayer por teléfono y le parece extraño que Sung Kyu haya comido eso porque suele quejarse de cenar lo mismo dos días seguidos. Sin embargo, también sabe que su hermano mayor es un poco holgazán cuando de preparar la cena se trata, así que le resta importancia y continúa con su labor de guardar lo que acaba de comprar.

ONE-SHOT & DRABBLE [WooGyu & GyuWoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora