Cita

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Tonks, Remus y Teddy habían salido de vacaciones hacía escocia. Le habían rogado a Andrómeda que fuera con ellos y ella amablemente accedió, se encontraban en una cabaña cerca del legendario lago Ness, el lugar estaba repleto de muggles, por lo que sería un entrenamiento para Teddy si de verdad quería entrar a la escuela el siguiente año, ya que todavía tenía problemas controlando sus cambios y recientemente su magia. Sus padres le habían dicho que no había prisa, pero él sí la tenía. Tonks llevaba el cabello castaño con luces de un color más claro, Teddy traía el mismo tono de su padre e insistía en llevar las cicatrices del rostro igual que él. 

El año nuevo lo pasaron en un pueblo cercano al lago, donde se habían aglomerado muchas personas para pasar la noche en el centro del pueblo, muchos llevaban bengalas y un niño como de ocho años se acerco a Teddy a regalarle una bengala mucho más grande que él, Remus iba a agradecerle cuando reconoció al niño.

-¿John? -Remus veía al niño que sonreía asintiendo.

Tonks conocía a ese niño, sabía que su madre era Sofía, la ex de Remus y eso no era algo que le agradara mucho, buscaba con la mirada a la chica cuando noto que alguien la miraba fijamente.

-¿Nym? Que sorpresa -un auror de nombre Sam la veía sorprendido mientras caminaba a ella.

Remus escucho esa voz, de verdad no le agradaba en lo más mínimo ese tipo. Para Andrómeda todo pasó en cuestión de cinco minutos, ella tomaba a Teddy entre sus brazos, el primero en acercarse fue Sam, ella lo conocía, hace un par de años estaba loco por Tonks, era un chico alto, no tanto como Remus, pero se veía un poco más imponente, era muy atlético y tenía unos ojos azules extremadamente claros. El niño seguía hablando con Teddy cuando su madre se acercó, Andrómeda también la conocía, había visto a esa chica un par de veces en su casa cuando los chicos estaban en la escuela y la iban a visitar, era rubia y hermosa, sacada de las revistas. 

Los cuatro se vieron frente a frente, Sofía estaba a lado de Remus y Sam a un lado de Tonks, era como si un universo paralelo se mostrará entre ellos. Remus fue el primero en hablar.

-Amor - dijo tomando la mano de Tonks atrayendola hacía él-. ¿Recuerdas a Sofía? 

-Imposible olvidarla -Tonks se veía alarmantemente tranquila-. ¿Supiste que nos casamos? -dijo mostrando su alianza.

-Samuel, hace mucho que no te veía, ¿escuchaste?, nos casamos -dijo Remus estrechando la mano de Sam de manera firme.

Andrómeda sabía que las cosas no podrían salir bien.

-Chicos, la mesa que reservamos, si no nos vamos la vamos a perder.

Las miradas molestas cesaron y se despidieron un tanto hipocritamente, se desearon un feliz año nuevo y tomaron rutas diferentes.


Ninguno había tocado el tema. El conteo regresivo había comenzado.

-Tres, dos, uno... ¡FELIZ AÑO NUEVO! -los cuatro se abrazaron, le dieron un beso al mismo tiempo a Teddy en cada cachete y la punta de su cabeza.

El 2001 había comenzado, se sentaron en una mesa al aire libre, repasando todo lo que había pasado al rededor del año, los nuevos puestos, la nueva casa, Victorie, sin duda había sido un muy buen año.

-Queridos -dijo Andrómeda-. ¿Les molesta si Teddy y yo nos adelantamos? 

-Los acompañamos, sirve que tomamos nuestras chamarras, el frío es más de lo que creí.

Caminaron unos pocos metros antes de que Teddy se sentará a mitad de calle.

-Estoy tan cansado que me rompí los tobillos -dijo Teddy desde el suelo.

Luna de colores: FamiliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora