Without Light

Nuevo amigo.

-Lo que hizo se llama intento de homicidio- Mencionó mientras sacaba un cigarrillo.

-Puede quedarse unos años en la cárcel-Miró al oficial y siguió- Después de la visita con el chico las cosas se van a dificultar por la señora- Suspiró.

-Solo digan que estoy desaparecido- Alzó los brazos y sonrió de lado. La maldad era lo que sus ojos demostraban en ese momento- Simplemente podemos hacer que parezca un accidente- Quitó el cigarrillo de las manos del oficial para después meterlo a la boca.

-¿Planeas matar al chico?- Mencionó uno de ellos.

-Es lo que se merece- Comenzó a reír tan fuerte que ambos policías sintieron su cuerpo helar.

-¿No crees que ya es suficiente? lo has torturado por años- Mencionó pero después recordó que sus comentarios debían ser ignorados por su boca, sin embargo, eso fue muy tarde puesto que sintió su cuello ser apretado por una fuerza inimaginable.

-Repite lo que dijiste- Apretó aún más- Anda- Sonrió.

El policía que estaba siendo levantado del suelo mientras su cuello era presionado y su vista comenzaba a fallar solo logró negar levemente con su cabeza y sostener un poco más la pared como si esto le diera un poco más de confianza en esa situación.

-Yo sé lo que hago y ustedes dos están bajo mi mando, no olvides que perdone la traición de tu hijo- Miró de reojo aquel cuerpo que se estaba recuperando en el suelo- Necesito que sigan haciendo su obra, yo me ocuparé del chico que está internado y ustedes van a tener que encargarse de los testigos ¿ok?- Preguntó pero no recibió ninguna respuesta, por lo tanto, se dio la vuelta y aventó la silla hacía la puerta- ¿OK?- Aumentó el tono de su voz, provocando que ambos oficiales respondieron un ligero "sí".

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-¿Quieres que te compremos algo?- Mencionó Yibo mientras se levantaba de su asiento.

-No, no te preocupes- Dijo Xiao- Vayan con cuidado.

-No nos tardaremos mucho Xiao- Gritó Wang en la puerta- Vamos Yibo!!

Al escuchar aquel gritó, Yibo hizo una mueca de discusión- Ahorita nos vemos- Dijo Yibo mientras acariciaba la mejilla del contrario, depositando un beso en sus labios hasta que estos se cansaran de mantenerse pegados por aquel beso- Te quiero- Depositó un beso más y salió por la puerta.

Xiao sabía que iban a tardar unas cuantas horas en regresar, por lo tanto, decidió buscar un libro en la biblioteca de aquel hospital, mientras caminaba por los estantes y tocaba con sus dedos las pastas de estos libros, no había uno solo de su interés- ¿Qué buscas?- Dijo un chico que tenía la misma vestimenta que él.

-Un libro- Respondió automáticamente.

-Eso lo puedo notar- Soltó una ligera risa- ¿Libro de qué estás buscando?

Al darse cuenta de lo obvio que se escuchó en su respuesta comenzó a reír- En realidad cualquiera que me llame la atención pero todos estos se ven demasiado aburridos- Hizo una mueca.

-Estás en la sección de medicina ¿cómo no te aburriría eso? - Rodó los ojos.

-¿Cómo sabes que no tengo especialidad en medicina?- Dijo Xiao algo sarcástico para lograr evadir su distracción sobre las áreas.

El chico se acercó a Xiao y tomó ambas manos- ¿Ves esto?- Levantó aquellas manos hacía el rostro de Xiao- Estás manos tienen ciertas marcas en las huellas dactilares, lo más seguro es que practiques un instrumento de cuerdas, practiques fotografía o incluso diseño- Mencionó el chico muy seguro de su comentario- Tal vez te agrade un libro que leí hace unos días, ven- Se dio la vuelta y comenzó a caminar dentro de más estantes que estaban repletos de libros.

-¿Días?- Preguntó Xiao.

-Cuando llevas muchos años dentro de 4 paredes, cualquier cosa puede distraerte, y la lectura fue lo que llamó mi atención a tal grado de leer 2 libros por semana- Tomó un libro de un estante alto y le sonrió a Xiao- Este libro puede interesarte, cuenta la historia de una chica que fotografiaba el cielo y su razón de ello era porque creía que dentro de este mundo solo había una cosa pura y era el cielo.

-¿El cielo?- Volvió a preguntar Xiao.

-Amas hacer preguntas ¿no es así?- Volvió a reír.

-Sonará algo tonto pero el libro te dará a conocer porque ella pensaba así pero en realidad se puede decir que ella decía que era puro porque demostraba las emociones que ella sentía, cuando estaba sola, el cielo lo demostraba con lluvia, cuando pasaba algo alegre, los atardeceres se tornaban color naranja.

-¿Eso no es normal?- Dijo Xiao- Es decir, así es el código del cielo, cambiar de colores.

-Lo es, pero cuando estás roto buscas una manera de sentirte entendido por alguien- Bajo la mirada- O incluso algo ¿no es así?

Ante aquellas palabras Xiao entendió a la perfección lo que este chico quiso decir, tal vez la autora estaba tan rota que buscó los pequeños detalles del mundo para poder sentir más comprensión en su corazón- Gracias, lo leeré- Respondió Xiao con una sonrisa.

-¿Por qué estás aquí?- Dijo el niño que caminaba a su lado.

-Mh- Dudo en decirle- ¿Un accidente?.

-Te apuñalaron- Dijo el niño.

-Espera- Se detuvo Xiao- ¿Cómo lo sabes?- No entendía porque aquel niño sabía eso, nunca había salido de la habitación puesto que Yibo y Wang siempre fueron quienes le acercaban las cosas, era raro que lo dejaran siquiera levantarse, entonces era imposible que aquel joven lo haya visto en un momento.

-Vi cuando llegaste- Dijo el niño sin perder de vista los ojos de Xiao- Venía un joven delgado contigo, y uno más corto de estatura, te recibió la doctora Wang- Sonrió el niño- Conozco a todos los de este hospital, nuevos y ancianos, puedo contarte incluso los secretos de ese señor- Señaló a un adulto que iba caminando hacía los lados- ¿Sabías que ese señor golpea a su esposa? ya ha estado aquí 4 veces internada y esa chica- Señaló a una joven que era muy delgada, de tez pálida y cabello largo- Esa chica padece de leucemia desde hace ya varios años, está en tratamiento pero no han visto mejora en ella, es posible que ella mu-No pudo terminar de hablar puesto que Xiao tapó su boca.

-Ok, ya entendí que sabes todo sobre los pacientes de este hospital pero guarda esa boca, no creo que a la gente le guste saber si morirá por una enfermedad, golpeada o por otra cosa- Dirigió al niño al pasillo que dirigía a la sala de pacientes.

-¿Por qué no?- Preguntó el niño.

-No es correcto.

-¿No es correcto saber que yo moriré por cáncer? -Dijo el niño con un tono de inocencia.

Xiao no sabía que decir, no sabía si debía abrazarlo o pasar a otro tema, sin embargo, no contaba con que el niño seguiría hablando- Cuando cumplí 9 años me diagnosticaron con cáncer, estuve en tratamiento pero nunca surgió efecto en mí- Bajó la mirada- Ahora tengo 16 años y nada ha cambiado.

-Te mejorarás- Sonrió Xiao.

-No lo haré- Limpió unas lágrimas que recién había caído de sus ojos, al abrirlos de nuevo notó que tenía un dedo meñique levantado hacía él- Lo prometo.

Asustado volteó a ver hacía el rostro de Xiao y levantó su meñique en forma de promesa-Yo seré tu amigo y te ayudaré a mejorar- Al escuchar aquellas palabras sintió su corazón detenerse por un momento, hace mucho tiempo él sentía la lastima de las personas hacia él, sentía la pena y como todos lo veían como un desafortunado pero ese chico que le estaba sonriendo mientras apretaban sus meñiques le demostró confianza hacia el futuro que le deparaba, amabilidad e incluso alegría.