Ya estamos acabando de cenar, hoy fue un día largo. Matthew de nuevo vuelve a estar más cercano conmigo.
-Chicos nos vamos a la playa el martes, en mi avión, como siempre. Vamos a estar hasta el lunes, nos iremos después de comer. Cualquier cosa me decís, voy a crear un grupo. -Todos asentimos y terminamos nuestro helado.
Emily también comió helado por así decirlo y está manchada por todos los lados posibles.Todos la miran y se ríen, que bonitos se ven los niños con su inocencia.
-Bueno pareja, nosotros nos vamos a casa. El martes nos vemos. -Todos me dieron dos besos y se fueron a casa. Me han caido muy bien la verdad.
Me alegro de que Matthew tengo unos amigos así.
-Matthew voy a limpiar a esta cosita y a acostarla. -Se levanta y viene detrás de mí.
Nada más llegar a la habitación la tumbo en el cambiador y le quito toda la ropa y el pañal.
-Pasame las toallitas que ya la limpio y cambio. -Asiento y le paso todo lo necesario.
Después de diez minutos Emily está lista para dormir. La tumba en su cunita y la remueve. Mientras tanto yo me siento en la silla de la esquina. Miro el reloj y veo que son las diez menos cuarto... estoy muy nerviosa, no se si quiero ir...
-Ya está dormida vamos. -Me tiende la mano y yo la acepto. Los dos bajamos al salón y nos sentamos en el sofá.
-Matthew, yo en cinco minutos me voy ya. -Él me mira sorprendido, pero no le voy a contar a dónde voy, qué vergüenza.
-De acuerdo pues te llevo yo. -Mierda, y ahora qué le digo...
-No tranquilo prefiero irme dando un paseo yo sola. -Me mira algo extraño pero acaba aceptando.
-Bueno Katheryn gracias por tratar de comprenderme y no juzgarme. Intento sobrellevarlo lo mejor que puedo pero hay momentos que me matan... Mañana nos vemos que descanses. -Yo asiento y con un gesto de mano me despido.
Salgo y me dirijo hacia el parque. De los nervios que tengo casi me llevo por delante una farola.
Después de cuarto de hora al fin llego al parque, pero Sergio no está. Mientras llega decido sentarme en el banco.
Tal vez se haya arrepentido o solo quería vacilarme... Tengo ahora mismo muchos pensamientos negativos, no se que va a pasar.
Después de unos minutos alguien tapa mis ojos, ya está aquí.
-Hola, pensé que ya no vendrías. -Él se ríe y se sienta a mi lado. Ahora le veo más guapo que antes, serán mis hormonas que se han revolucionado.
-No soy tan malo, perdona, es que se me olvidaba esto. -Saca por fin lo que tenía escondido, ¡Unos bombones!
-Ala, que bonito detalle. -Los dos reímos y empezamos a comer. Mi bombón favorito es el de chocolate blanco por fuera y una almendra por dentro. -¿Qué tal tu sobrinito?
-Pues estos días está en la piscina, hace demasiado calor. Ayer por ejemplo iba corriendo y se cayó con lo cual tiene un moratón en el ojo...
-Aiba pobrecillo, dale recuerdos de mi parte. -Seguimos comiendo los bombones, como si no hubiese un mañana. Me da vergüenza mirarle. Tengo mi mirada clavada en el suelo y muevo las piernas de los nervios...
-Katheryn puedes mirarme, no me he comido a nadie. -Yo me río y tapo mi cara con las manos. Sergio deja los bombones al otro lado del banco y se acerca a mi.
Me atrae hacia él y pasa un brazo por detrás de mi hombro. Creo que los nervios pueden conmigo...
-Mañana, podríamos volver a quedar si te parece bien. -Me giro y me quedo analizando cada fracción de su cara.
-Por supuesto, pero tiene que ser a esta hora, que es cuando estoy libre. -Él asiente y los dos nos quedamos en silencio. Es un silencio cómodo.
Empieza a acariciar mi brazo y eso produce unas pequeñas corrientes eléctricas en mi. Sigo sin mirarle, seré tonta pero la vergüenza puede conmigo.
-Sergio, ¿Vamos dando un paseo hasta mi casa? -Él asiente y los dos nos levantamos a la vez.
-¿Cúal es tu comida favorita? -Bueno pues ahora jugaremos al jueguecito de pregunta y respuesta.
-Me encanta la pizza. ¿A ti? -él se rie de mi y yo golpeo su hombro, maldito niño, jajajaja.
-La mía también. No me imagino un mundo sin pizza. -Los dos nos reímos, gracias a esta chorrada he perdido un poco la vergüenza.
Todo el camino a casa ha sido con preguntas y respuestas, Sergio siempre decía alguna tontería para suavizar el ambiente. Me cae muy bien.
Ya hemos llegado a la puerta de mi casa, es tarde, mañana me va a costar madrugar pero ha merecido la pena.
-Bueno Katheryn, estas sana y salva. Mañana nos vemos, me ha gustado estar a tu lado esta noche, hasta mañana. Que descanses guapa. -Me dio un abrazo y luego un beso en la mejilla cerca de a comisura de mis labios. Inconscientemente muerdo mi labio y entro corriendo en casa.
Mis padres claramente están dormidos, así que voy despacio hacia mi habitación. No puedo quitarme esta sonrisa de boba...
POV Matthew
Escucho la puerta abrirse así que deduzco que Katheryn ya está aquí. Cojo a mi princesita en brazos y bajamos a verla.
-Buenos días, ya estoy aquí. -Me río, me hace gracia que me diga que ya está aquí cuando la estoy viendo.
-Buenos días, hoy no vengo a comer, nos vemos a la hora de cenar. Más tarde te llamaré. Que os lo paséis bien. -Le doy un beso a mi hija y me voy al trabajo. Hoy tengo una reunión importante y luego hemos quedado para comer.
Esta mañana notaba como que Katheryn estaba muy contenta, se habrá levantado de buen humor. Me rio por la tontería que acabo de pensar y me subo al coche.
Después de cuarto de hora llego a la empresa. Tengo que dejar todo listo para cuando nos vayamos de vacaciones.
-Buenos días Yaiza, dile a Silvana que venga a mi oficina. -Me dirijo a la oficina, tengo que firmar varios documentos.
-Buenos días señor Matthew, ¿Que necesita? -Se sienta enfrente de mi mientras me mira con deseo, esta chica si está aquí es porque es amiga de la chica de la limpieza pero ya me cansa.
-Silvana prepara todo para la reunión y asegúrate de tener el restaurante reservado. Después tráeme la carpeta azul del año pasado. -Se va y empiezo a firmar todo, hoy me toca un día muy largo.
POV Katheryn
Ya estamos llegando al parque le escribí a Sergio para que venga con su sobrino.
-Emily, las cosas del suelo no se cogen, no. -Ella me mira pero no me entiende porque sigue haciendo lo mismo.
Voy detrás de ella diciéndole que no lo haga pero ella se ríe, me toma el pelo. Cuando la dejo en el columpio, alguien me abraza por la cintura y besa mi mejilla.
Me giro y ahí está él... Me mira con una sonrisa a lo que yo hago lo mismo. Nuestras miradas se quedan clavadas una en la otra y ninguno dice nada. Parece que se para el mundo, que sensación más extraña.
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¿Quién dijo que un viudo no podría volver a enamorarse?
Romance-¡Camila! Mi amor, contéstame, mira aquí esta nuestra pequeña Emily. -Miro a Emily, es igualita a su mamá -No puede ser... Cami nuestra vida solo acaba de comenzar, no te puedes ir tan pronto. Me niego a dejarte ir, te amo con locura. Dejo a Emily...