«Vivir el amor dos veces» [YoonNam]

|Capítulo 6|

No sabía cómo reaccionar, ya no se porque mi cuerpo temblaba, sus labios estaban fríos al igual que los míos, sentía mi cabeza dar vueltas y una sensación de calidez recorrer mi cuerpo.

Mi profesor me estaba besando y a mí no me molestó en lo absoluto. Yo también deseaba esto.

— Eres sumamente precioso, Namjoon -con voz ronda dijo aquello, apenas separándose de mis labios-

Me sonroje hasta las orejas, me encantaba cuando las personas hablaban de mi belleza, pero Min Yoongi era a parte, él movía mi mundo de pies a cabeza.

Sus labios volvieron a unirse a los míos y necesitado de más contacto lleve mis manos hasta su camisa, halandolo más cerca de mí, de nuevo sentí esa sensación al tener su lengua recorriendo cada parte de mi interior, llenandome de su sabor a menta.

Asustado comprendí lo que estábamos haciendo al sentir su mano subir debajo de mi camisa mojada. Rompí el beso al dejar salir un gemido cuando sus fríos y perfectos dedos rozaron mis pezones.

¿Acaso pensaba llegar más lejos con mi profesor?. Nunca nadie me había tocado como él ahora, ni siquiera dejé que Jungkook, que era mi novio, lo hiciera.

Mi cuerpo se derretía bajo sus caricias, mi mente me gritaba que esto estaba mal, pero mi cuerpo deseaba más de esos fríos toques.

Un, dos, tres, al cuarto sonido de su celular, mi profesor se alejó contestando con rapidez.

— Lo siento, la farmacia estaba cerrada, tuve que ir a una más lejana

Tratando de tranquilizar mi respiración, escuchaba las respuestas que mi profesor daba, estaba mintiendo, lo sabía, seguramente era su esposa. En ese momento me sentí tan miserable.

Cuando cortó la llamada, ambos nos quedamos en silencio; mi temblor regresó y comencé a estornudar.

— Te llevaré a tu casa -fue lo primero que dijo y arrancó a gran velocidad-

No me atreví a decir nada, mi corazón latía desenfrenado recordando lo reciente, pero me dolía al saber que Yoongi era casado, que en casa lo esperaba una buena mujer.

Al ver que llegamos a mi casa, lo observé de reojo dispuesto a hablar sobre lo sucedido. — Profesor...

— No digas nada, Namjoon -me cortó antes de que pudiera decir algo más-

— Pero, yo... -no terminé al ver sus penetrantes ojos clavados en mí-

Él negó con la cabeza. — Solo no digas nada

Bajé del auto y él arrancó sin darme la oportunidad de agradecerle o despedirme. Entré con rapidez a mi casa, ignorando el llamado de mi madre y hermano, para poder encerrarme en mi habitación.

Después de ponerme ropa seca, me tiré en mi cama observando el techo. Mis labios hormigueaban, aún podía sentir sus labios sobre los míos y el toque de sus manos.

"Creo que me gusta más de lo que imaginé"

Avergonzado por mi reciente pensamiento, jale una almohada abrazándola y me quedé profundamente dormido.

•°•°•°•°•

Sonreía por inercia, mis amigos contaban sus anécdotas, pero mi mente estaba en otro lugar, no había visto al profesor Min desde que llegué a la escuela.

— ¿Tú qué hiciste el fin de semana, Joonie? -Mina me pregunta y los demás dirigen su mirada hacia mí-

— Nada, solo fui a visitar a mi padre al hospital -digo evitando sus miradas, no puedo decirles: "Me besé con el profesor Min y besa tan bien"-

Ellos siguen hablando y todo a mi alrededor ha desaparecido, mi vista se clava en una sola persona que está en la cafetería de la escuela. Por inercia mi cuerpo se mueve hasta llegar junto a él.

Carraspeó la garganta. —Hola, profesor

Tal vez no hablé muy fuerte, porque ni siquiera volteas a verme, por un momento me siento estúpido. — ¿Se volvió mudo?

— ¿Necesitas saber algo sobre la materia? -con un tono de voz demandante me contestas- De no ser así no puedo ayudarte en nada más

Siento mi mandíbula tensarse, ¿Me besa y luego me trata como cualquier cosa? Yo soy Kim Namjoon, no cualquiera.

Antes de decir unas cuantas groserías me detengo, sería muy mal para mí el contestarle de esa manera a un profesor. Me doy la vuelta y vuelvo a la mesa con mis amigos.

— El profesor Min es un idiota -suelto con molestia el comentario-

— ¡Vaya! Nunca pensé escucharlo de ti -Taehyung palmea mi espalda con una risita-

Veo a Jisoo sonreír. — Todos sabemos eso, ¿Fue grosero contigo?

— Seguramente, hasta el más respetuoso como Joonie diría esto si se topa con alguien como el profesor Min -dice Mina y todos carcajean-

Me es inevitable no reírme, de cierta manera Min es el profesor más catalogado por ser "amargado", pero yo he conocido su lado amable, también nos besamos apasionadamente, alguien así no puede ser un amargado.

— Nam, ¿Puedo hablar contigo? -la voz de cierto pelinegro me hace volver a la realidad-

Giro, encontrándome con los profundos ojos color café de mi ex novio. — ¿Qué sucede, Jungkook?

— ¿Podemos hablar... A solas? -vuelve a preguntar sin mirar a mis amigos-

Ellos abuchean y dicen cosas sin sentido, yo solamente sigo a Jungkook hasta los pasillos, cuando se detiene yo también lo hago.

— Te extraño -dice antes de estrellar sus labios sobre los míos-

Me alejo de inmediato, llevando mi mano hasta mis labios. Aturdido por el beso levanto la mirada, topandome con los penetrantes ojos de mi profesor.

¿Acaso vio todo?