Daddy es como un osito.
Sus brazos son fuertes y cálidos,siempre que me abraza puedo sentir su calor en mi cuerpo y la fuerza que ejerce sobre mi.
Sus manos también son cálidas y muy suaves.
Siempre que roza mi piel me hace sentir un gran alivio y una inmensa calma.
- Daddy es tan.. Increíble.. - Dije en un susurro y con las mejillas sonrojadas.
- ¿Que haz dicho? - Me pregunto el. Ambos estábamos acostados en su cama mientas qué el me abrazaba.
- Nada daddy.. No te preocupes - Le respondí con una sonrisa y acaricie su blanca mejilla.
Oh Daddy.. Eres realmente cálido..
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𝑶𝒉 𝑫𝒂𝒅𝒅𝒚
RomanceSolo un intento de historia romántica heterosexual entre dos personas con una gran diferencia de edad.