¿Te casarías conmigo?

3.8K 227 44
                                    

Un rubio de ojos azules se encontraba en un estado de nerviosismo que absolutamente nadie podía quitarle para ese punto, Sasuke que se encontraba en la habitación del rubio hiperactivo, sonreía de medio lado arrogante y se burlaba de su amigo, totalmente divertido por esta situación.

—¡Maldito teme! ¡Deja de reírte!— exclama el rubio señalandolo con el dedo índice con un rostro llenó de enojó.

—jump, usuratonkachi—

El rubio iba a volver a gritarle a su mejor amigo de nuevo por ser tan insensible pero de repente la puerta de su habitación se abre de golpe, siento tumbada por Sakura con una vena sobre saliendo de su sien.

—¡Naruto!— exclama Sakura acercándose a él y un miedoso Naruto se esconde tras de Sasuke.

—Ay ¿Ahora que hice? Sa-sakura-chan— la pelirrosa se le queda mirando con un tic en su ojo derecho, calmandose y recordándose que tiene que tener paciencia con su compañero rubio.

—faltan cinco minutos para que Hinata llegué al lugar indicado, y tú ¿Sigues aquí parado?— el rubio se quedó parado mientras parpadeaba repetidas veces, el pánico comienza a apoderarse de él.

—TENGO QUE IRME, ADIÓS SAKURA-CHAN, SASUKE-TEME— sale corriendo de su habitación dejando a la pareja allí parada, para luego salir de su casa, mientras se insultaba por ser tan tonto y no mirar la hora.

Se encontraba tan nervioso que el tiempo se le había pasado. Sus manos sudaban y se sentía tan acobardado, pero se dió fuerza a si mismo, ha podido con enemigos terribles que han amenazado la aldea y hasta el mundo, él podía con esto, claro que sí. Se decía mentalmente para calmar sus nervios.

Llega al lugar acordado, un hermoso lugar a las afueras de la aldea, en el bosque, donde se encuentra una cascada y un pequeño río, un lugar perfecto para esa ocasión tan especial. Agradeció el haber llegado el primero, tenía que estar aquí cuando su novia llegará y vea la decoración que había hecho con ayuda de Sakura e Ino.

Una mesa cuadrada con un mantel blanco, las dos sillas que se encontraban allí estaban decorados con listones blancos, habían unas velas que alumbraban el lugar, aunque las luciérnagas también ayudaban, haciéndolo recordar cuando se confesó a ella y sacándole una sonrisa. Había una botella de sake en la mesa, dos copas y tenedores acomodados de manera perfectas. Todo lucía genial y cruzaba los dedos para que a su novia le gustará.

Rápidamente, toma entre sus manos los girasoles que había comprado en la floristería de Ino.

Allí la ve llegar, tan perfecta y hermosa como siempre, tenía puesto un vestido al estilo verano de color azul cielo, su cabello largo y azulado caía por su espalda, peinado de manera perfecta, su rostro con un sonrojo en sus mejillas totalmente natural y sus ojitos perla brillando al encontrarse fascinada por lo que estaba bien, llevando sus manos a su boca sorprendida de aquella sorpresa que le tenía su amado.

—Hinata— logra soltar el rubio, hipnotizado por la belleza de su novia, y repitiendose una y otra vez lo idiota que fué. —Te vez...hermosa— la pequeña Hyūga comienza a jugar con sus dedos nerviosa, tenía una sonrisa en sus labios.

—Naruto-kun, t-tu ta-tambien te ves bi-bien— suelta sin evitar tartamudear, él rubio sonríe grandemente ante ello. El llevaba un pantalón de color naranja y una camisa de color negro, su distintivo corto cabello y está vez no llevaba puesta su banda ninja.

—Hinata-chan, te traje esto— le extendió el ramo de girasoles y la chica no pudo evitar saltar sobre él, dándole un fuerte abrazo, el rubio se descolocó ante su acción pero rápidamente le correspondió aquel abrazo con una gran sonrisa.

One Shots || NaruhinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora