Basado en Hechos Reales ~Itachi o Shisui~

Prólogo

______ Nara, si bien, no era una hija de sangre de Shikaku, había sido adoptada hacía mucho tiempo, nunca fue tratada de una manera diferente con nadie, era simplemente un miembro más de la familia, sin embargo, Shikaku se había encargado muy bien de entrenar su cerebro para lo que quisiera hacer, ella no tenía interés en explotar sus habilidades, quería ocupar su cerebro en otras cosas.

Cuando tenía quince años comenzó a escribir su primera novela juvenil, Shikaku y su madre estaban realmente muy orgullosos de ella, el libro fue un éxito entre las chicas jóvenes, ya que, además, traía ilustraciones de los personajes y algunas escenas, echas por ella misma. Su "carrera" de escritora siguió a medida que pasaban los años, la chica, con las ganancias, ya tenía un estudio en la ciudad en donde podía trabajar en paz, ya que necesitaba concentrarse.

Pero el gran problema, fue después de haber sacado ya dos libros, tenía diecisiete años, la demanda era grande, y las ideas eran pocas ¿qué iba a hacer ella? Realmente no quería decepcionar a nadie, quería escribir para hacer felices a los demás, para ser feliz ella misma, era lo que quería hace, pero ¿sobre qué?

-Ah, maldición. – dijo ella lanzando una hoja al papelero, que ya estaba un poco rebalsado de repollos de papel, la puerta corredera se abrió y ella soltó un suspiro. – Estoy ocupada, hentai danna.

-Deja de llamarme así. – dijo Jiraiya con una media sonrisa, se sentó frente a ella en la mesa mientras ella jugaba con el lápiz grafito en su amarillenta hoja vacía. - ¿Aún nada?

-Es muy complicado. – dijo la chica mirándolo y dando un golpe en la mesa. – Siempre es igual, el protagonista es un príncipe, la chica una estúpida y felices por siempre; ambos son de aldeas distintas que están en guerra, amor imposible; polos opuestos se atraen, ese siempre es el tema de todas las novelas románticas.

-Pero es lo que está de moda.

-Pero no quiero seguir la moda, quiero imponer moda ¿entiendes? – dijo ella haciendo sonreír al hombre del cabello blanco. – No quiero algo cotidiano, no quiero que los padres se opongan, quizás ni siquiera necesite dos protagonistas que sean pareja, quizás puedo habar de experiencias amorosas del protagonista.

-¿De dónde las sacarás? – dijo el hombre sonriendo burlesco. – Jamás has tenido novio.

-Ya pensaré en algo. – dijo la chica levantándose y miró el amanecer a través de su ventana, tomó su mochila y se cambió de ropa en el baño, salió de allí, el hombre de cabello blanco ya se había retirado, tomó su bolso de la escuela, se peinó y salió del estudio. – Tengo que tener un tema esta semana, sin falta.