🥀ꦿ ۫։ຼ ❝Hanahaki Disease❞ Rickorty

⨟༘🌻𖡄 ❝Jessica❞

Morty llegó con Summer al colegio, despidiéndose en la entrada del mismo. Cada uno se fue a sus casilleros para dejar sus cosas. Tenían algo de tiempo antes de que las clase empezaran.

El castaño tenía la sensación de que ese día, Rick no iría a buscarlo. Se comportó extraño en el desayuno. ¿Pétalos saliendo de su boca? La excusa que dio no fue propia de tal mente, no se tragó su mentira. Arrugó la cara mientras escuchaba sus balbuceos.

Algo sucedía y no iban a decírselo. ¡Odiaba ser excluido! Su abuelo era un cabeza hueca que no solía pedir ayuda por su arrogancia. No le sorprendería llegar y descubrirlo metido en líos.

Puso la combinación de su casillero y empezó a guardar los libros que había dejado en su mochila. La foto de Jessica que estaba ahí pegada lo saludó, él también, con una sonrisa boba.

Bueno, quizás el no ser molestado por un día le daría una oportunidad con la pelirroja...

Cerró la puertita, volviendo a colgarse su mochila y empezó a caminar por el pasillo en dirección al salón, sintiendo algo de confianza mientras empezaba a pensar en la chica. Se sonrojaba mientras lo hacía.

La vio hablando con sus amigas de siempre, sonreía y sus blancas mejillas estaban más rosas. Seguro se echó algo de rubor, pensó Morty. Se seguía viendo hermosa.

Continuó su caminata, con la mente algo ida por ella. Olvidó qué era lo que estaba pensando antes.

Estaba tan distraído que no notó los pequeños girasoles que de a poco empezaban a crecer en sus tobillos. Unos se caían mientras caminaba, y otros se quedaron aferrados en el borde de sus pantalones. No se dio cuenta de nada.

Los que seguían en el pasillo terminaron pisándolas, matando su corta belleza. Nacieron y murieron.

Entró al salón y se sentó en su lugar, acomodándose. No era el primero en llegar, pero no sabía de qué hablar con los demás, así que empezó a tapear la mesa para distraerse. Empezaba a sentir ganas de que Rick apareciese y se lo llevase.

—Nos vemos en el almuerzo. —Esa voz tan dulce y femenina sonó. Era Jessica entrando.

Se erguió en su mesa y fingió estar escribiendo algo en su cuaderno. Vio de reojo que ella llevaba un girasol en el cabello. ¿De dónde lo había sacado? Hace rato no lo tenía.

—Te queda bien —pensó en voz alta, se quiso morir—. ¡La-la flor! —Movió sus manos con nerviosismo.

La chica fijó su atención en él. Esbozó una sonrisa, escondiendo un mechon de cabello detrás de su oreja. Estaba esperando ese tipo de cumplidos.

—Gracias, es muy bonita. Alguien la dejó caer, estaba tirada en el suelo junto con otras que ya estaban pisoteadas. —Se la quitó y la enseñó más de cerca al castaño. Tenía pétalos muy amarillos, y un estambre café. Su tamaño era adorable, una flor enana.

—Y la rescataste.

—¡Así es! Casi la piso.

Mientras hablaban, más compañeros se sumaban al curso, algunos extrañados porque había un camino de pétalos amarillos aplastados hasta ahí.

—No son mis favoritas pero, me pregunto quién trajo flores a la escuela. Quiero saber si las cultivó él mismo. —Puso las manos en su cadera, estaba curiosa.

Morty estaba realmente ilusionado; ¡esta era una verdadera charla! En serio no se daba cuenta de que la flor en la palma de la chica salió de su propio cuerpo. Habían más creciendo ahí debajo, y no podía sentirlo.

—Tal vez son parte de un regalo. ¿Una declaración, quizás? —supuso.

—Pues qué pena que se le hayan caído, ¡pobre! —Se rió, imaginando la cara del desafortunado.

—Parece que no era muy inteligente. Pobre de la chica —también se sumó al chiste.

Pero tuvieron que cortar la charla ya que el profesor llegó, bebiendo una taza de café. De nuevo estos hormonales, pensó viendo a cada uno de ellos.

Todos los que estaban de pie tomaron asiento.

—Ay, debo irme —anunció ella, yendo a su pupitre con prisa. Se llevó la flor.

Morty no alcanzó a despedirse, porque estaba hechizado, de amor.

Los girasoles dejaron de crecerle cuando el profesor empezó a hablar.

Pobre Rick 😔