⨟༘🌻𖡄 ❝Something in you❞

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Beth peinaba su cabello con un cepillo frente al espejo del baño. Tarareaba una canción popular de la radio, sintiéndose extrañamente feliz con la mañana. Tenía el presentimiento de que sería un buen día.

Y debajo, en el garaje, su padre se terminaba el jugo de naranja que robó del refrigerador. Estaba algo molesto con su "ligero" asuntillo.

Cansado, se sentó y apoyó los codos sobre la mesa, tomándose la cabeza por la incertidumbre. Gruñía en voz baja, preguntándose qué hacer.
Tiró la caja de cartón al suelo, sabiendo que hasta ese envase tenía un mejor destino. Al menos era seguro que iría a la basura, pero Rick no tenía puta idea de a dónde se dirigía su trasero en ese momento.

Vomitar pétalos le dolía cada vez más. La garganta se le desgarraba como si cuchillas quisieran atravesarla todas a la vez. Empezaban a salir gotas de sangre con ellos, y temía que aumentaran las cantidades. Veía sus manos con miedo, incrédulo ante la idea de morir por culpa de tan cálidas emociones. ¡Se veía como un imbécil de secundaria acechando a una porrista!
Con rabia, pisó y aplastó el cajón vacío de jugo hasta que quedó plano bajo su pie. Tal vez era hora de retomar "El proyecto Fénix", para sembrarse un repuesto de su cuerpo y recuerdos.

Pero, ¿qué le garantizaba que esa enfermedad no regresaría a perseguirlo como boomerang, orillándolo a un final donde Morty lo acepta finalmente? Sería feliz si su primer intento resultase exitoso. Sin embargo, sabía muy bien a quién le pertenecía el corazón de su nieto.

Cómo envidiaba a Jessica...

Todavía palpaba sus labios, anhelando regresar a pegarlos con él. Se sintió tan bien y tan incorrecto que no podía fijar una emoción para resumir la experiencia.
Un cosquilleo en todos lados lo pellizcaba al recordarlo, y se culpaba por haberlo desnudado con la mirada cuando fue a dejarlo en su cama tras la escena.

El fracaso con su pócima le dejó claro que la mierda que lo curaría sería el amor sincero de Morty. Necesitaba ser correspondido, recién lo entendía. Se sintió estúpido de haber creído que engañaría a una enfermedad que acabó con cientos de rechazados que no pudieron enamorar a sus objetivos. No quería imaginarse la humillación de pasar a formar parte de ellos. El color de hormiga se le subía hasta las orejas por la pena, y eso que era bueno escondiendo bochornos.

Alguien abrió la puerta, llamándole.

—Rick. —Era él, el protagonista de sus sueños.

Se erguió sobre la silla, fingiendo recién haber despertado.

—¿Qué? —El tono fue soso a pesar de estar emocionado de verlo.

—¿Qué es esto de las flores? ¿Es algo tuyo? —Dio unos pasos más dentro del garaje. No tenía memorias de lo que Rick estaba rememorando en ese momento.

—¿Flores? —Se hizo el tonto, pero estaba temblando. ¿Se había enterado? Lo menos que quería era ganarse el desprecio de Morty...

Su mano estaba cerrada y la abrió para explicarle a Rick de lo que hablaba: Una mezcla de margaritas y girasoles, aplastadas, se desveló.
Al mayor se le fue el aliento.

—Esto estaba en mi almohada cuando desperté. Y vi lo que pasó ayer en el desayuno. ¿En qué estás metido ahora? —Estaba serio, y leía la mirada de su abuelo, el que se quedó callado más de lo que debió.

Tenía preguntas. No entendía. Hilaba en su cabeza una excusa mientras trataba de razonar porqué Morty sostenía flores bajo una expresión algo molesta.

—No lo sé —nomas dijo, alzando los hombros. Era tarde para actuar como borracho desorientado.

—Estás ocultando algo. —Se acercó y volvió a guardar esas flores. La firmeza en sus palabras le hacía tiritar el pulso a Rick; le encantaba.

—No, te equivocas —intentaba no mirarlo directamente. Daba vuelta a la silla discretamente.

—Ayer también encontré flores, mientras estaba en clases. ¿Qué significa? No creo que sea coincidencia. ¡Responde! —Esa mirada, y ese tono...

—No es nada, en serio. Me comí unas y, me cayeron mal. Quería experimentar, soy un científico. —Imbécil. Así se llamó.

—¡¿Es que no confías en mí?! —exclamó, llevándose las manos al pecho.

—¡No! No es eso, Morty. —Reaccionó y sintió el impulso de recordarle cuán importante es para él.

—¡Entonces dime qué mierda te escondes, Rick!

Pero no podía animarse sin sentir las ganas de--

—¡Rick!

Las ganas de--

—¡Rick...! ¿Rick? ¡Abuelo!

Las ganas de dejar salir al Hanahaki mismo.

No se asusten u-u

🥀ꦿ ۫։ຼ ❝Hanahaki Disease❞ RickortyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora