ʟᴀ ᴄʜɪᴄᴀ ᴅᴇʟ ᴍᴀʀᴛɪʟʟᴏ - ꜱᴏɴᴀᴍʏ ʙᴏᴏᴍ [FINALIZADA]

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SONIC

Un día más en esta aldea, rodeado de esta gente..."agradable" y mis mejores amigos. El clima era favorable, el sol estaba radiante como de costumbre y el cielo libre de nubes. Un día perfecto para relajarme recostado en la hamaca de mi choza, sintiendo una pequeña brisa entrar por mi puerta inexistente.

Toda esa tranquilidad se esfuma en cuestión de segundos, al escuchar un ruido muy fuerte que proveía de la aldea. Gruñó estirando mis piernas comenzando a correr a esa dirección; cuando llego veo a Eggman sobre eggmovil con su típica tropa de robots.

— ¡Hoy será el día en que te derrote piña azul! —gritó desde los aires señalándome, para que sus beebots vuelen hacia mí.

— Ya lo veremos Eggy —me hago bolita y comienzo a destruir los robots que se me cruzan.

Pasan unos cuantos minutos y destruyo la mitad, pero a lo lejos diviso que se acercan más. También me percato que mis amigos se han unido a la acción rápidamente luego de evacuar a la gente del lugar.

— ¿Divirtiéndote sin nosotros, Sonic? —escucho la voz de Knuckles a mis espaldas en tono burlón, logró divisar que Tails, Sticks y Amy también llegan junto a él.

— Déjame unos robots a mi también, necesito desquitarme con algunos por haber arruinado mi cita en el Spa.     —suelta la eriza golpeando los robots con su martillo. Es muy hábil.

Sticks atacaba con su boomerang, Tails con un dispositivo mientras volaba y Knuckles con sus puños. Amy y yo estábamos adelante, destrozando los robots hasta llegar más cerca de Eggman. El gordo nos veía a ambos con una sonrisa malvada y tocándose el bigote.

— ¿Creíste que sería así de fácil, Sonic? —pronuncia tecleando algo sobre tu chatarra voladora.— Pues no has visto nada aún.

De entre los árboles salió un enorme robot rojo con pinzas como manos, daba estruendosas pisadas acercándose a paso lento pero amenazante. Eggman reía, y mis amigos se posicionaron para comenzar a atacar. Nos dividimos para dar específicamente  en las partes del robot y derrotarlo más rápido.

Knuckles golpeaba los pies metálicos de la enorme chatarra, Amy junto a Sticks atacaban a los brazos y Tails buscaba en la espalda de este la manera de como desactivarlo.

Eggman al ver lo fácil que era destruir sus robots se frustraba cada vez más, y fruncía mucho el ceño reflejando su ira. Ya no sabía que hacer más que seguir tecleando para llamar a mas robots pequeños, los badniks.

Todo iba bien, mi equipo tenía una gran ventaja comparado a los intentos fallidos de Eggman, hasta que logró ver como el enorme robot quiso golpear la espalda Amy por estar un poco distraída. Corrí hacia ella y la puse a buen recaudo, junto a Sticks.