15: Mariposas Y Una Oportunidad

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Horacio se encontraba sentado en una banca fuera de comisaría esperando a su hermano Dan a que saliera de trabajar, el día era bastante tranquilo, por fortuna no habían personas que vinieran a tocar los huevos como de costumbre, Horacio observaba un grupo de mariposas que volaban cerca de las plantas que decoraban la comisaría, las mariposas eran algo que Horacio adoraba con toda su alma, eran tan bonitas con sus alas coloridas, siendo delicadas y a la vez son tan libres de volar, tan libres justo como Horacio quería ser.

Horacio estaba tan perdido en verlas revolotear que no pudo darse cuenta de la presencia del comisario Volkov, el ruso sólo lo observaba desde la puerta del edificio, desde su vista Horacio le parecía realmente tierno de esa forma, en ocasiones podía sentir un pequeño rastro de ingenuidad en el, sentía el deseo de hablar con él, de decirle la verdad de lo que había pasado entre ellos pero… ¿tendría el valor para hacerlo? El estaba a unos cuantos pasos de él realmente quería hablar con él y justo cuando había reunido el valor suficiente, Dan hizo su aparición llevándose consigo a Horacio.

Su plan se había frustrado de nuevo, sin más que hacer Volkov decidió ingresar adentro del edificio e ir hacia el baño para enjuagar su rostro con el agua fría del lavado en un intento de despejar sus ideas, después de ello simplemente regresó al trabajo.

Dan y Horacio se encontraban rumbo a la casa que Horacio compartía con Gustabo, pues el hombre de cresta quería mostrarle el departamento,, al llegar se encontraron con Gustabo en la entrada de la casa.

- Horacio, Dan ¿Qué hacen aquí tan temprano?

- Pues yo fui a buscar a Dan

- Y yo pedí permiso para retirarme un poco antes del trabajo

- Ya veo pues pasen

Horacio le dio un recorrido por toda la casa a su hermano Dan, mientras Gustabo preparaba algunos sandwiches para almorzar, una vez terminó el recorrido los hermanos se reunieron para comer.

- Oye Gustabo ¿cómo te va con tu relación con el súper?

- Pues bien el me trata de maravilla, es atento y se preocupa por mi bienestar

- Eso me alegra sabía que Fred estaba equivocado en pensar lo peor de el

- Fred es estúpido pero ¿puedo contarte algo?

- Adelante soy todo oídos

- Jack quiere casarse conmigo

- ¡¿Cómo?! – Horacio se sorprendió ante la repentina noticia que terminó por derramar su vaso de jugo

- ¡Oye Horacio ten más cuidado!

- Perdón, perdón ahora lo limpio

- Bueno dejando eso de lado – Dan continuó con el tema – Gustabo ¿Qué le dijiste?

- Pues le dije que lo pensaría pero no sé

- A Fred le dará un infarto como se entere

- Sabes Dan, Fred siempre se entrometido en mi vida nunca me permitió disfrutar mi juventud, mírame ahora mi juventud se ha desvanecido y ahora es cuando por fin consigo el valor de ir en su contra y tener una pareja de verdad

- Y estoy de acuerdo contigo ya estamos mayores y puedes hacer lo que quieras con tu vida

- Si… ya sabes cuantas oportunidades perdí, cuantas personas maravillosas dejé ir solo porque el me prohibía tener una relación y ahora aún con mi escasa experiencia sobre romance, logré encontrar a alguien que me ama y me respeta

- Pues tuviste suerte con ello se que algún día Fred lo comprenderá y eso será cuando el se encuentre frente a frente con el amor

- Ojalá eso suceda… me gustaría que si me llego a casar, el estuviera feliz de eso

- Gustabo… - Horacio susurró el nombre de su amigo mientras le tomaba de la mano en señal de apoyo

- Ya veras que todo saldrá bien

- Si eso espero

El teléfono de Dan sonó por una llamada de Fred, salió de inmediato a contestar, quedándose solos Horacio y Gustabo.

- Gustabo ¿de verdad te casaras con Conway?

- No lo sé, quizás me estoy precipitando, como te dije Jack es la segunda persona con la que intento formar una relación donde exista amor y pues no sé si esto funcione

- Pues asegúrate de conocerlo bien, ya no te preocupes por Fred ni por nadie, solo céntrate en conseguir tu felicidad

- Sí gracias Horacio, te quiero

- Yo también Gus

Dan regresó sólo para despedirse pues Fred le había llamado para saber dónde estaba, Dan le dijo que iría a su casa para encontrarse con él para poder comer así que se retiró de la casa de Horacio y Gustabo.

Al llegar a su hogar Dan se encontró con Fred sentado en la sala, este le saludó y le indico que tomara asiento, el rubio movía sus manos de forma inquieta pues no sabía cómo sacar el tema que tenía en mente.

- Fred ¿qué necesitabas?

- Dan quería preguntarte sobre Gustabo ¿cómo está?

- El está bien, está tranquilo viviendo con Horacio al parecer tienen un trabajo estable gracias al súper intendente así que no les hace falta nada

- Con que el súper eh…

- Fred ya es hora de que aceptes de una vez por todas las decisiones que Gustabo tome, Jack quiere casarse con él

- ¿Cómo dices?

- Fred antes de que hagas un escándalo escúchame primero, Gustabo siempre ha sido un buen hermano tanto para ti como para mi y para Horacio, el siempre ha seguido al pie de la letra tus reglas y condiciones

- Eso lo sé

- El tiene razón, nunca pudo disfrutar de su vida, no pudo enamorarse ni salir con amigos porque tu se lo prohibías, ahora es el momento en el que el quiere alcanzar su felicidad por su cuenta y en esa felicidad está incluido Jack Conway ¿Por qué no lo aceptas?

- Es solo que… Gustabo es lo único que tengo de mi familia de sangre, mis padres hicieron tantas cosas mal que eran un ejemplo deplorable y yo quise enseñarle la forma correcta de hacer las cosas, quería hacer de él una persona de principios con estudios y responsable

- No todo en la vida es ser serio Fred, todos merecemos un poco de emociones y experiencias, estoy seguro que incluso tú deseas enamorarte de alguien ya sea Gregorio, Serjay o quien sabe a lo mejor otra persona

- ¡Lo de Gregorio y Serjay es otro asunto!

- Sea lo que sea, mejor aprende a llevarte bien con el súper

- No prometo nada pero lo intentaré

Fred terminó la conversación y se retiró hacia su habitación, necesitaba reflexionar sobre todo lo que había sucedido en su pasado desde que eran niños, las situaciones difíciles que enfrentaron, las cosas que Fred hizo mal en el momento de educar a Gustabo y finalmente en las cosas en las que deberían cambiar, y si… ¿Gustabo tenía razón? ¿Realmente Conway era el indicado para su hermano? Fred finalmente estaba dispuesto a darle una oportunidad a aquel hombre de intentar hacer feliz a su hermano, solo esperaba no estar cometiendo un error.

Continuará...

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