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(𝙽𝚊𝚛𝚛𝚊 𝚗𝚞𝚎𝚜𝚝𝚛𝚘 𝚙𝚊𝚙𝚞 𝚂𝚞𝚙𝚎𝚛𝚒𝚗𝚝𝚎𝚗𝚍𝚎𝚗𝚝𝚎)

Estoy sentando con el papeleo, vamos que estoy amargado, y por si fuera poco los capullos de Gustabin  y Horacio en federal, la última vez que vi  a Gustabo me sorprendió bastante  los cojones que puede llegar a tener casi se me pone tiesa un par de veces pero estaba tan cabreado que lo único en lo que pensaba era en pegarle un tiro.

𝐕𝐨𝐥𝐤𝐨𝐯- Súper- dice Volkov  desde la radio-¿me copia?
𝐒𝐮𝐩𝐞𝐫𝐢𝐧𝐭𝐞𝐧𝐝𝐞𝐧𝐭𝐞- Alto y claro muñeca, ¿qué coño quieres?
𝐕𝐨𝐥𝐤𝐨𝐯- Horacio y Gustabo  están apunto de salir de federal.
𝐒𝐮𝐩𝐞𝐫𝐢𝐧𝐭𝐞𝐧𝐝𝐞𝐧𝐭𝐞- Y que quieres que haga anormal... Que te acompañe a ver a tu novia.
𝐕𝐨𝐥𝐤𝐨𝐯- No....
𝐒𝐮𝐩𝐞𝐫𝐢𝐧𝐭𝐞𝐧𝐝𝐞𝐧𝐭𝐞- Pues ya está, deja de dar por culo - lo último lo digo co  énfasis para que le quedara claro, la verdad tenía ganas de ver a Gustabo,  pero hay dos problemas 1No tengo ganas de aguantarlo, y 2Tengo orgullo.
Decido ir cerca de la federal para verlos desde lejos, cuando estoy cerca mi móvil suena.
𝐒𝐮𝐩𝐞𝐫𝐢𝐧𝐭𝐞𝐧𝐝𝐞𝐧𝐭𝐞- ¿Si?
𝐆𝐮𝐬𝐭𝐚𝐛𝐨- Superintendente, soy Gustabo...
𝐒𝐮𝐩𝐞𝐫𝐢𝐧𝐭𝐞𝐧𝐝𝐞𝐧𝐭𝐞- No jodas, para nada me había salido tu nombre capullo - suspiro - ¿qué quieres?
𝐆𝐮𝐬𝐭𝐚𝐛𝐨- Nos gustaría a horacio y a mi hablar con usted.
𝐒𝐮𝐩𝐞𝐫𝐢𝐧𝐭𝐞𝐧𝐝𝐞𝐧𝐭𝐞- ¿De qué?
𝐆𝐮𝐬𝐭𝐚𝐛𝐨- Pues de todo lo que pasó
𝐒𝐮𝐩𝐞𝐫𝐢𝐧𝐭𝐞𝐧𝐝𝐞𝐧𝐭𝐞- Voy para aya muñeca-le cuelgo y en menos de dos minutos estoy en la puerta de la federal. Veo a gustabo con el pelo más largo y con la ropa de policía.

- Hola... -Dice tímido.

- ¿Donde está la otra súper nena? - pregunto.

- Sigue dentro, no se por que le a caído más tiempo que a mi la verdad - dice mirando para abajo - quería pedirle disculpas por mi comportamiento aquel día... Ese no era yo

- ¿ A no?.... Entonces... ¿ Quien coño era?- pregunto sarcásticamente.

- Se... Se llama Pogo, es como mi yo "oscuro" por así decirlo, sale cuando me machacan mucho o cuando me hacen daño...- dice un poco apenado, la verdad me gustaría conocer su historia

- Osea... Que, el que mata, manipula, insulta....etc, es Pogo

- Si, siento no haberle informado de mi situación  psicológica súper... pero es complicado

- Tranquila muñeca, aunque deberías habermelo dicho, así no te hubiera  mandado a federal, si no a un psiquiátrico

- ¡Papuuuu! - dice horacio al verme, se acerca a mi y me abraza.

- ¡Quita coñooo!- lo aparto, Gustabo suelta una pequeña risa que me derrite el corazón.

-Que pasa Papu, ¿no me a echado usted de menos?

- No, capullo

-¿ C.. Como esta Volkov? - pregunta tímido.

- Tu novia está bien, tranquila- veo como se le forma una leve sonrisa.

- Bueno... ¿ Donde vamos SuperVergaArdiente?

- ¿¡ Como coño has dicho?! - digo sacando la porra.

- Su... SuperVergaArdiente... - dice Gustabo descojonandose.

- ¡Capullo! -grito mientras le doy a Horacio con la porra- ¡Anormal!

- Pare, pare, que lo mata - dice gustabo con los ojos rojos de tanto reír, guardo la porra y les indico que suban al coche.

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(𝙽𝚊𝚛𝚛𝚊 𝚗𝚞𝚎𝚜𝚝𝚛𝚘 𝙶𝚞𝚜𝚝𝚊𝚋𝚒𝚗)

Llevábamos ya dos semanas fuera de federal y el SuperIndigenteMaximo nos había echo subinspectores. Voy camino de la comisaría ya que mi súper me a dicho que quería hablar conmigo, aparco el coche que el súper nos a dado y entro en comisaría, toco a la puerta del súper y este me indica que pase.

- Hola súper - digo- ¿Que quería?

- ¿Tu qué opinas de mi gustabin?-esa pregunta me pilla por sorpresa.

- Pues... que es usted un hombre muy... muy maduro y muy guapo- se baja las gafas y me mira a los ojos.

-¿Muy guapo? -dice acercándose a mi.

-S...Si- digo sin saber si la e cagado o no, deduzco que no cuando planta un beso en mis labios-S... Súper, ¿Que hace?- digo con dificultad  debido a los besos que deja sobre mi cuello.

- ¿Que pasa muñequita? - dice con esa voz ronca - ¿es que no te gusta?

- Si... Si me gusta -digo excitado.

-Pues entonces  no hagas preguntas, y disfruta - me sube encima de su mesa mientras deja besos por mi cuello, se coloca entre mis piernas y sus manos bajan hasta mi cadera haciendo que me acerque más a su cuerpo, el intendente no para de besarme en ningún momento.

- S... Súper- me responde con un gruñido desde mi cuello - podría entrar alguien - el me deja un beso tierno en el cuello.

- Tienes razón muñeca -dice con los labios un poco rojos debido a los besos proporcionados -mejor seguimos esta noche en mi casa.

-Vale -digo ya recuperando la compostura.

-Luego nos vemos, ahora tira para el trabajo Fred - yo le asiento, la verdad no me gustaba cuando me decía Fred pero al fin y al cabo es un bombre de tapadera....


𝐄𝐝𝐢𝐭𝐚𝐝𝐨


𝐶𝑙𝑎𝑟𝑜 𝑄𝑢𝑒 𝑇𝑒 𝑄𝑢𝑖𝑒𝑟𝑜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora