0 1, 🍒

4.9K 474 24
                                    

Se encontraba arreglando un automóvil desde hacía ya un buen rato, este tenía cierto problema en motor y vaya que aquello le estaba costando bastante, no tenía el apoyo de ninguno de sus mecánicos porque ya había terminado su turno, ya era de noch...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Se encontraba arreglando un automóvil desde hacía ya un buen rato, este tenía cierto problema en motor y vaya que aquello le estaba costando bastante, no tenía el apoyo de ninguno de sus mecánicos porque ya había terminado su turno, ya era de noche y por ende no había nadie, excepto Armando que era el jefe y siempre se quedaba hasta tarde no le gustaba dejar las cosas sin acabar. Pasaron unas cuantas horas y la media noche llegaba, Armando aún continuaba con lo suyo ya le faltaba muy poco por lo tanto en muy poco tiempo se iba a retirar o al menos eso era el plan porque escucho como la reja del taller se abría, aquello lo extraño demasiado por aquello sacó la pistola que siempre portaba —la llevaba mas que nada por protección porque los Santos es bastante peligroso a cualquier hora— sin dudar salió y se encontró con cierto pelirrojo bajando de un automóvil que no logró reconocer, pero aquello era lo menos, la persona que iba llegando era el "chino" siendo este su empleado y su amigo, se puso nervioso de verlo con tantos golpes pintando su rostro.

—¿¡Que mierda te sucedió!?

—No es nada, solo tuve un ploblema y ya

—¿Un problema?, Yun por amor de Dios, dime que te sucedió

—Tranquilo Almando, no te alteles polque al final no es nada

—Vamos —sin dudar tomo la mano de su compañero cosa que le tomo por sorpresa, pero no dijo nada por aquella acción, sentía demasiado dolor como para quejarse—

Caminaban tomados de la mano con dirección hacía dentro del taller, el mecánico dejó sentado al pelirrojo sobre una silla y fue en búsqueda de un botiquín, no tardó demasiado tiempo en dar con este.

—Yun, dime ¿que te sucedió?

—Ya te lo dije, no fue nada

—Por favor dímelo, me preocupas bastante

—Por favor dímelo, me preocupas bastante

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Herido. Yunando Donde viven las historias. Descúbrelo ahora