Las cosas cambian para bien o para mal...

CAPÍTULO 7

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Antes de comenzar me gustaría agradecer a las personas que han estado votando y comentando, muchas gracias, me animan a seguir (:

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*POV CAROLINE*

Había pasado una semana desde que había descubierto el interés secreto de Klaus, desde ese día me había acostumbrado a ir por ahí de vez en cuando, a admirar más cuadros y dibujos e incluso me animé a comenzar una pintura propia, nunca lo había hecho pero el no poder salir a menudo por mi seguridad aparte de que mi mente no se quedaba quieta y el aburrimiento, me hizo decidirme a aceptar la idea que una vez hacía unas noches me había propuesto Klaus.

Al día siguiente de que dije que lo iba a pensar, En el centro junto a la hermosa pintura no-terminada de él, un paquete de pinceles hermosísimo con un listón color azul (de nuevo, mi color favorito) y un caballete de madera con unos acabados preciosos además de un lienzo en blanco, una pequeña nota asomaba por el listón "Todo tuyo, cariño" decía, no pude evitar voltear los ojos ante la última palabra.

Le dediqué una rápida mirada más a aquella pintura que me sacaba el aliento cada vez que la veía, había tanta... pasión, dolor, nunca había sido tan sensible al arte, jamás me había interesado y ¡por Dios!, quizá fueran las hormonas pero, era algo tan glorioso, menee la cabeza y me puse a ver el lienzo en blanco durante un rato, pensando qué pintar, nada, no se me ocurría nada, incluso llegué a pensar en copiar aquel hermoso y triste ángel de las hermosas alas, pero luego deseche esa idea, sería un plagio, suspiré, noté que alguien estaba ahí.

-¿Acostumbras asechar chicas a menudo?-Le dije aún con la mirada en el lienzo vacío

-Encontraste mi regalo-Dijo aún en el marco de la puerta-Tenía la esperanza de mostrártelo yo mismo

-Supongo que arruiné la sorpresa-Dije ahora si volteando, sus ojos se encontraron con los míos y después se posaron sobre el lienzo frente a mí

-A veces es difícil-Dijo y yo fruncí el ceño-Encontrar una inspiración, una idea-Dijo seriamente mientras se acercaba a mi lado, olía un poco a bosque, no sabía si ese aroma existía pero juraría que él olía a eso ese día, supuse que había ido con Elijah a alguna reunión con los lobos o algo así- Pero cuando ocurre, es casi mágico...-Dijo- cuando la encuentres te darás cuenta.

Había tanta intensidad en sus ojos que no sabía que contestar, aparte mis ojos de los de él.

-Ya.. Quizá no es lo mío-Dije mirando ahora hacia el cuadro de él, fruncí el ceño una vez más, noté que abría la boca para decir algo pero fui más rápida- ¿Por qué?... ¿Por qué no la has terminado?

Se quedó en silencio un momento hasta que hablo, quitando la mirada de mis ojos a la pintura, sus ojos parecían haberse ensombrecido

-Es una larga historia Caroline, tal vez algún día te la cuente... vine a avisarte que la cena ésta lista, yo no podré estar pero Alaric te ésta esperando-Dijo mientras caminaba de nuevo fuera de la galería, antes de salir agregó:

-No te des por vencida Caroline, la inspiración siempre aparece-Me dijo aún de espaldas y segundos después ya no estaba ahí.

Miré por última vez el lienzo blanco, vacío frente a mí, aún no sabía que pintar, mañana, me dije a mi misma mientras apagaba las luces y cerraba la puerta tras de mí.

Fui a la mesa y efectivamente ahí estaba Alaric esperándome, se levantó y me ayudó con la silla, le agradecí y comimos en silencio por un rato.