TREINTA

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POV. MIN YOONGI

— Ya estoy listo, ¿Ya está el desayuno? Ya tengo hambre. -dije al sólo salir de la habitación, detrás de mí venía T/N.-

— Ya está casi listo. -dijo Jin desde la cocina.-

— YoonGi. -dijo NamJoo acercándose a mí.- T-te buscan en la entrada. -me vio y sólo dio unas pequeñas palmadas en mi hombro.-

No esperaba a nadie más, estaba mi familia completa y amigos.

Me acerqué a la puerta que estaba cerrada, la abrí y en eso se dio la vuelta para tener su mirada en mí. Sentía que mi sangre se iba hasta las uñas de mis pies al ver aquella señora.

— YoonGi... Mi hijo... -dijo mi madre tratando de tocar mi cara, esquivé su tacto y me le quedé viendo. Hace meses que no la veo, podría jurar que ya lleva más del año, se ve diferente a la última vez, tenía el pelo largo y negro, ahora lo tiene corto y castaño.- Hijo, por favor, escuchame...

— No, no lo haré. -la interrumpí cruzandome de brazos.- Me causaste mucho daño, y no sólo a mí, así que por favor pido que te retires.

Salí del departamento, dejando emperejada la puerta.

— Hijo, sólo pido que me escuches, sé que causé mucho daño en el pasado, pero por favor... Por el bien de la familia, pido que me perdones, Min YoonGi. -dijo con la voz entré cortada, tenía lágrimas recorrer por su mejilla, sentí un dolor fuerte en mi pecho.- Hijo, pido disculpas por todo, en verdad, por todo...

— Muy tarde... -apreté mi mandíbula y mis nudillos ya estaban blancos de tanto que apretaba mi mano.- Vete por favor, déjame a mí hacer mi vida.

— Prometo ya no meterme en tus asuntos pero por favor, Min YoonGi, hijo... Perdóname.

Aiden, llama a Papá. -escuché decir a T/N detrás de la puerta.-

Maldición, no ahora...

Cuando pensé que nada más podía pasar vi como mi madre tenía intenciones de abrir aquella puerta, yo la alejé de ahí y de un tirón cerré la puerta.

— No. -dije al ver las intenciones de mi mamá.-

Se alejó de mí y me miró a los ojos.

— ¿Tienes un hijo? -dijo y callé sin aún apartarle mi mirada.- ¿S-soy abuela? -sonrió y vi como cayeron nuevas lágrimas por su mejilla, quitando así un pocos de su maquillaje.-

— Aléjate de mi familia...

— No, no... No me pidas eso. -me agarró de mi camisa.- Quiero conocer a mi nieto.

— Quiero que te alejes de mi vida, de mi familia y todo lo que tenga que ver conmigo, no te quiero a mi lado, sólo le das más peligro a las cosas, y-yo... Te tengo miedo, y no quiero que lastimes de nuevo a mi familia.

— ¿Cómo me puedes estar diciendo esto Min YoonGi...? -me vio.- Cambié, cambié para el bien de mi familia, para mi bien también. Hijo, en verdad cambié, fui a terapias y... -la interrumpí.-

— Ya por favor... Déjeme a mí hacer mi vida. -me giré para meterme de nuevo a mi departamento pero ella me lo prohibió agarrandome de mi muñeca.-

— Hijo...

— ¿Te vas por tú cuenta o le llamo a seguridad?

— Min YoonGi. -la vi.- Feliz cumpleaños hijo. -secó sus lágrimas.- Ten, te traje un regalo, por favor, aceptalo, no me lo rechaces... Por favor. -saco de su bolso una bolsa de regalo y me lo extendió.-

Dudé mucho si hacer lo o no, pero al final extendí mi brazo y agarré aquel regalo.

— Te amo mucho hijo... Espero un día poder tener tu perdón. -me acarició mi mejilla y se fue, lo último que vi de ella fue que se despidió desde el elevador.-

© Mi Linda Prisionera. Siempre Juntos || YG ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora