Número desconocido

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Las dos desayunaron entre risas y caricias, ninguna de las dos podía dejar de tocar a la otra incluso con la mesa de por medio, no se les podía culpar, tantos años sin la otra habían sido un calvario. Hablaron de los próximos días y de lo que deseaban desear, Lisa le prometió una linda cena junto a la playa tal y como la noche anterior.

Cuando Jennie le contó lo de Taehyung quedó completamente anonadada, jamás imaginó que el joven se fuera a tomar con tanta calma la situación pero la agradecía. Ahora de lo único que se preocupaba era de la reacción de Dahyun, pero ya pensaría en eso en los próximos días antes de regresar a Seúl.

— ¿Nos vamos? —Lisa le ofreció la mano y Jennie la tomó entrelazando sus dedos — Encajan muy bien. — Lo había dicho más para ella misma que para Jennie.

— Lo sé cariño. — Jennie se detuvo en el marco de la puerta y besó tiernamente a la rubia — Vamos, ya quiero ver la cara que pones cuando me veas en lencería. — Le guiñó el ojo y antes de siquiera dar un paso al frente, Lisa ya la estaba jalando del brazo con mucha delicadeza.

— ¡Pero que esperas Jennie, no te quedes ahí!

Jennie retuvo una carcajada al ver el rostro lleno de emoción de la rubia, no tenía idea de lo pervertida que podía llegar a ser Lisa pero le gustaba, a pesar de haber hecho el amor durante horas, no se sentía cansada, de igual forma habían dormido hasta tarde ya casi siendo medio día. 

Tenía que aceptar que todo lo que hacía Lisa le sorprendía y por un momento se preguntó si había sido igual que con Dahyun. Negó rotundamente alejando esos pensamientos, no podía estar atormentando con una relación que simplemente ya no funcionaba y que por supuesto, había terminado.

Sabía que el resto de su vida sería magnífica, Lisa la haría la mujer más feliz del mundo y lo confirmó esa misma mañana con todas las rosas que había comprado para ella, aún no tenían un título para su relación pero tampoco le daba muchas vueltas, por supuesto que lo primero que tenía que hacer era cancelar su boda oficialmente, se preguntaba como se lo tomarían todos, quizás todo mundo la trataría de una zorra por haber arruinado aquél compromiso.

Pero ninguno sabía la realidad del asunto y tampoco quería ser ella la que revelara todo,  esperaba que Dahyun fuera sincera con Lisa, aún así estaba segura que la otra rubia terminaría junto a Sana tarde o temprano, quizás más temprano que tarde. Se preguntaba si Lisa y ella se miraban de la misma forma en que las dos rubias lo hacían.

— Ay no, tomemos otro camino — Jennie giró a la Lisa hacia otro lado mientras la empujaba.

— ¿Qué pasa Nini? — Lisa la miró un tanto preocupaba pero se relajó al instante cuando vio de que se trataba — ¿No la quieres ver no? — Sonrió de oreja a oreja al saber lo que le esperaba.

— ¡Kim! 

— ¡Genial! — La pelinegra se detuvo en el momento en el que escuchó la voz de su mejor amiga, se venía una sesión de burlas — Ah, hola Jisoo, no te vimos. — Intentó sonar lo más segura posible pero sabía que era inútil.

— ¡Bah! ¡Patrañas Kim! — Jisoo se acercó hasta tomar a Jennie de los hombros, comenzó toqueteando su cuerpo evitando la mirada asesina de Lisa — Déjame decirte Lisa — Le apuntó con un dedo y esta frunció el ceño — Que está en perfectas condiciones ¡Oh por Dios! — Dijo mientras tomaba a Jennie del cuello — ¿Eres vampiro o que Manoban? 

— Yo no... bueno si... pero es que... — Lisa se puso nerviosa haciendo que su habla fuera un desastre — Es que yo... — Balbuceó cosas sin sentidos hasta que Jennie intervino.

La chica del árbol [JENLISA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora